Capitulo 27: Vivamos mientras seamos jóvenes

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Las vacaciones habían sido reparadoras, al menos para mí. Con Pol no había vuelto a hablar desde el día de la fiesta, me enteré por Tània que tenía nuevamente fuertes problemas económicos. No quise molestarlo.

— Zoe — saludó alguien detrás de mi.

— Joan ¿Que tal las vacaciones? — moví frenéticamente mis manos contra mi jersey.

— No me quejo, ¿Las tuyas?

— Igual.

Oksana se acercó y nos saludó a ambos —¿Que pasa? ¿Dónde están todos para la foto?

Cierto, la foto. Por ser nuestro último curso nos tomariamos una foto con nuestro tutor: Merlí.

Tània se acercó y me abrazó, Mónica hizo lo mismo. De lejos ví a Pol hablando con Gery, él notó mi mirada porque me la devolvió con una leve sonrisa.

—¿Siguen molestos?

Me encogí de hombros — yo nunca me peleé con él, si le sucede algo es su problema. — la rubia me miró con compasión.

Un hombre muy joven, un poco alto y con un semblante preocupado se acercó a nosotros.

— Hola, ¿Saben dónde está Eugeni?

Yo contesté — Si, ahora viene. ¿Eres nuevo?

De pronto se sintió un poco más relajado y sonrió — Si si.

— Joder tío pero tú cuántos cursos has repetido? — preguntó Berta riendo, parecía muy joven, pero al mismo tiempo no parecía que siga en bachillerato.

Merlí y Eugeni llegaron con una complicidad como nunca. Este último llevaba la cámara de fotos.

— A ver, todos por aquí.

Me puse al lado de Joan y de Iván, sonriendo e intentando que Oliver no se ponga delante mío .

Eugeni nos calló un momento y señaló al tío de antes — Él es Gabi, el nuevo profesor de lengua y literatura castellana.

Todos soltamos una expresión de asombro, pero si era tan jóven para ser profesor.

— Lo sé, me toman como un alumno.

Marc gritó con algo de diversión —¡Ya era hora un profe jóven! — Merlí le golpeó la cabeza varias veces.

— Bueno basta de tanta charla, a la cuenta de 3..2..1 todos dirán Merlí.

— MERLÍ— obedecimos esperando la captura, que fue arruinada porque a Marc se le ocurrió bajarse los pantalones y mostrarle el culo a la cámara.

— Joder Marc — reí

— Tienes un buen culo.. — dijo Oliver acariciándole el cabello.

— Si si, ya te hemos visto el culo, ahora pónganse para la foto que tienen que ir a clase — exigió Eugeni algo cansado.

Esta vez la foto salió bien, no hubo ninguna interrupción.
La verdadera interrupción fue cuando apareció frente nuestro apareció nuestra antigua profesora de historia de la ESO, Silvana.

— Que guapos y que guapas están — sonrió sacándose los anteojos de sol. Berta y yo no dudamos en correr y abrazarla, no era ninguna novedad de que fue una de mis mejores profesoras.

— Silvana ¿Que haces aquí? — pregunté emocionada

—Digamos que Eugeni me volvió a contratar, y yo acepté más que feliz por darle clases a ustedes.

— ¡Más vale! — chilló Berta volviendola a abrazar.

***

La clase de matemáticas había sido aburrida, lo único que me salvó fueron las miraditas que me eché con Pol toda la clase.

— Oye tío, ¿Que te hice?

Se giró hacia mí — ¿Por qué crees que me hiciste algo, Zoe?

— Ya no hablamos como antes.

Bufó algo frustrado — No es por ti, ¿Vale? Tengo más problemas en mi casa de los que quisiera.

— Entiendo pero... Cómo hablabas con Tània pensé que el problema era mío.

— Perdóname. Te prometo que te lo contaré todo, esta tarde en tu casa ¿Si?

— Claro — sonreí.

La paradoja del cuervo || Merli #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora