Penthouse #Wattys2023

CAPÍTULO 14: ZERO O'CLOCK

Jungkook, Zain y yo nos encontramos en el epicentro y para colmo también en el centro de las miradas. Tengo que pegar un par de berridos para que la gente se vaya apartando del circulito que habían montado, tras la escena brusca de Jungkook apartándome del singapourese.

Sigo a su lado, ya que el tatuado en todo este rato no me ha soltado el brazo. Su agarre es un poco fuerte, pero no me incomoda—ojalá poder decir lo mismo de sus ojos.

—¿Se puede saber que llevas haciendo toda la noche?

El reproche de Jungkook se clava en mí, haciéndome sentir por un momento miserable, cómo si mis actos tuvieran algo que ver con él, es decir, cómo si yo le estuviera fallando.

—Jungkook me has dejado sola...

Las palabras de Cloudy en este momento me son bastante indiferentes, y se ve que para él también. Ya que sin ni siquiera molestarse en mirarla le dice que se vaya—el sentimiento de alegría al escucharlo me consume por dentro—. La nublada parece haberse quedado impactada ante su tono borde, pero Zain se lleva a su amiga antes de que la situación se agrave más de la cuenta.

—¿Piensas contestarme? —Sus ojos no necesitan ser azules para sentirme congelada.

—Hago con otros lo que no puedo hacer contigo —joder Alex.

Me suelta, ¿cómo es posible que sienta ahora más dolor, cuándo me ha dejado libre...?

—No me vengas con esas, Alex —da un paso hacia delante—. El laberinto, la fiesta y el Amazonas, ¿no han significado nada para tí?

Trago saliva. Sentimientos encontrados: dudas, felicidad, miedo, ¿amor? Muy bien, Jungkook. Gracias por esta inestabilidad emocional que me provocas.

—No sabía que esos lugares fueran tan importantes...

Mis palabras son vagas lo sé, pero me tengo que refugiar en ellas, estoy demasiado conmocionada para siquiera pensar otra respuesta. La cercanía de su cuerpo, su mirada ambigua y esos labios entrecortados... No hacían más que gritarme que lo besara.

—Porque no lo son —el tacto frío de sus manos hacen que un escalofrío me recorra el cuerpo—. La única que me importa de cualquier lugar eres tú.

Pestañeo varias veces incrédula por sus palabras, ¿me acaba de admitir que le importo? Me odio. ¿Por qué no me puedo sentir feliz, cuando mi corazón se quiere salir del pecho? Mafia, mafia y más mafia. Es lo único que grita mi maldito cerebro, tengo enfrente a Jungkook y solo puedo pensar en ponerle el puñetero chip.

Pero no puedo hacerlo, a él no.

—Jungkook... —Lentamente aparto sus manos de mi cara pero no las suelto —. Hablemos de todo esto antes de medianoche, ¿sí?

Suelta mi agarre con desdén haciéndome sentir vacía y antes de marcharse logro escucharle:

—No hace falta hablar de nada, me lo has dejado bastante claro.

Su cuerpo se pierde entre la multitud pero mis ojos lo siguen viendo, respira Alex, solucionaremos esto, siempre lo hacemos.

Al cambiar por fin mis ojos de objetivo puedo ver como Zain sigue consolando a su amiga, y sé que tengo que hacer un buen nudo a todos estos sentimientos, y ponerme manos a la obra.

—Cloudy, ven, tenemos que hablar.

La chavala me mira sin decir nada, pero cuando comienzo a caminar afuera de la fiesta ella me sigue cabizbaja por detrás. Cuando la muchedumbre ya no está tan presente decido que es momento de darle la cara.