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A medida que el día avanzaba, los chicos y Maitenían cada vez más sed y calor. Nami y Vivi iban sobre Pestañas.
-¿Crees que estarán bien?
-¡Pues claro! Seguirán nuestras huellas.
-Me preocupa Mai, ella cabía con nosotras, aunque íbamos a ir muy pegadas.
-Tienes razón, pero ella podrá controlarlos.
Mai ya casi no sentía sus piernas, Chopper ahora caminaba por su cuenta. Ace simplemente sentía un poco de molestia, tenía sed, pero no como los demás.
-¿Podemos...? -Respiraba agitada- ¿Podemos descansar un rato?
-Perderemos el rastro.
-¡Cabeza de musgo, es una señorita! Mai debería de estar también sobre ese estúpido camello.
-Ven, te cargare.
-No, te vas a cansar.
-¿Entonces no quieres ir a caballito? -Sonrió al ver como ella reía. Ella se subió sobre su espalda y él agarró sus piernas- ¿Vas cómoda?
-Voy bien, gracias.
Siguieron caminando, Ace sintió como ella reposaba su mentón sobre su hombro. Vio de reojo que había quedado dormida, él caminaba sin decir ni una sola palabra. Ibadistraído, levantó la mirada.
-¿Encontraron el rastro de Vivi y Nami? -Quedó estático, no había nadie con él además de Mai. No pudo evitar gritar- ¡¿Qué?!
-¡¿Qué pasó?! -Se levantó asustada, se soltó del pecoso y cayó de espaldas. Hubiese impactado contra el suelo de no haber sido por Ace quien aúnsostenía sus piernas- ¿Ace, estás bien? -Preguntó de cabeza-
-Lo estoy, pero tenemos un pequeño problema -Rió nervioso, la soltó y ella se paró-
