tokyo revengers x male oc
NO YAOI/NO BL
Sugawara Ame es un chico tímido. No le gusta hablar. Para nada.
Le da demasiada vergüenza abrir su boca en frente de gente desconocida.
Es uno de los fundadores de la tan conocida Tokyo Manji. Y vaya que llev...
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MINUTOS ANTES, EN EL HOSPITAL
Uteki observo a su amigo Mikey aun sentado en el asiento de espera y con la mirada perdida desde que llegaron al lugar. La novia de Takemichi también estaba allí, mantenía sus ojos aguados en consecuencia de la reciente pérdida de su mejor amiga, Emma.
—Voy a buscar algo para que beban, esperen un momento.
Sin esperar una respuesta de aquellos dos, se retiro del lugar, yendo a una máquina expendedora cerca de allí. Ya luego de haber comprado cuatro botellas de cualquier bebida, se encontró con Hina, Draken y Mikey interactuando.
—Yo morí —dijo Hina —. Moriré en doce años más.
Uteki soltó las botellas que traía entre sus brazos, acercándose lo más rápido posible a Hina, y tapando con su mano su boca, impidiendo a que hable más de lo debido.
Nadie más se debería de enterar sobre el tema. Aparte de que desconocía sobre que ella sabía lo de Takemichi.
—¿Qué dices, Hina? —sonrió incómodo Uteki tratando de desviar el tema —, estas delirando, ven conmigo al baño.
La chica llevó sus manos a los brazos del chico, tratando de alejarlo de ella y que la dejara respirar, no pudiendo evitar que las lágrimas se acumularon en sus ojos.
—Deja que hable, Ame —un silenciosa voz se hizo presente por primera vez en el día. Fue Mikey quien aún observaba el inmaculado suelo a sus pies.
Uteki algo consternado, soltó lentamente la boca de la chica, dejándola con libertad para luego retroceder y observar lo que quería decir ella.
—Takemichi vino del futuro para evitar que eso sucediera... suena mentira, pero es verdad, él está desesperado por eso, sabiendo cada uno de los futuros que ha vivido... él solo quiere salvarnos a todos.
Cada uno de los presentes tuvo una reacción distinta ante las palabras de Hinata. La chica rompió en lágrimas tras lo dicho, Draken se quedó meditando ante lo dicho, Mikey comprendió todo y Uteki mordía las uñas de su mano en desesperación de esta escena.
—Pero yo no puedo ayudarlo en nada...
Minutos después, los cuatro se encontraban en el muelle, acercándose a un Takemichi golpeado y sangrante.
—¡¿Eeh?! ¡¿Les contaste sobre el viaje en el tiempo?! ¡¿A ellos dos?!
—Tsk —chisto el más bajo —. No puedes hablar mucho, tu no me cuentas sobre nada de estas cosas.
—Uteki, podemos hablarlo más tarde —comentó apenado el mayor mientras que en respuesta el rubio ceniza refunfuñando se acercó a sus dos amigos.
—¿Qué haremos, Mikey? —preguntó el del dragón tatuado en cuanto llegó el más bajo — al parecer la mitad de Tenjiku aún quiere pelear.
—La mitad eh —murmuró Mikey observando la multitud al frente suyo —. 200 contra tres de nosotros...
