🥀¿ESTA Y EN OTRA?🥀 [YM]

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Sus ojos seguían clavados en la entrada del cementerio, las rejas de estas estaban cerradas por ser ya altas horas de la madrugada, pero aún así se podía distinguir una pequeña luz dueña de un señor mayor de edad que se encargaba de limpiar el lugar, no se atrevía a salir de ese auto, el remordimiento en su cabeza seguía persistente, porque había abandonado a su padre cuando prometió visitarlo todos los días, aunque hizo todo lo contrario, en el momento en el que se fue no pensó en su padre.

Y eso siempre lo atormentaba cada día que pasó viviendo en Alemania.

Ahora quería verlo, no sabía en qué condiciones estará su tumba, por lo que con muchos nervios y una gran atracción salió del auto, logrando que el viento de la noche jugara con su cabellera ahora teñida de negro, estaba vestido con un pantalón algo suelto y la polera de igual manera pero de color marrón, su piel pálida estaba erizada por el frío ya que tampoco traía algún chaleco.

Estuvo esperando desde las cuatro de la tarde en la entrada de ese cementerio, en ese minuto eran las tres de la madrugada y se notaba lo desolado en las calles de Daegu, no se dió ni cuenta cuando sus pasos lo habían llevado dentro, quedando frente a frente con la lápida de su padre, un nudo en su garganta apareció, sus pequeños ojos gatunos se aguaron y comenzaron a soltar lágrimas sin ningún consentimiento, sus manos se comenzaron a comportar inquietas por no saber dónde ponerlas en esta situación.

Su vista fija en ese recuadro donde estaba la fotografía del mayor sonriendo, tan imponente pero a la vez tan amable y bueno, con tan solo 39 años la muerte se lo llevó por un tiempo infinito, a veces se preguntaba porque le sucedió a él, que error cometió un hombre y Alfa tan correcto para que le sucediera eso antes de tiempo.

¿Acaso será que primero se van las personas tan buenas para este mundo?

Lo había escuchado una infinidad de veces por parte de ancianos, "las personas más buenas y puras se van primero". Su padre siempre fue el mejor, siempre lo acompañó en sus momentos más importantes y memorables de su vida, tal vez en algunos aspectos no era muy bueno corrigiendo, mucho más con Seung, aunque él fuera el más rebelde de la familia.

Se agachó inclinándose para ver de más cerca el retrato de Baek, su viva imagen seguía grabada en su memoria, su forma de ser, sus expresiones y todo. Una sonrisa apareció a un recuerdo que tuvo, en la que se trataba cuando tenía entre unos 5 años y su mayor se disfrazó de su peluche favorito, el cual era Kumamon, en su cumpleaños, del como no le importó salir disfrazado a la calle para solo acompañarlo a celebrar su cumpleaños, sabiendo a riendas que iba a recibir burlas por las personas transitando.

Fue uno de sus días más felices ya que salió prácticamente con su peluche favorito de la mano.

También recuerda del como tropezaba algunas veces ya que el disfraz era muy grande por la parte de arriba y la planta de los pies.

—Perdóname —Dijo Yoongi remojandose sus delgados labios que tiritaban un poco por el frío y llanto —No tuve el valor de visitarte en estos cuatro años, te abandoné.

Acarició la lápida con sus manos temblando, su pelo se movía por el viento que comenzaba aparecer con más intensidad en ese momento.

—Pero me dolió —Su voz comenzaba a quebrarse —No sabes cuanto, todos los días lloraba, el dolor se apoderó de mí como un imán, todavía lo hace... Solo que ahora lo puedo controlar —Se secó el rastro de lágrima que salió rápidamente —Fuiste abuelo, sin embargo, fue Seung quién te hizo abuelo, yo no.

Empujó su lengua contra su mejilla derecha, recordando el preciso momento en el que se enteró de todo, como fue cruelmente dicho.

—Soy el tío —Rió de manera seca —Seung y Jimin me mintieron, y yo como un estúpido no me dí cuenta, pero vamos, quién pensaría que sucedería eso, el cuñado y la pareja. En gran parte también es muy culpa, me vieron la cara de imbécil por dejarme ser, más por ese Omega, trataba de complacerlo en todo, hasta llegaba hacer lo imposible para hacerlo y así se sintiera lo más cómodo posible, fuí su bufón de circo, me dejaba maltratar y ser insultado inumerables veces, ya no me importaba mi comodidad ni mi persona, solo me importaba él, él era lo más importante.