Sueños Ardientes De Verano

37 EPILOGO

EPILOGO "LLEGO ELVIVIERON FELICES POR SIEMPRE"

— ¡Papá date prisa, van a llegar tarde! —lo apresuró Hoseok desde la puerta del salón.

— ¡Voy, voy! —gritó Yoongi, echándose un último vistazo en el espejo.

Se puso las sandalias, salió corriendo de su habitación y entró en la de las gemelas. Buscó entre la maraña de peluches a Chocolate y Narizotas y los colocó en las cunas, luego entró en la habitación de Kyung Jae –nombrado en honor al abuelo- y comprobó que Leoncito estuviera sobre la cama. Revisó por última vez las dos habitaciones y regresó a la suya por el bolso.

—Aún quedan dos horas para que empiece la película. Con un poco de suerte puede que hasta lleguemos a tiempo —ironizó Jimin, cogiendo a una gemela en cada uno de sus brazos a la vez que hacía equilibrios sobre una pierna mientras el pequeño de casi cuatro años se abrazaba con fuerza a su pantorrilla. — Jae, cariño, sino me sueltas me voy a caer.

— ¿Pod qué no podemoz id con ushtedes?

—Por que el cine es muy, pero que muy aburrido y está muy, pero que muy lejos.

— ¿Cómo de lejoz?

—Más allá del puerto del Pico —indicó Jimin, dándole una de las gemelas a su padre y otra a Hoseok.

—No me guzta el puezto del Pico, es malo —arrugó los labios en forma de corazón –herencia de Yoongi- al recordar como acabó vomitando la última vez que se mareó en el coche de papá.

—Efectivamente —asintió Jimin cogiéndolo en brazos y besándole la naricita. — Además, tienes que quedarte aquí para cuidar de tus hermanas...

—Las gemelaz zon un dollo —refunfuñó el pequeño.

—Pues entonces que las cuide Hoseok —dijo risueño Taehyung. — Nosotros nos encerraremos en tu cuarto y jugaremos a los carritos chocones —afirmó cogiéndolo de brazos de su padre.

—Y con leoncito... —asintió el niño, dando palmas.

— ¡Papá! —volvió a llamarlo Hoseok.

— ¡Ya estoy! —exclamó Yoongi al pie de las escaleras.

—Gracias, Señor —musitó Jimin mirando al techo.

—Jimin, no seas irreverente —le regañó Eli.

—Recuerda, estaremos en el cine hasta las diez y luego iremos a cenar y a dar una vuelta... No regresaremos hasta mañana por la mañana. Si pasa cualquier cosa llámanos al móvil —explicó Yoongi por enésima vez a Hoseok. — Taehyung, el puré para las gemelas está en la nevera, en el topper verde, para Jae he dejado hechas unas croquetas. No las calientes demasiado... —dijo cogiendo a una de las gemelas de brazos del abuelo y cubriéndola de besos.

—Tranquilo, pá, lo tengo todo controlado —contestó Hoseok.

—Yoongi, llegaremos tarde —avisó Jimin, quitándole a la gemela y dejándole en las cariñosas manos de Hoseok.

—Puedes quedarte a dormir si quieres —le dijo Yoongi a Taehyung cogiendo a la otra gemela. — Hoseok va a acostarse en nuestra habitación para estar pendiente de los niños —comentó frotando la nariz contra la de la gemela, ésta se rió feliz, — así que tú puedes dormir en la suya.

—No te preocupes, hijo, lo tenemos todo bajo control —afirmó Eli, quitándole a la gemela de los brazos y acurrucándola contra su hombro.

—Claro que no me preocupo, son las mejores niñeras que nadie puede tener —afirmó Yoongi cogiendo a Jae de los brazos de Taehyung y comiéndoselo a besos. — Te voy a echar mucho de menos, príncipe —dijo revolviéndole el pelo.