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Yoongi se encontraba sobre la cama contemplando como Taehyung se terminaba de arreglar su camisa, esa mañana el Conde partía a otro país para la selección de sub-cabecilla, el menor suspiró para bajarse de la cama, tomó su bata de dormir que se encontraba en el suelo y cubrió su cuerpo desnudo con ella, se levantó con cuidado caminando en dirección de su esposo. Taehyung le siguió con la mirada hasta que el vampiro llego tras él. Yoongi lo giró para ayudarlo a cerrar los últimos botones de esa camisa blanca.

—Deseo que tenga un buen viaje, prometame que me escribirá cartas cada semana.Quiero leer como es su dia a "Dia"—susurró con tristeza y luego de terminar de arreglar la ropa de su esposo, Yoongi recostó su cabeza en el pecho ajeno.

—¿Te encuentras bien? ayer tuviste un desmayo—preguntó con preocupación acariciando los cabellos ajenos. Yoongi frotó su mejilla afirmando con un leve movimiento de cabeza—.Mandaré a mi mensajera más veloz para que las cartas lleguen a tiempo. Incluso le hablaré como es Polonia, algún día podemos ir allí de vacaciones si gusta. Usted se encargará de sus estudios, si muero usted se hará cargo de toda la herencia.

—No diga que va morir—susurró Yoongi haciendo un puchero—¡No tiene derecho, si me deja viudo, traeré su alma donde sea que se encuentre y no lo dejaré descansar en paz!—Taehyung soltó una suave risilla—.No se ria, hablo en serio.

—Joven Yoongi—habló el mayor tomando las mejillas de su esposo—. Usted es un hombre que vale por mucho, se que es inteligente y podrá seguir adelante sin importar la situación.

—Pero de que me sirve si usted no estará en mi vida, pensé que no iba poder amarlo; pero ahora que lo amo...no quiero separarme de su lado.

—No sea dramático. Es inteligente y hermoso, de seguro muchos pondrán la mirada en usted.

—Pero usted se habrá llevado mi amor para ese entonces—respondió Yoongi desviando la mirada–. Pediré a los cielos para que regrese sano a mi lado, quiero vivir con usted hasta mi muerte—Yoongi tomó las manos del mayor y les ofreció un beso.

—Regresaré a su lado. Lo prometo.

—Cumplalo—comentó aquel joven más como una orden.

Taehyung afirmó, la puerta del cuarto se abrió ingresando Vernon que hizo un saludo de respeto. Yoongi pasó sus manos por la camisa de su esposo para luego tomar el saco que se encontraba sobre una silla y se lo puso. El mayor siguió con le vista a su esposo, cuando estaba listo para salir, le ofreció un beso en los labios.

—Volveré pronto, Joven Conde—susurró aquel hombre con leve pesar.

Min Yoongi afirmó lamiendo sus labios viendo al vampiro retirarse junto con aquel mayordomo. El menor se giró a ver en dirección de la ventana notando que estaba un poco oscuro ya que era otoño y el sol en esos dias empezaba a desaparecer, los árboles se volvían de colores amarillos, naranjas y otros rojos, pronto sería los dias de nieve. Suspiró haciendo una mueca para luego tomar su saco negro de piel para cubrir todo su cuerpo—¡Joy!—alzó la voz desde el interior del cuarto.

La doncella ingresó rápido con una gran sonrisa, Yoongi la contempló sorprendido, aún no terminaba de acostumbrarse a la energia que la mujer poseía.

—Amo.

—Iré a despedir a mi esposo, ve y buscame un traje, hoy vestiré de negro.

La chica afirmó mientras Yoongi salió de aquel cuarto para seguir a Taehyung, contemplando la espalda de aquel vampiro que iba a pasos tranquilos mientras conversaba con su mayordomo, el menor suspiró y se detuvo cuando llegaron en la parte de las escaleras, el se quedó en el centro para ver abajo a la cola de sirvientes que estaban bien alineados. El Conde al terminar de bajar pasó en medio de los impuros, Min Yoongi tocó la baranda, viendo las escaleras del lado izquierdo y las del derecho. Alzó el rostro soltando un suspiro para luego apretar los labios conteniendo un poco sus ganas de llorar.

Taegi|| RealezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora