El barco había encallado en el Reino de Goa, específicamente en la Villa Foosha. La pequeña castaña bajó acompañada de su ahora abuelo adoptivo.
-¡Señor Garp! ¿Cómo le fue? Llegó muy pronto -Dijo una hermosa joven recibiendo a los recién llegados-
-Ella tiene razón Garp ¿Sucedió algo?
-¡Makino! ¡Alcalde! Todo está bien, solo hubo una pequeña situación de la que les hablaré a detalle dentro de un rato -Dijo moviendo su cabeza en dirección a Mai- Cambiando de tema ¿Dónde está Luffy? ¿Se ha portado bien?
-¡Está muy bien! Justo ahora se encuentra comiendo un aperitivo en el bar.
-Entiendo, oye enana -La castaña puso su atención en él- Ella es Makino y él es el alcalde, son amigos de nosotros ¿Esta bien? -La pequeña asintió-
-¿Cómo te llamas linda? -La chica de cabellos verdes se inclinó hasta la altura de la castaña-
-Yo...
-Tranquila, no tienes que sentir pena.
-Me llamo Mai.
-¡Que lindo nombre! Como sabrás, yo soy Makino ¿Tienes hambre? -Mai asintió de forma animada- Bien, vamos a darte algo de comer. Así conocerás a Luffy.
-Muchas gracias señorita.
-Puedes decirme Makino -Dijo riendo- ¿Vamos? -Acercó su mano a la infante-
-¡Vamos! -Tomó su mano para así ir en dirección al bar-
-¿Ahora me contarás la situación Garp?
-Si señor, primero que nada vamos al bar. Siento que moriré de hambre -Se escuchó como su estómago rugía-
-Nunca cambias, vamos.
Ambos siguieron a ambas chicas y entraron al bar.
-Luffy.
-¿Hmm? ¡Auh Makuino! -Dijo con la boca llena-
-Cuida tus modales, tenemos a una invitada -Dijo haciéndose a un lado mostrando a la castaña, al sentir la atención del azabache puesta en ella se sintió avergonzada y se escondió detrás de la mayor-
-Ah, lo siento. Soy Luffy, es un placer -Dijo bajando de la silla para extender su mano- ¿Qué tienes? ¡No tengas pena! -La castaña se acercó a pasó lento y estrechó su mano con la de él-
-Me llamo Mai, el placer es mío.
-¿Qué haces aquí? ¿Y tus padres?
-¡Oye Luffy! Más respeto.
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『 𝐅𝐈𝐑𝐄 』|𝐏𝐨𝐫𝐭𝐠𝐚𝐬 𝐃. 𝐀𝐜𝐞 ❑
Fanfiction❑ 𝐀𝐦𝐛𝐨𝐬 𝐧𝐚𝐜𝐢𝐦𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐬𝐚𝐧𝐠𝐫𝐞 𝐬𝐮𝐜𝐢𝐚, 𝐝𝐞 𝐝𝐨𝐬 𝐝𝐞𝐦𝐨𝐧𝐢𝐨𝐬 𝐝𝐢𝐟𝐞𝐫𝐞𝐧𝐭𝐞𝐬. 𝐒𝐞𝐧𝐭𝐢́𝐚𝐦𝐨𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐥 𝐦𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐛𝐚 𝐞𝐧 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐫𝐚, 𝐥𝐨 𝐮́𝐧𝐢𝐜𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐞𝐜𝐞𝐬𝐢𝐭𝐚́𝐛𝐚𝐦𝐨�...