*POV KAGOME *- ¿El joven Sesshomaru no dijo nada más? ¿Están seguros?
"¿Anciana Kaede?"
- No anciana, mi amo no dejó más indicaciones, ni siquiera me espero - escuché la dolida voz de Jaken.
Quería abrir los ojos pero no podía, mi cuerpo se sentía muy pesado y dolía.
- Ella estará bien, ¿verdad abuela? - decía Rin con una voz apagada - no quiera perder a otra persona, he perdido a toda mi familia y no quiero perder a la Señorita Kagome, ella me Ha acogido como una hija.
- No te preocupes Rin, ella estará bien, Kagome es una joven muy fuerte y Valiente - Sango trataba de calmarla.
Intenté moverme a un costado y pronto descubrí que era una mala idea. Al rodar sobre mi costado di un grito horrible, a pesar de que dolía, eso significaban buenas noticias, había sobrevivido al primer encuentro con Sounga.
- No hagas eso Kagome - me regañó la anciana Kaede.
Todos los demás se habían quedado quietos y asombrados cuando escucharon mi grito.
Jaken, que había estado de espaldas a mi llorando se dio la vuelta y pude ver un poco de tranquilidad en sus ojos.
- Señora, que alivio que este bien - "al menos el amo no tendrá motivo para matarme"
- ¿Dónde están ellos? - pregunté jadeando un poco.
No había necesidad de decir a quienes me refería.
- Inuyasha ha ido por su cuenta a tratar de detener a Sounga, supongo que es su manera de pedir disculpas por haberte lastimado. - explicó el monje Miroku.
- El joven Sesshomaru se ha ido poco después de que te trajera, dijo que iría en busca de Sounga igual, aunque antes debía buscar a un tal Kaijinbo - completó Sango.
- Entiendo - dije de forma pensativa - aunque no me explico como es que no te llevó con el Jaken.
- Mi amo es fuerte, yo solo Estorbaría en la pelea - dijo él.
- Es porque el está preocupado por su bienestar Abuelo Jaken - dijo la pequeña Rin.
- Que cosas dices chamaca, no debes meterte en la plática de los adultos.
- Tiene razón Rin, él nos ha dejado por que se preocupa por nosotros, sin embargo, me veré en la necesidad de poder desafiar sus ordenes, iré a buscarlo - me puse de pie y sentí que los demás también se levantaban.
- Iremos con usted Señorita - dijo Miroku y no había ningún tipo de duda en su voz.
- Así es, iremos juntos, TODOS - confirmó Sango.
- Menos usted anciana - fanfarroneó Jaken.
- Abuelo Jaken no tiene porque ser grosero - Rin se levantó e hizo una reverencia ante Kaede - por favor abuela Kaede, disculpe al Abuelo Jaken no sabe hablar con las personas, puede ser que se siente inseguro porque él es más bajito que yo.
Y a pesar del momento tenso, todos nos reímos.
Después de eso todos nos fuimos a alistar y a llevar cosas que necesitabamos, no sabíamos como sería la batalla con Sounga, tampoco quien sería su portador, pero estábamos seguros de que si con Inuyasha había sido demasiado desastroso y nos había costado mucho, si la espada buscaba a alguien a un más fuerte estaríamos en serios problemas.Al cabo de unos minutos ya todos estábamos listos.
Yo iría con Shippo, Rin y Jaken en Ah-Un y Sango y el monje Miroku irían con Kirara, necesitábamos alcanzarlos lo antes posible.
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Ojos color ámbar
Hayran KurguKagome está enamorada de unos ojos color ámbar, pero... ¿Los enemigos, las épocas y sus diferencias podrán más que el amor que siente?