En La Mirada De Eros [03 - SpinOff] TERMINADA✔️ #Wattys2023

Capítulo 15

Coral

La siguiente vez que vi a Eros, luego de la cena improvisada/sorpresa que tuve en casa de sus padres, fue en el instituto. Quería verlo, pero no por querer estar con él sino para saber por qué me vi envuelta en una extraña situación donde obviamente yo no debía estar. Aunque siendo sincera, tampoco me molestó hacerlo.

Conocer a sus padres fue muy divertido, y lejos de los prejuicios que uno tiene al ver personas adineradas, ellos se comportaron de manera muy agradable y respetuosa conmigo; sobre todo el padre. Spencer Sadik era todo lo que estaba bien en la vida.

Sin embargo, quedé con la intriga al ver la actitud de Eros, ya que no solo era reservado en el instituto, sino que también lo era en casa con sus padres puesto que aquella noche no fue mucho lo que dijo y solo se limitaba a escuchar o a dar respuestas nauseabundas cuando sus padres se dirigían a él. Muy por el contrario de mí que hablé hasta por los codos y conocí más de su mundo.

Saqué esos pensamientos de mi cabeza cuando vi a mi objetivo aparcar su motocicleta en los estacionamientos del Instituto Daily. Sin darle rodeos al asunto, me acerqué a él.

—Buenos días, socio. —Le sonreí para que no se sintiera intimidado el pobre.

Eros levantó la visera de su casco y me observó extrañado.

—¿Qué haces acá?

—Tengo 17 años, vengo a un instituto y uniformada... ¿Qué crees que hago? ¿Jugar a ser doctora?

Él negó con la cabeza y se quitó el casco de su cabeza, dando paso a su cabello negro completamente alborotado.

—Me refiero a qué haces acá, justo a mi lado, en los estacionamientos.

—Ah. Te estaba esperando.

—¿Para qué?

—Para que refresques tu vista al verme. Se supone que soy una persona muy importante en tu vida, ¿no?

De inmediato cortó el contacto visual entre nosotros y, al parecer, decidió prestarle más atención a su motocicleta para terminar de acomodarla.

—Ya entendí qué quieres. Te voy a explicar lo que sucedió ese día, pero no ahora, ¿de acuerdo?

—Sí tú quieres —me encogí de hombros, haciéndome la indiferente—. Lo que me interesa es el tema de la competencia, ya sabes... Así que, si deseas pagarme de alguna forma, esfuérzate este mes que nos queda de estudio para ganar.

Pensé que me iba a ignorar, ya que siempre que le mencionaba las palabras estudio y matemáticas, se mostraba reacio. Sin embargo, su respuesta fue la que me sorprendió:

—Está bien, ¿cuándo quieres estudiar?

Ni siquiera hice el intento de hacerme de rogar porque milagros así no se veían a diario.

—Hoy, después de clases —contesté a lo que él asintió.

—Buenos días, chicos.

Al escuchar aquella voz, ambos giramos a la vez para encontrarnos con la directora Neels, quien nos miraba con intriga.

—Hola, directora. Siempre es un placer verla. —Contesté con mi mejor sonrisa a lo que ella asintió sin mucho convencimiento.

—Lo mismo digo —luego, desvió su atención hacia mi compañero—. Necesito hablar contigo, Eros. Mi hija me comentó lo sucedido el fin de semana y la reunión que tenía con tus padres. Solo quería disculparme por el inconveniente que ocurrió, yo no tenía idea de que ese día tenían planes y... —me observó de soslayo.