Penthouse #Wattys2023

CAPÍTULO 26: BLACK SWAN

—Antuán ya ha pasado una semana por el amor de Dios —sigo al italiano por toda la habitación mientras está haciendo outfits para esta noche.

—¿Y qué? Él no volverá —parece sollozar pero lo conozco demasiado y sé que lo hace por montar drama.

—Ya te dije que lo sentía a pesar de haber sido tu culpa, yo misma dije "Kai se va"...

—¡Pero no pensaba que se fuera de verdad! —Su tono y actitud pueden conmigo así que revelo la sorpresa para que deje la intensidad de lado, ya tengo suficiente con Jungkook.

—Kai volverá —Antuán arroja las prendas de su mano en la cama y avanza hacia mí.

—¿Cuándo? —Miro la hora que marca mi móvil.

—Debería haber llegado ya —ahí va, esa expresión: la boca abierta al igual que sus ojos.

—¡¿QUÉ?! —Tapo su boca con la palma de mi mano.

—Shhh, acabarán viniendo todos por tus gritos —Antuán quita mi mano y comienza a corretear por la habitación.

—¿Y ahora qué me pongo? —No me da pie a contestar—. Algo de Gucci, a él le gusta más que Versace —suspira—. ¿Le tengo que vestir también? Tengo justo lo que necesita —saca un traje negro con cortes justo en la parte del torso.

—¿Lo ha mordido una manada de lobos? —Comento graciosa debido a la falta de tela que le faltaba a esa prenda.

—Qué graciosa, ya verás cuando venga y se lo ponga... —Sonríe pícaramente—: Se te van a caer las bragas.

Me rio ante su comentario y excitación evidente, pero el sonido de mi móvil interrumpe nuestra conversación.

Llamada entrante de Ann Eriksson

—¿Sí?

—Te necesito en el backstage, tengo demasiados nervios.

—¿Quién eres y qué has hecho con Ann?

—¿Qué?

—La Ann que conozco nunca está nerviosa, ¿es por Jimin? —Antuán se posiciona a mi lado para poder escuchar la conversación.

—Sí, bueno... Me da miedo cagarla ante tanta gente.

—Tranquila, ¿dónde necesitas que vaya? , ¿Dónde estás?

—En el backstage, ve a la puerta 004 —miro a Antuán y este asiente, se dispone a buscar un vestido y complementos perfectos para mí, en estas situaciones me pregunto: ¿qué haría sin él? Seguramente ir en sudadera.

—En un cuarto de hora estoy, bebe un té de esos o algo.

—Graciosa...

—Te cuelgo ya.

—Hasta ahora.

Fin de la llamada

La actuación de Jimin y Ann es un acto bastante elegante, aunque no hay que ir de gala, eso está claro. Aunque ese concepto Antuán nunca lo ha entendido.

Por eso cuando me miro al espejo y veo cómo este vestido... ¿Elegante? Quizás es demasiado pero el color verde menta claro contrasta a la perfección con mi piel tostada. Los tirantes finos y el escote abierto con la tela fruncida dejan ver mi pecho de una forma un tanto descarada para los más conservadores, en la cintura se ciñe un pequeño corsé que forma parte del propio vestido, y por último, sobre mis caderas descansa la tela sobrante que juguetea con el corte que deja casi al descubierto mi muslo izquierdo, dado que el vestido va por encima de la rodilla siento que favorece mi silueta de tal forma que deja ver una forma de reloj de arena.