Bear Hugs #45

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La odisea de quedarse día y noche en el hospital mientras Yeon Jung estaba ingresada, estaba siendo una tortura para Ho Seok y Hyun Woo. Prácticamente solo habían salido para ir a casa de Ki Hyun a ducharse o a ver a su otra hija, que se estaba quedando en su casa. Por suerte estaban en agosto y Min Ji estaba en Massachussets y Dodo y Min Hyuk de vacaciones y podían encargarse de Ji Yeon al menos, no se imaginaban teniendo que llevar a la niña a una guardería porque su hermana había nacido antes de tiempo.

Hyun Woo nunca pensó que pudiera ser tan cansado pasarse día y noche en un hospital. Al principio, se suponía que estaba de baja, pero después de tres o cuatro días le pidió a su jefe que le diera algo que hacer, porque sino se iba a volver loco. Ho Seok parecía más animado que él, alternando trabajar e ir a ver a su marido y su hija. Parecía contento, encargándose de Yeon Jung cuando podía y viendo cómo ella iba evolucionando bien.

Las notas seguían llegando, todas las mañanas Hyun Woo encontraba una bajo la almohada de la cama de hospital, y todas parecían bonitas y trataban de ser optimistas.

Tan estresado y cansado estaba Hyun Woo, que no se dio cuenta de que todo ese optimismo era fingido.

Volvió a mirar su teléfono a ver si tenía algún mensaje de Ho Seok, pero seguía sin haber nada de él.

-No me puedo creer que se haya ido -se quejó Ki Hyun-. Como si tú no lo estuvieras pasando mal. No me puedo creer que pueda llegar a ser tan egoísta.

Hyun Woo miró a su hermano mayor, que estaba colocando varias fiambreras sobre la mesa para que él y Ki Hyun comieran juntos. Hacía un par de horas que Ho Seok se había marchado del hospital con intención de ir a casa de Ki Hyun, pero no había llegado. Conociendo como conocían a Ho Seok, todos sabían lo que Ho Seok había hecho: escaparse.

Hyun Woo había llamado a Ji Eun, pensando que tal vez su marido había ido a verla, pero la madre biológica de Yeon Jung no tenía noticias de él, y ahora Hyun Woo cada diez o quince minutos recibía un mensaje de ella preguntándole si ya le habían encontrado. No quería decirle nada a una niña de 18 años que estaba terriblemente preocupada, pero su actitud no estaba ayudando. El enfado de Ki Hyun no estaba siendo demasiado útil, tampoco.

-No le insultes, hyung -le dijo con seriedad. Le daba igual quién fuera o por qué lo dijera, odiaba cuando la gente decía cosas malas de Ho Seok.

-Pero, Hyun Woo, te parece normal que...

-Lo necesita. Déjale, volverá cuando se sienta mejor. -Se acercó hasta la cama y se sentó, luego negó con la cabeza-. Lleva días fingiendo estar bien para ayudarme y siquiera me he dado cuenta. Se ha ido porque no paro de obligarle a cuidar de mí. Cúlpame a mí si quieres. A él no le insultes.

Ki Hyun sintió un nudo en el estómago nada más escuchó a Hyun Woo echarse la culpa de las cosas de esa manera.

-Vale, no le insulto. Lo siento. Es que siempre me ha cabreado que se largue así, ya lo sabes. Y, eh, ¿qué es eso de que es culpa tuya? No creo que eso sea verdad...

-Sí lo es -contestó-. Siempre hace lo mismo. Cuando algo va mal intenta protegerme fingiendo que todo va bien y volcándose conmigo, hasta que explota. He intentado... que sepa que puede apoyarse en mí. Que no necesita cuidarme para que le quiera. Pero soy tan inútil...

Ki Hyun suspiró.

-No eres ningún inútil. A Ho Seok le gusta poner las cosas difíciles... Y si le has dicho que puede apoyarse en ti y él ha decidido asumir la responsabilidad de todo como hace siempre, ¿cómo es eso culpa suya?

Hyun Woo miró hacia la incubadora en la que estaba su hija, y torció el gesto.

-No se lo has dicho -dijo Ki Hyun, resignado porque ya siquiera le sorprendían esas cosas. En cuanto su hermano asintió, se llevó las manos a la cara-. ¿Cómo pueden creer todos que vuestra relación es perfecta con lo desastre que sois?

Not all Girls are from Venus » Dodo x I.M. MONSTA XDonde viven las historias. Descúbrelo ahora