TREINTA

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ESPECIAL SOFT ANTES DE LA DESGRACIA.

SPOILERS DEL CAPITULO 108 AL 110 DEL MANGA.

Salieron del hospital un grupo de hombres, aunque uno solamente se notaba que era algo (mucho) mayor al resto

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Salieron del hospital un grupo de hombres, aunque uno solamente se notaba que era algo (mucho) mayor al resto.

Habían ido a curarse las heridas y a que les den algo para recuperarse prontamente.

— Bien, chicos — Habló Satoru estando afuera del auto y con las llaves de él en sus manos —. Iremos a dejar a cada uno a su casa y que estén un mínimo de tiempo con sus familias hoy.

Los chicos asintieron y entraron al auto, acomodándose entre ellos para que cayeran "bien".

Hicieron una ruta, y el primero en bajar cerca del burdel, fue Draken. Todos dentro del auto le desearon una muy linda navidad, e incluso Satoru le invitó a comer el mismo día para el almuerzo.

Draken sonrió y prometió ir en unas horas. A Uteki le dio algo de pena que su amigo pasara solo la navidad, pero era pan de cada año, siempre le invitaban en las fiestas, pero siempre se negaba.

Al siguiente al que pasaron a dejar, fue a Mitsuya, el pobre chico estaba con suturas y con una venda en la frente. Uteki estaba seguro de que sus hermanas estarían muy asustadas de solo verlo.

Otra vez, los chicos que estaban en el auto se despidieron de él, deseándole una grata navidad en familia.

Partieron otra vez, en dirección a la casa de Chifuyu, y cuando doblaron por una calle, un sentimiento de nostalgia recorrió el cuerpo de Ame.

Era la misma calle en donde vivía Baji... su amigo fallecido.

Sonrió tristemente y despidió a Chifuyu de un gran abrazo, deseando un muy lindo día al chico.

Chifuyu estático, le devolvió el abrazo. Era un abrazo cálido y firme. Era como estar en un lugar seguro y sentirte alegre.

Uteki le encantaba aquello, y estaba seguro que de ahora en adelante abrazaria siempre a Chifuyu. Le encantaba porque era tranquilo, y devolvía con el mismo fervor el abrazo.

Chifuyu se separó, y se despidió de los tres en el auto, dirigiéndole una sonrisa a Uteki y este se la devolvió con alegría.

Satoru partió hacia la casa cuando se aseguraron de que Chifuyu haya entrado al block de apartamentos. En unos minutos llegaron a donde vivían Ame y su padre.

Bajaron en silencio, y subieron en silencio las escaleras, hasta llegar al segundo piso y dirigirse a la puerta designada.

Ingresaron, y se retiraron los zapatos de los pies, Satoru se retiró el abrigo y lo colgó en el perchero allí. Los otros dos chicos menores siguieron sus acciones.

Fueron a la cocina, y vieron que era lo que podían precalentar y poder comer con ello. Prepararon, otra vez, las cosas, y las llevaron a la mesa.

Se sentaron, dieron las gracias y comieron tranquilamente. Eiji no hablaba debido a su garganta, y solo comía cosas suaves y que no fueran tan duras.

Silence || Tokyo Revengers Donde viven las historias. Descúbrelo ahora