CAPÍTULO XXXV

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Claramente, fue imposible cubrir por completo el cuerpo de Takemichi, por mucho que Kei deseará que el rubio no fuera reconocido por Kokonoi el simple hecho de que su mirada se desviará a las personas que intentaba cubrir lo hizo suspirar

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Claramente, fue imposible cubrir por completo el cuerpo de Takemichi, por mucho que Kei deseará que el rubio no fuera reconocido por Kokonoi el simple hecho de que su mirada se desviará a las personas que intentaba cubrir lo hizo suspirar.

— ¿Quién demonios son esos idiotas a los que cubres? — La frialdad de sus palabras sumado al insulto fueron el causante de que el bicolor diera un paso al frente con una clara mueca de disgusto, sinceramente no era el reencuentro que esperaba, ya ni siquiera recordaba el pésimo comportamiento de Koko.

— No es de tu maldita incumbencia, Hajime. — Pero claro que la suerte no estaba de su lado, un chico de la pandilla contraria se acercó a susurrarle algo al oído, no tenía ninguna duda de que revelaría la identidad del rubio que cubría.

Más pronto que tarde la sonrisa de superioridad que Koko le brindaba al bicolor fue sustituida por una cara que reflejaba disgusto y descontento.

— ¿Hay un idiota de la ToMan aquí?, ¿Me estás jodiendo? — A pesar de que seguía escuchando los susurros del chico que había mencionado el puesto de Takemichi, Okumura podía jurar que eso último fue dirigido a su persona quien aún intentaba cubrirlos.

— En realidad me sorprendes, Koko. — A pesar de querer lucir relajado frente al pelinegro un escalofrío recorrió su cuerpo. — Tardaste bastante en encontrarme.

La atención estaba puesta en ambos chicos que se habían vuelto los representantes de ese pequeño encuentro.

— Bueno, ya sabes, no contaba con que mi precioso chico se cambiará el nombre, mucho menos su apariencia. — La sonrisa mutua que se dedicaron generó una ola de confusión entre ambos bandos y para evitar preguntas cambiaron de tema rápidamente. — Ahora... Takemichi Hanagaki, capitán de la primera división y como regalo extra, Kei Okumura... ¿Tú cuentas como antiguo capitán a pesar de haber durado menos de una semana?

— Quién sabe, solo es un título que se me fue impuesto por un idiota. — Rascó con desinterés el arete de su oreja, no debía bajar la guardia a pesar de tratarse de uno de sus mejores amigos, no lo haría otra vez.

— Este es el territorio de los Black Dragons, si otra pandilla viene el jefe nos dio instrucciones de matarlos... ¿Saben lo que significa, no? — Por unos segundos Kei vio reflejado al Hajime de hace unos años, sobre todo por su característico hábito de mostrar su lengua para burlarse de la gente. — ¡Significa que están muertos!

— Vayan por ellos, chicos. — Lo había notado pero no le había prestado la atención suficiente al rubio que se encontraba al lado de Hajime, esa cicatriz es difícil de olvidar.

Un chasquido por parte del bicolor fue suficiente para qué intercambiarán una mirada efímera, si bien se conocían no podían afirmar que eran amigos, después de todo no convivieron durante tanto tiempo como les habría gustado.

— Tranquilos chicos, ¡Takemichi es mi amigo!... Y el otro idiota ha estado varias veces rondando por la zona. — No era momento de broma por lo que Kei gruñó en voz baja por la forma en la que se refirió a él.

PETRICOR ・・・  Chifuyu Matsuno  ¤ CANCELADA ¤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora