Carrera en la montaña: Parte final.

558 85 1
                                    

(Narrador omnisciente).

Zest: ¡Cachorro!

Alan: ¡Furry!

Ambos: ¡¡¡NO PERDERÉ CONTRA TI!!!

Alan salta varios metros de alto y trata de alcanzar a Zest y hacerlo caer, pero él devuelve sus colas a su tamaño original y escapa del ataque.

Zest lanza bolas de Fuego sagrado hacia Alan, este las esquiva y sigue corriendo, pero entonces nota que hay fuego blanco cubriendo el camino.

Zest lo había engañado, usó el fuego para cortarle el paso, Alan, sin temor alguno pasa sobre el fuego, sin quemaduras serias, gracias a su velocidad y continúa corriendo.

Zest dá giros y volteretas en el aire mientras avanza a toda velocidad, se diría que están igualados, pero Zest tiene la ventaja, Alan tiene un punto de apoyo el cual es el suelo, tiene que frenar para girar en curvas cerradas, esquivar árboles y piedras, mientras que Zest tiene todo el terreno a su favor, puede apoyarse en cualquier parte y no requiere desacelerar en ningún momento.

Alan: ¡Se acabaron los juegos!.... [¡Lighting Body!] (Cuerpo rayo).

Varios rayos son expulsados del cuerpo de Alan y su velocidad se dispara de manera abominable, Zest no se dá por vencido y se mueve a mucha velocidad, incluso calcula una ruta más rápida a la montaña y no duda en dejar a Alan corriendo sólo.

Alan nota esto y lo sigue, no lo dejará ir tan fácil, mucho menos ahora que sabe que hay una mejor ruta para correr.

Ambos van a la cabeza siendo Alan un poco más rápido, Zest, al notar que ya no hay árboles donde apoyarse y realizar acrobacias, se ve obligado a bajar al suelo, en ese entonces Alan consiguió una ventaja insuperable, perdiendo a Alan de vista, Zest sólo espera que la suerte lo acompañe.

Zest se detiene al notar que frente a él hay un risco de al menos 400 metros de alto, y Alan está tratando de escalarlo, pero su velocidad es pobre debido a que la inclinación del acantilado es hacia el frente y se queda sin lugares a los que agarrarse.

Alan: ¡Ahg! ¡Maldit* sea!

Zest sonríe, sus plegarias fueron escuchadas, corre y activando Cola blindada, incrusta sus colas en la pared del acantilado y las usa como punto de apoyo mientras que usa sus manos y pies para subir más rápido todavía.

En segundos, Zest llegó a la misma altura que Alan y siguió de largo, Alan, sin darse por vencido, deja el cuidado de lado y escala con mucha velocidad, alcanzado a Zest, este al notar que Alan estaba cerca, estira sus colas y sube como araña, llegando a la cima del acantilado.

Zest: ¡Sí!

Alan: ¡¡No te olvides de mí!!

Alan estaba a poco de la cima, coloca su pie en una roca de aspecto sospechoso, cuando estaba por subir esta se desprende, Alan no consigue agarrarse de nada y empieza a caer.

Alan: ¿Es todo? ¿Voy a morir? ¿Y sin haber tenido novia? Qué triste vida la mía...

Cuando todo parecía perdido, Alan abre los ojos y nota la figura de Zest, quien lo alcanza, lo sujeta del torso con una cola y entierra el resto de sus colas en la pared, pero eso no paró del todo la caída y ambos caen a doce metros de altura.

Zest grita de dolor, incuso sus colas, a pesar de estar blindadas, recibieron un daño grave y están dobladas en una posición anormal, varias costillas rotas y un hombro dislocado.

Alan también recibió daños, pero a comparación de Zest, no es nada.

Alan: ¡¿Pero qué haces?!

Reencarnado en un Kitsune.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora