Loyal (SukuFushi)(omegaverse)

C7

Omnisciente

Megumi se quedó con una extraña sensación desde esa noche, que Sukuna le haya besado no era cualquier cosa.

Empezando por qué ni siquiera comprendía el porque lo hizo y eso le asusta.
Ahora entiende las dudas de su padre y la notoria preocupación de Panda cada que le habla de Sukuna.

Ese alfa no tenía consideración con nadie, era bastante grosero, violento y era cero accesible.

Pero no con Megumi, no es que fuera la mejor persona con él, pero vaya, le dió el privilegio de salir, no le ha tratado mal y hasta parece interesado en él.

Y duda mucho que ande besando a otros sirvientes como lo hizo con él.

Nomás con recordarlo se ponía rojo y nervioso.
Peor sabiendo que por orden de Sukuna ahora tendría que atenderlo en todo.
En TODO.

Así que aparte de estar agobiado, estaba lleno de trabajo.

Terminó de preparar el desayuno y ya iba rápidamente para la habitación de Sukuna, estaba asustado especialmente en ese momento, se le había hecho un poco tarde y ya casi estaba imaginando al alfa molesto.

Llegó a su habitación con la cabeza agachada para dejar la bandeja con el desayuno en la mesa.

— Omega — habló el alfa justo antes de que el pelinegro pudiese dar la vuelta — Ven aquí —

Apenas así Megumi levantó la mirada, Sukuna estaba sentado sobre su amplia cama con una hoja entre las manos — ¿Por qué tardaste tanto? —

Megumi suspiró.

— Lo siento, amo — se disculpó — me desperté unos minutos más tarde, no volverá a pasar — Sukuna dejó salir una pequeña risa.

— Que descarado — dijo sin estar molesto, hasta parecia divertido.

Megumi se puso rojo al darse cuenta que Sukuna no traía nada puesto debajo de esa bata de dormir.

No le sorprendía que el alfa durmiese desnudo.

Para no ver demás puso su atención en esa hoja que el alfa traía en las manos — ¿Sabes cuál es el castigo de los entrometidos? —

Todo iba de mal en peor, ahora pensaba que estaba metiendo su nariz dónde no.

— Y-yo no se leer, amo... — suspiró ruborizado — Lo siento — ya no tenía ni quería seguir ahí.

Apenas dió la vuelta y de nuevo Sukuna le llamó.

— No te di permiso de irte — el chico se detuvo nuevamente, toda la situación era tan frustrante — Acércate — Megumi luego de suspirar bajito regresó.

Aún así se mantuvo un poco alejado de la cama, no quería ser grosero y a la vez se sentía más tranquilo sin tener a Sukuna tan cerca.

Aún así el alfa le alcanzó a tomar de la cintura y sin hacer mucha fuerza lo acercó a la cama dónde él estaba sentado.

Megumi odiaba sus torpes pies que tropezaron por el jalón haciéndole caer en la cama. Encima de Sukuna.

Le miraba muy de cerca, sentía la cálida respiración del alfa contra la suya.

— No soy un hombre muy paciente o tolerante... — movió su mano hasta dejarla sobre el trasero del omega que ahora estaba más que nervioso — No me hagas castigarte — dió unas suaves palmadas sobre las nalgas del omega — ¿Entiendes a lo que me refiero, no? —

Megumi estaba frío, apenas pudo mover su cabeza para asentir y tragar saliva.

— S-si, amo — Sukuna negó con una sonrisa.

— No me llames amo... — le robó un apasionado beso — dime alfa... — dijo en un tono más grueso que hizo sentir escalofríos al omega.

Y no solo escalofríos.

Ahora fue Megumi quien le dió un corto beso, parecía estar cegado por su propio omega interior que se sentía increíblemente atraído por un alfa tan fuerte como lo es Sukuna — Buen chico... —

El pelinegro tenía los labios entreabiertos y respiraba profundamente, algo dentro de él pedía más y más.

Cosa que no entendía, jamás había tenido algún tipo de encuentro con un alfa.

De hecho Sukuna le había dado su primer beso, Sukuna fue el primero en tocarlo de esa manera.

— G-gracias, alfa — soltó un pequeño gemido cuando sintió que el otro le dió un apretón en una de sus nalgas.

— Te espero a la hora de la comida — Megumi se levantó lentamente aún sintiéndose entorpecido — Y no tardes — el menor asintió rápido para darse la vuelta rápidamente.

Su mente apenas estaba asimilando lo que sucedió, ya sentía todo su cuerpo caliente y no hacía falta verse en un espejo para saber que estaba más que rojo.

Estuvo en la misma cama que Sukuna, esté le tocó y besó.
Era una situación que podría haber escalado  a algo más íntimo.

Megumi es tan virgen que ese contacto le hizo tener bastantes sensaciones tanto mentales como físicas.

Teme que se convierta en un problema.

[...]

— Yuuji — el omega volteó rápidamente al escuchar la voz de su hermano detrás de él.

— ¿Si? — disimuladamente cubrió sus rodillas dónde tenía unas leves marcas.
Pero sabiendo lo fijado que es Sukuna se daría cuenta hasta del más mínimo raspón.

Esas marcas que Yuuji tiene en las rodillas lo podrían meter en muchísimos problemas.

Yuuji supo aprovechar esas dos horas que salió el día anterior, tanto que hasta le quedaron marcas en las rodillas.

Al contrario de Megumi, Yuuji ya no era virgen y se podría decir que tiene una vida sexual activa.

— Este fin de semana habrá una celebración en la casa de los Satoru, hoy me llegó la carta — era otra de las familias mas poderosas de ahí — Tenemos que ir, detesto a esos idiotas pero es mejor tenerlos de nuestro lado —

— Si, está bien — asintió con una pequeña sonrisa — aun que tendré que usar ropa nueva — Sukuna rodó los ojos.

— Solo no tomes dinero de más, sabes que no me puedes ver la cara de estupido — Yuuji asintió queriendo burlarse.

Obviamente no dijo nada — También, ¿Que tan cierto es que ese chico, Megumi, no sabe leer? —

— Es verdad, él no sabe leer ni tres palabras — Sukuna asintió lentamente — ¿Por qué preguntas? —

— Si te pide ayuda o quiere aprender, no le enseñes — Yuuji frunció el ceño.

De nuevo Sukuna empezaría con ese tipo de actitudes.

— ¿Qué tiene de malo? — Sukuna rió burlesco.

— Es un omega, no tiene ninguna necesidad en aprender ese tipo de cosas, de hecho no se porque tú sabes todo eso, aun que no dejes de ser un inútil  — levantó los hombros — Pero Megumi trabaja para mí y me pertenece, yo decido que hago con él...

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Holi jjjjjj

Nuevo cap UwU

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Cya
-Manuel.