Reencarnado en un Kitsune.

Un día de escuela: Parte 2

Zest: Pero....

Zest le toma la muñeca y empieza a apretarla, tanto que pierde su fuerza y suelta a Zest.

Zest: Yo también lo soy.

Juliuz empieza a sentir algo raro en Zest, algo anormal y extraño, pero el dolor que siente en su muñeca no lo deja concentrarse.

Zest: [Ice body] (Cuerpo hielo).

El cuerpo de Zest se cubre de escarcha y un aura cían que desprende un frío tan intenso que el suelo bajo los pies de Juliuz volvió a solidificarse en cuestión de segundos.

Zest: Me pregunto por qué las personas piensan que el hielo es débil contra el fuego.

Juliuz: ¡Maldit* zorro de pelo pintado, te ordeno que me sueltes!

Zest: Lo haré, pero tendrás que pedirle de rodillas a Stella por su perdón.

Juliuz mira a la elfa oscura, que siente miedo al ver esa cara llena de ira odio hacia ambas personas.

Juliuz: ¡¡¡JAMÁS ME DISCULPARÉ CON UNOS MUERTOS DE HAMBRE COMO USTEDES!!! ¡¡¡YO SOY UN NOBLE Y SI LO DESEO USTEDES ESTARÍAN MUERTOS JUSTO AHORA!!!

Zest: Sólo tenías que hacer dos insignificantes cosas para salir de esto con algo de dignidad, no me haré responsable de lo que te pase ahora.... [Garras de hielo].

Todo el frío del Cuerpo hielo se va a la mano de Zest, sus garras crecen y se incrustan en la carne del chico gato.

Juliuz intenta zafarse, pero nota que la fuerza física de Zest es superior a la suya, ¡no puede soltarse ni con las dos manos! Los hombres zorro son una de las razas más débiles de los hombres bestia, sin gran poder mágico, fuerza física o vitalidad, solo cuentan con su astucia para sobrevivir, pero este chico tiene mucho poder mágico y fuerza ¡y ni siquiera se está esforzando!

Zest: De donde vengo practicamos el respeto a los mayores, tendrás 15 años, dinero y talento, pero hay que aprender a respetar... Hoy voy a disciplinarte... Última oportunidad, pide perdón a Stella.

Juliuz: ¡¡Calláte!!

Juliuz intenta patear a Zest en el estómago, pero este utiliza su propia pierna para parar su patada.

Zest incrementa el frío y la mano de Juliuz se torna azul, lo que Zest hizo fue congelar sus venas y obstruir el flujo de sangre a la mano, sino es tratado pronto, podría perderla.

Juliuz grita de dolor y maldice a Zest incontables veces, este se cansa y lo suelta, pero también le da una patada que hace que se estrelle contra una de las paredes del edificio y se hunda en la pared.

Zest: No sé que será eso de la Clase Especial, pero si crees que el talento te lleva a la cima y te permite pasar por encima de los demás, estás mal de la cabeza.

Aunque Juliuz está lejos puede oírle con claridad, en estos momentos está muy lastimado y su muñeca muy herida como para seguir luchando.

En un momento, se escuchó un aplauso, todos voltearon a ver, era un pequeño chico elfo, una de las pocas personas que apoyaron a Zest en silencio.

En cuestión de instantes, todos los ocultos en las sombras salieron a la luz y comenzaron a aplaudir y gritar, finalmente alguien desafía a este tirano, a su vista, Zest es un faro de esperanza.

En cuanto a Zest, estira sus colas, tomando a Stella de la cintura y bajándola del árbol delicadamente.

Zest: No esperaba verte tan pronto, perdón por no haber llegado antes.

Stella: No... Soy yo la que debe disculparse, sigo causándole problemas.

Zest: Enseñarle a un tonto su lugar no es un problema, ¿estás bien? Esos golpes fueron fuertes.