Ambos chicos se encontraban sentados en los columpios, debajo de la lluvia, sin nada con que cubrir sus cuerpos.
- ¿Hueles eso Mat?... Es simplemente maravilloso, ¿No lo crees?
- Kei... Hay cosas más maravillosas en el mundo que eso y para mí... Tú...
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— Bloody Halloween. — Manjiro Sano, líder de la Tokyo Manji, conocido en los bajos mundos como "El invencible Mikey", aquel que escondía sus emociones de todos. — 300 de Valhalla contra 150 de ToMan, a pesar de la aplastante desventaja. — Aquel que decidió cuidar de Kei después de la muerte de Keisuke Baji. — Cada uno de ustedes sostuvo lo suyo y reclamó nuestra victoria. — Aquel al que el mismo Kei juró proteger con su vida además de lealtad absoluta. — Shuji Hanma tiene un mensaje para ustedes.
— Valhalla nunca tuvo un líder, así que... Como consecuencia de nuestra derrota, nos uniremos bajo el estandarte de ToMan. — El desconcierto de todos no se hizo esperar. — ¡Ahora Valhalla está afiliada con la pandilla de Tokyo Manji!
¿Era algo malo?, Claro, pero para muchos y por no decir casi toda la pandilla, la unión de Valhalla significaba otros 300 chicos al mando de Manjiro, sin duda algo impresionante y digno de celebración. O al menos eso es lo que piensan los que no están al tanto de la situación.
Por su lado, Kei mordió su labio inferior con fuerza, tener a Hanma y Kisaki cerca solo significaba que las amenazas hacia su persona seguirían presentes.
Antes de que sus pensamientos consumieran su cabeza un movimiento cerca de su mano lo hizo dirigir su mirada a ese lugar, Chifuyu había entrelazado sus meñiques como una silenciosa señal de apoyo.
Cierto, ahora Kei no estaba solo... Ahora tenía a Chifuyu... Tenía a Chifuyu... Ah, y a Takemichi también.
Una pequeña sonrisa apareció en su rostro, no le importaba lo que el resto hablaba o decía, de cualquier manera, Sano le dijo lo que pasaría en esa reunión un par de horas atrás.
— A pesar de que obtuvimos mucho en el Bloody Halloween... También perdimos a alguien. — Sus manos se soltaron y no por voluntad propia, sino que el anuncio que ellos darían era importante para ellos. — El capitán de la primera división... Keisuke Baji, murió ese día. — Silencio total por parte del resto a las palabras de Mikey. — Debemos reflexionar profundamente acerca de este hecho... Y tomarlo seriamente... Les dejo el resto... Vicecapitán, Chifuyu Matsuno y antiguo capitán suplente de la primera división, Kei... Okumura.
Okumura. Hace tanto que no escuchaba su apellido salir de los labios de alguien, hasta hace poco le incomodaba que lo llamarán de esa manera y no porque le gustará negar a su familia, más bien era porque si conocían su nombre era muy probable que se enterarán de todo lo que hizo en el pasado.
Algo de lo que los altos mandos de la ToMan estaban al tanto y después de horas de reflexión junto a sus amigos decidió volver a utilizarlo, le importaba una mierda que lo que los desconocidos pensarán de él... Las personas más importantes para Kei lo habían aceptado y con eso le bastaba.
Ambos dieron un paso al frente, claro que el bicolor dejó que el rubio se mantuviera un par de metros al frente.
— Consideré dejar ToMan, pero nuestro líder me detuvo diciéndome... "¿Quieres extinguir la llama de la primera división?" — Nadie podía darse a la idea de lo mucho que le había golpeado la reciente perdida a Chifuyu. — Liderar la primera división... Es una gran responsabilidad para mí... Para nosotros. — Hizo referencia al chico que se había mantenido detrás de él. — Hablamos de ello con el líder... Durante días y días... Y juntos llegamos a una conclusión.
