Capítulo 32

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Lo miro directamente a los ojos deleitándome de ese hermoso color que no ha mencionado que emoción representa. Rodea mi cadera con sus brazos, abre y cierra la boca como pez fuera del agua, capto de inmediato su reacción.

Pego mis labios con los suyos de manera tierna cerrando los ojos. Me separo y pego mi frente con la suya.

—Yo...

—Shhh —lo silencio—, está bien si no te sientes preparado para decirme.

Entiendo perfectamente que para él no debió ser fácil siquiera contarme lo que tenía, y por como se expresaba de su condición, me doy cuenta que no es de su mucho agrado hablar sobre esto. Solo espero que pronto me tenga la suficiente confianza para poder hablarme de esto liberadamente.

Por más que yo vea esto de una manera tan hermosa, puede que para él sea una enfermedad, qué él sea un fenómeno incluso...

Oh mierda.

Y digo mierda porque me acabo de dar cuenta que la cagué y feo. Sigue sintiéndose raro para mi decir groserías en español.

Su tatuaje...

Y yo diciéndole freaky... Holy shit.

¿Acaso se cree un fenómeno? ¿Alguien raro, anormal?

—Gracias —susurra y vuelve a pegar su frente en mi pecho.

Le acaricio el pelo con el ceño un poco fruncido al analizar el significado de si tatuaje y el apodo con el que lo había bautizado.

—Eric, que-

—Vamos a un club —me interrumpe y me mira a los ojos—, puedes invitar a tus amigos, si quieres.

—¿Te parece bien a tí si vamos solo los dos? —le sonrío rodeándole mis brazos en su nuca.

—Me parece increíblemente bien —dice respondiendo mi sonrisa.

Creo que mejor dejamos esa pregunta del significado de su tatuaje para luego. Hoy nos vamos a divertir.

...

Buena música resuena por todo el sitio, luces de colores iluminan todo. Apenas entramos ya mi cuerpo por inercia está moviéndose de un lado a otro mientras que Eric me toma de la mano para ir hacia una mesa.

Nos sentamos y Eric pide una botella de Whisky. Me mira sonriendo, toma mi nuca dándome un beso que me deja mareada de placer.

Lamo mis labios, mi cadera se sigue moviendo de un lado a otro por el mix de la música. El DJ es bastante bueno.

—¿No escuchas música en español? —Eric me pregunta colocando sus codos sobre la mesa.

—Si pero prefiero en inglés, soy más de pop que reggaeton —confieso—. Yo tampoco he oído que escuches música en español.

Hace una sonrisa viendo hacia abajo.

—Tienes razón, o sea que si colocan música en español no vamos a tener ni idea de qué canción es.

—Pero nos la vacilamos igual —le guiño el ojo.

Las bebidas llegan y empezamos a tomar. Me divierto mucho con él mientras hablamos. Después de un rato pido una Coca-Cola, Eric me mira con desagrado y bebo para luego darle un beso y sienta el sabor.

—Mierda, Kenzie, si viene de tus labios me declaro adicto —dice y me sonrojo.

Un calor recorre mi entrepierna y me muevo un poco en mi asiento al sentir la humedad en mi panty.

The color in your eyesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora