➸7:05.

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Era el segundo día en el que la pareja iba al departamento de Min para coser el regalo para Dahyun. Para Jungkook quien nunca había cosido antes, el poder usar la máquina de coser ya era un logro y todo fue gracias a Jimin, quien con mucha paciencia se dedicó a enseñarle lo básico. Y una vez que el menor ya no necesitó de su ayuda, lo dejó continuar sólo mientras él pensaba qué hacer con los pedazos de telas sobrantes.

-¿Así se hace Mimi? ¿Está quedando bien?

-Sí -se acercó al alfa-. Seguro te quedará muy bonita la blusa -halagó.

Yoongi también curioso se acercó a ver, y casi suelta una carcajada al ver la mentira piadosa de Jimin, era eso o que el amor lo hacía ciego. Pero finalmente concluyó que fue mentira piadosa, ya que el pelirrosa comenzó a coser en ese momento.

-¿La usará en la fiesta? -preguntó el pálido.

-Espero que sí. Si sale como espero, será una blusa ideal para fiestas.

-Dime que hablaste con mi padre -miró con ojos suplicantes, era Jungkook quien siempre ayudaba al mayor a salir a algunas fiestas.

-Dahyun lo hizo -eso sorprendió al contrario-. Está emocionada, lo llamó desde el primer día.

-Eso me trae recuerdos de nuestras salidas, Dahy siempre pedía permiso por mi pero jamás iba con nosotros -rió nostálgico.

Jimin por un momento se sintió fuera de lugar, no sabía si podía meterse a la conversación o si mejor callar esperando a que en algún momento pudiera intervenir y tampoco es como si entendiera lo que hablaban. De alguna forma se sentía como un intruso, y la diferencia entre su edad y la de los dos jóvenes no ayudaba. Así que se limitó a seguir cosiendo la tela rosa mientras escuchaba la conversación ajena.

-¿Ah sí? Yo casi no recuerdo nuestras fiestas -bromeó ganándose risas del contrario.

-Es cierto, no sé si tomabas mucho o es que simplemente eres débil al alcohol -recordó con una sonrisa en la cara-. Íbamos a todas las fiestas juntos.

-Hablas como si hubiera sido hace años -llevó dos dedos a la barbilla simulando pensar-. Uhm... Nuestra última fiesta juntos fue hace un año, antes de que Namjoon se fuera.

-Cierto -chasqueó la lengua.

-¿Te... gustan mucho las fiestas? -se atrevió a preguntar el omega rompiendo su silencio.

-¿Si le gustan? -habló Yoongi con voz burlona, tratando de molestar a Jungkook-. Él nos convencía siempre de salir a festejar sea cual sea el motivo. ¡Una vez festejamos porque se cortó el cabello!

-Wow... -exclamó el pelirrosa-. Que tierno -esta vez lo dijo porque al voltear a ver al alfa, este se encontraba con su ceño fruncido hacía Min y las mejillas rojas.

Lo que acababa de contar le sorprendió, pero no tanto como se suponía. De lo poco que conocía a Jeon, había podido notar que era muy jovial y alegre, de esos que miraba un juego en la calle y pedía ir. Así que no fue muy difícil concluir que él era de las personas que disfrutaban de una buena fiesta con amigos. Jimin también era así, al graduarse de secundaria él y Taehyung, junto con Seokjin el pretendiente de su amigo en ese entonces, salían a festejar y divertirse. Pero conforme los años pasaron, las salidas iban disminuyendo y las responsabilidades aumentaron. Y, al ver a los dos amigos, el omega se vio reflejado en ellos.

-Oye tampoco soy tan así -se quejó-. Además este último año no he salido tanto.

-Eso es cierto, solo porque ya estás por acabar la carrera... Cuando nos graduemos deberíamos volver a salir como antes.

-¡Hecho! Mimi, tú también, ¿va?

El contrario asintió con una sonrisa para no alargar más el tema. Se sintió mal al pensar que Jungkook lo miraba en sus planes futuros de fiestas y salidas. Pero ese tren había salido y él se quedó en la estación, no podía darse una vida alocada teniendo a una princesa a quien cuidar. Sin embargo, el tren lo había dejado solo a él, el alfa aún estaba a tiempo de abordarlo.

Baby [kookmin au]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora