➸5:07.

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-Sano y salvo -exclamó Jungkook abriendo la puerta del copiloto para el pelirrosa. Jimin había perdido la cuenta de cuántos puntos extra ya llevaba el alfa.

Al bajar del auto decidió atacar por sorpresa al más joven poniéndose de puntitas para plantar un beso en su mejilla. Instintivamente Jeon llevó su mano a la zona donde antes había estado los labios de su omega, mientras esbozaba una sonrisa boba.

-Gracias por traerme, y por la cita... -agradeció sonriendo-. Me gustó, ya sabes a parte de la cita, tú también.

-¿Cómo? Espera no entendí.

-Que me gustas también, bobo.

Y antes de que el castaño pudiera siquiera reaccionar y responder a la reciente confesión, Jimin ya había cerrado la puerta del auto para correr finalmente a la entrada de su edificio, donde se detuvo un momento antes.

-Llega con cuidado a casa -elevó una mano al aire para despedirse-. ¡Adiós Kook!

Y cerró la puerta del edificio sin dar siquiera tiempo al contrario de despedirse. Porque así como había dicho el pelirrosa más temprano, esa noche se convertiría en cenicienta. Sin embargo, el menor no se quejó por ello. Es más, le pareció tierna la manera en la que el omega se despidió dejándole con una sensación dulce y agradable en el pecho.

-Le gusto a Mimi... -repitió en voz alta entrando a su auto-. ¡Le gusto a Mimi!

Baby [kookmin au]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora