Fuego Y Hielo

Desiciones

Lian me toma fuerte de la cintura antes de entrar a la enorme sala de la mansión, lo sigo por instinto aún pensativa en todo lo que mis padres acaba de revelar, pienso en todo, pienso en mamá, pienso en papá y lo que significa tener un hijo, todo lo que ellos han saceificado por mi.

¿Yo también estaría dispuesta a sacrificar todo por un hijo?

Si, por supuesto que sí lo haría, si tuviera un hijo daría todo de mi por protegerlo tal y cómo mis padres me lo enseñaron.

Suspiro y al instante me doy cuenta que Lian me mira con preocupación. A la vez agradezco que aún no sea tan desifrable para él, por qué se daría cuenta que aún sigo siendo la misma cobarde que siempre, ahora temo más por mis padres, por su familia por él y por todos los que están en la lucha contra mi... Padre.

-¿Te encuentras bien?-

-Si- contestó con una sonrisa un poco fingida, ahora debo de poner atención a lo que respecta a la chica de cabellos rojos.

Entramos a la habitación y la tensión de todos es palpable, los primeros rostros que observó son los de Raymond y mi abuela quienes están sentados en dos grandes sillones de piel color café, con rostros aburridos.
Hannia está recargada en el ventanal, con un rostro lleno de ansiedad, al otro lado Yeira y varios vampiros de la guardia están tensos, Azael y Ean están recargados en la pared junto a Iván, la única ausente aquí es Ailey y observó a Mark al fondo junto con Amber.

Le dedico una sonrisa amable y el me la responde sin dudar, lo he echado de menos, me doy cuenta del tiempo que tenía sin haber visto a todos los que estamos ahora reunidos en esta sala.

-Supongo que todos están enterados de el por qué estamos aquí reunidos- Habla Lian con formalidad.

-¿Por que capturaron a uno de los suyos?- contesta Raymond con apatía

-Es una chica- responde Mark tan rápido como puede.

-Una vidente corriente- responde con desprecio, mirando a Mark de la misma manera.

-Mark fue quien se encargo de ella y de Damián quien ya está muerto, y se lo debemos a él- Lian dice y todos los pares de ojos se posan en Mark, quien se mueve incómodo.

-¿Tú?- pregunta Yeira incrédula y sarcástica -¿Están seguros?-

Mark la mira con una sonrisa fanfarrona

-¿Que puedo decirte?-

-Es verdad- dice Azael mientras se gira hacia nosotros-No lo vi todo, pero su espada estaba chorreando sangre y era del vampiro-

-Lo escucho y no lo creo- dice Raymond quien se acomoda en el enorme sillón.

-¿Alguien tiene otra pregunta?- murmura Mark divertido - Tal vez...

-Suficiente- interrumpe Lian molesto -Si ya sabemos que Damian está muerto y que la chica está en el calabozo pero recuerden que Edina sigue ahí afuera y es una de las más peligrosas-

-¿No me queda claro su propósito?- dice el vampiro de cabellera obscura, el hermano de Yeira quien entra con pasos despreocupados a la sala.

-Estan dejando ciertas cosas fuera y lo más importante- Mark interrumpe de nuevo captando la atención de todos -

-¿Cuál?- pregunta mi abuela mostrando interés a la conversación

-La chica, ella me ayudó a matar a Damián, ella me advirtió de su ataque, - todos guardan silenció

Yo apenas y puedo creer ¿Cómo es posible? Es uno de ellos, quiso matar a Lian era su aliada, Mark suspira.

-Los traicionó, y me uso para matarlo-