Capítulo 29

22 12 8
                                    

Termino de arreglarme y bajo a la sala no sin antes tomar mi cartera y teléfono. Al llegar veo a Alonzo sentado en el piso a un lado de Luca, ayudándole con la tarea.

Aclaro mi garganta para así llamar su atención. Levanta su mirada en mi dirección, para luego incorporarse y acercarse a mí.

-Préstame tu carro, por favor -le pido haciendo un pequeño puchero.

Enarca una ceja en mi dirección.

-Lo tierno no te queda -exclama, cruzándose de brazos.

Frunzo mis labios y entrecierro la mirada en su dirección.

-Luego te quejas de que no soy dulce contigo -le recrimino- Bien, dame las llaves del carro Alonzo -le ordeno, intentando disimular la sonrisa.

Sonríe de lado y saca las llaves de uno de los bolsillos de su pantalón para luego extendérmelas, justo cuando voy a tomarlas, retira su mano.

-Maneja con cuidado, estate atenta y me llamas cualquier cosa -ordena con seriedad.

Blanqueo los ojos y extiendo mi mano con la palma hacia arriba.

-Lo sé Alonzo -aseguro con fastidio al ver que no me da las llaves- ¿me vas a dar la llaves o tengo que quitártelas por mis propios medios? -le pregunto y amenazo al mismo tiempo, consiguiendo que me entregue las llaves con rapidez. Le regaló una sonrisa ladeada y me acerco a Luca.

Me acuclillo frente él quedando a su altura y paso mi mano por sus rizos llamando así su atención.

-Voy a salir mi amor, te vas a quedar con el tío Lonzo ¿bien?.

Asiente repetidas veces.

-¿Me traes chocolates? – sonríe y pestañea repetidamente.

-Solo si te portas bien Luca -advierto con dulzura y dejó un beso en su frente para luego incorporarme y alejarme con dirección a Alonzo que se  encuentra parado en la puerta principal.

-Cualquier cosa me avisas -pido mientras le doy un beso en la mejilla, para luego salir del departamento. Marcó el botón del ascensor y espero a que las puertas se abran para ingresar en el.

Salgo del ascensor una vez llego al estacionamiento y dirijo mis pasos hasta el carro de Alonzo.

Enciendo el motor y conduzco fuera del estacionamiento, adentrándome en tráfico.

    *****************************************

Salgo del carro una vez aparco en un puesto vacío en la clínica donde tienen hospitalizado al señor Marco.

Entro a la clínica y me dirijo hacia la recepción.

-Buenas tardes -saludo, llamando la atención de una enfermera. Es joven, me imagino que estará haciendo su pasantía aquí.

Levanta la mirada y me observa con timidez.

-Buenas tardes ¿en qué puedo ayudarla? -pregunta con timidez, su voz siendo casi un susurro.

-Quería saber ¿en qué habitación se encuentra el señor Marco Lombardo? -pregunto, mostrándome segura en todo momento.

Observo a la chica sonrojarse en gran medida para luego desviar la vista.

-¿Usted es familiar? -pregunta con aún más timidez que antes…si es que eso era posible.

-Soy amiga del señor Lombardo -aseguro.

-Lo lamento, no puedo dejarla pasar si no es familiar directo -me explica en voz baja.

Suspiro para luego chasquear mi lengua.

Destinos Entrelazados (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora