Enigma #1

CAP. 20: BELIA.

De camino a nuestra sección me encontraba ansiosa, odiaba cuando eso pasaba. Me encerraba tanto en mis pensamientos que a veces era tan difícil poder volver a la realidad, mi cabeza era un asco. Siempre intentaba mantenerme ocupada en algo o hablando demasiado, para no tener que escuchar mis propios pensamientos, era aterrador.

— Ey! — Beliel tomo mi rostro en sus manos para que pudiera mirarlo.— Todo esta bien.

Muy pocas cosas podían calmarme, y la sonrisa de Beliel era una de ellas. Él es la única persona que me vio destruida.

Ni siquiera éramos amigos, solo dos desconocidos que se molestaban mutuamente en la biblioteca. Me divertía mucho con sus contestaciones, su aire de chico misterioso y odioso me gustaban mucho, pero lo que más me gustaba de él era que podía verme, y no la personalidad odiosa que tuve que desarrollar, sino la verdadera.

Un día tuve un episodio con un idiota de la sección negra le rompí la nariz, pero lo peor fue en la noche, cuando todos esos recuerdos volvieron a mi.

Lo único pensé fue en salir, no se como llegue a la biblioteca al borde de las lágrimas, lo que sé es que él estaba ahí. No pregunto, no me dio esas miradas de lástima que siempre recibía, solo me abrazó y se quedó conmigo.

Esa noche me leyó su libro favorito y hablo sin parar de cosas irrelevantes, eso me hizo reír el odiaba hablar siempre era más de escuchar, pero lo hacia para que yo no tuviera que decir nada.

En ese momento me enamoré de él.

— ¿Quieres ir a dormir?— Preguntó aun con sus manos sosteniendo mi cara.

— Estoy bien. —Le devolví la sonrisa.— Además le dije a la nueva que iba a ir a nuestra sección para que no se sitiera sola.

Él se quedó analizando mis palabras, se alejó sin decir una palabra, sabía que estaba pensando.

— No es lo que piensas. — Dije de inmediato.

— ¿Segura?— Dijo serio. — Porque creo que sé exactamente lo que está pasando.

— No es eso, solo trato de seguir el plan...

— Estás haciendo esto porque te sientes culpable de lo que pasó con Keira.

— No me interesa lo que paso con Keira ni tampoco lo que pase con la nueva.

— Belia sabes que no puedes mentirme.— Beliel se sentó en unos de los sillones mientras me sentaba junto a él.— No somos buenos, pero no fue nuestra culpa, necesitamos hacer esto, ellas tienen su gente y su pelea. Nosotros tenemos la nuestra.

— Pude haber hecho algo.— Dije mientras desvíe la mirada.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, pueden ser muchas cosas malas, pero jamás quise lastimar a nadie, yo era buena.

— Mírame.— Beliel tomo mis rostro haciendo que lo mire.— No puedes salvar a todos, sé que crees que ella es buena, puede que sí pero si bajas la guardia, la que va salir lastimada serás tu. Lo importante es que estemos juntos, y mientras estemos juntos no voy a dejar que nadie te lastime. No importa lo que tenga que hacer.

— Tu amor es la manera en que la vida me recompensó por tanta mierda.— Sonreí mientras lo besaba.

— Pueden conseguir un cuarto, estoy seguro que Belia no es de las que se resisten.— La voz de Baco interrumpió todo sentimiento.

— Es una lástima que todavía Gael no te haya matado.— Dijo Beliel mientras me abrazaba por detrás.— Si vuelves a decir algo así de mi chica, te aseguro que voy a terminar el trabajo que él no pude.

Baco solo se rio, pero yo estaba segura que Beliel iba a cumplir con lo que dijo.

— ¿Dónde está Agaris?— Pregunté cambiando de tema.

— Esta en la sección quiere que vayan ahora, es una reunión importante.

— Tengo que ir a las duchas, le dije a... —Me interrumpí antes de decir su nombre. — La nueva que podía venir a las nuestras.

No decíamos su nombre por precaución, si alguien nos escuchaba sabrían quien es ella, eso no era bueno.

— Cambiamos los planes, ella va a ir sola a las duchas de abajo.

— ¿Qué van a hacerle?— Pregunté alarmada.

— Vamos a asustarla. — La sonrisa de Baco me dio miedo y mire a Beliel en busca de apoyo.

— No pueden tocarla, es una persona.

— Una persona que quiso matarnos más de una vez.

— ¿Y eso qué importa? Eso no les da derecho a propasarse con ella, nadie merece eso.

— Ya la escuchaste.— Dijo Beliel poniéndose entre Baco y yo.

— Tranquilo los dos, nadie va a hacerle nada, solo va a ser unos ruidos y ya esta.— Baco miraba confundido de Beliel hacia mi.— ¿Por qué tanta preocupación?

No sabía cómo responder, me había paralizado, se que exagere pero el único que sabía mi motivo era Beliel. Agaris y Baco eran mis amigos, y nos queríamos a pesar de todo nuestra confianza era real, pero nadie podía saber lo que me paso.

— Estoy cansada, es mejor que me vaya a dormir.

Ninguno dijo nada, ambos sabían que era uno de mis episodios.

Beliel me acompaño, se quedo mientras me acostaba sobre su pecho y lloraba por toda la mierda que tenia en mi cabeza.

Estar  con el siempre me tranquilizaba, con el no tenia que hablar ni fingir.