Reencarnado en un Kitsune.

Nuevo compañero.

(Narrador omnisciente).

(Con Murata).

El humano estaba en el jardín principal de su "casa", mientras sostenía un libro con una mano y con la otra sostenía una copa llena de leche.

Hasta que de pronto sus sentidos sobrehumanos captaron algo, y entonces dirije la vista hacia donde provenía el sonido.

*¡Uyyyyyyy!*.

Murata: ...El que dijo que los gatos no vuelan, felicidades, se equivocó, espero que Zest logre atraparla.

No necesita estar en un lugar en concreto para saber que es lo que sucede, sus sentidos están muy desarrollados.

Murata: Alan sigue haciendo de las suyas, espero deje de hacerlo.

Entonces oye algo más y arruga la cara cómo si le hubiera pasado a él mismo.

Murata: Auch, creo que a alguien le dió lumbago.... ¡Rayos, se me olvidó! ¡Los dejé en el horno!

De repente empieza a correr a la cocina porque olvidó algo bastante importante.

Saca dos pasteles del horno y los deja en una mesa para que se enfríen.

Murata (Sonrisa malvada): Jajaja, ya quiero ver las caras de esos dos cuándo lleguen.

(Con Zest).

El Kitsune salta de techo en techo para intentar alcanzar a la gata ebria, está muy alto y sólo puede atraparla cuando esté cerca.

Chica gato (Aleteando): ¡¡Puedo volar!! *Hip*

Zest: ¡¡No, no puedes!!

En eso la chica gato pasa a un lado de una bandada de patos, ella los mira y uno le devuelve la mirada.

Chica gato: ¿Qué pata contigo?

Y muy lejos en una montaña.... Alguien se murió de la risa.

Zest: ¿Por qué sólo esto me pasa a mí?

Zest llega a una torre, la cuál trepa rápidamente y la usa para llegar hasta la chica gato.

Lo intentó, pero sólo llegó a rozar su trasero por accidente.

Chica gato (Riendo cómo loca): ¡Kya! ¡Pervertido! Jajajaja.

Zest: ¡Demonios! [Speed increase].

Acelera y llega hasta donde calcula que caerá la chica gato.

Zest: ¡Te tengo!

La chica gato hace un giro en el aire y a propósito se engancha la cara de Zest con sus piernas.

Por el impulso que tenía, los dos salieron volando hasta llegar al piso donde empezaron a rodar y rodar hasta detenerse en un lugar sin nada de gente.

Chica gato (Sonrojada): Mmmm, ¡Nyaaaah!

Por la forma en al que habían caído, la gata está sentada sobre la cara de Zest.

Chica gato (Con tono pervertido): No sabía que tenías esa iniciativa nya.

Las colas de Zest la envuelven, dejando sólo sus pies y su cabeza visibles.

Se levanta a una velocidad sobre natural y se quita la máscara para respirar mejor.

Zest (Sonrojado como tomate): Eso... Fué asqueroso.... ¡No lo vuelvas a hacer!

Chica gato: Mmmm.... Nyo prometo nada....prrrrrrr.

De la nada empieza a frotar su cabeza contra las colas de Zest y comienza a ronronear.