Fuego Y Hielo

Abrumada

CHELSA

Esto es abrumador, pero a la vez emocionante. Observó a Lian caminar un poco más rápido de lo normal, sus atenciones hacia mi han aumentado, me hacen gracia.

—Hola— saluda Hannia y enseguida aparece la vampira. Violeta

—Buenos días señores — saluda

Observó a Hannia, hoy se ve radiante, hay un brillo especial en sus ojos y me gustaría saber por qué...

—Derian esta en camino— dice Hannia sonriendo —Y quiero decirte

—Ahorrate las palabras Hannia, ahorita no es el momento, ella ya lo sabe— dice Lian con enfado

—¿Te ha dicho que esa arpía está aquí? —

Asiento con una sonrisa

—Yo que tu le daría unos buenos golpes— sonríe

—Hannia— Violeta la llama con reproche.

—Claro, bueno esta en su habitación, he dado órdenes que se le lleve todo lo que necesite hasta ahí, la mantendremos alejada por ahora de este asunto, al menos hasta que Derian se marche—

Los miro y escucho con atención, Lian me ha dicho todos los motivos por que esa vampira esta por ahora aquí, desearía regresar a nuestra casa pero dadas las situaciones no podemos, todo lo entiendo a la perfección, pero no por eso dejan de preocuparme.

—llegó Derian— Ailey entra junto a Iván, me da la impresión que a partir de ahora ya no tendremos la misma intimidad en esta habitación mi esposo y yo, y no se si sea algo que debería de preocuparme.

—Derian— Lian saluda al doctor y se dan una larga mirada, imagino se ponen al tanto de lo que está pasando después se dirijen a mi y me dan una sonrisa.

—Hola Chelsa— le sonrió sin decir palabra alguna, todos los aparatos que trae consigo me ponen nerviosa —Tranquila, solo haremos una revisión rápida, solo necesito espacio, Lian puedes quedarte—

Todos salen enseguida y me alivia un poco, me acuestan sobre la cama y el doctor me pide que descubra mi vientre en lo que el prende la pantalla negra, pone algo frío sobre el, un gel, y después pone el pequeño aparato sobre mi piel y lo resbala

—Tienes un mes de gestación—  Lian me mira maravillado, pero después se queda quieto.

—¿Qué pasa? — preguntó angustiada

—No es nada mi vida, solo que estoy emocionado, escucho su corazón —

Los ojos se me llenan de lágrimas y lo miró con la misma emoción

MARK

Sonrió como idiota al verla removerse entre las sábanas, parpadea un par de veces antes de mantener sus ojos abiertos y me mira con desdén y enojó.

—He dormido mucho— dice con voz poco audible — Dime ¿cuanto tiempo llevo así? —

—Apenas un día, y creeo necesitas más descanso— le digo con voz suave.

Me mira con evidente irritación, ahora que la miro bien puedo caer en la cuenta de sus dos grandes ojos, son redondos y enormes bajo esa espesa capa de pestañas, se nota molesta, creei que el dejarla descansar sería algo bueno pero creo que amaneció lo doble de irritada.

—¿Qué están haciendo conmigo? —

—Creo que nada, o bueno al menos yo no estoy haciendo algo contigo solo te estoy cuidando o eso creo—

—Eso esta claro pero no digo lo mismo del otro tipo—

—¿Otro tipo? ¿Cuál? —

—El vampiro de velocidad sorprendente—