The Chosen Ones I : Evanesce

Capitulo 13

Paso una semana más en la que quede en reposo. Todo estaba yendo como miel sobre hojuelas . Damian venía todos los días a verme. Nuestras miradas tímidas decían todo. Normalmente solo venía media hora y luego agarraba sus cosas y se iba a entrenar box. Despues me ponía a hacer los deberes con Luna, que siempre me miraba con una mirada insquisitiva que me exigía a contarle con detalles que había pasado con Damian, yo solo sonreía.

Luego venían los mensajes hermosos que el empezaba a mandarme:

"Hola bffa" escribía como cuando me decia de niña.

"Hola bffo" respondia.

"¿Qué haces bffa hermosa?" Y era cuando mis mejillas se encendían y contestaba un simple "nada... Y ¿tu?"

"Tarea 😔" decia poniendo al lado una carita triste.

"Pues ve a hacerla"

"Pero quiero seguir platicando con mi bffa hermosa"

"No. Ve has la tarea"

"Ño" decía como niño enfurruñado y solo podía contener las risitas de niña tonta.

"Si, bye"

":("

"No me hagas sentir culpable"

"Jajaja bueno al rato me conecto bffa hermosa, te quiero jiji"

"Igual, bye"

"😘" mando un emoji que me mandaba un beso y yo lo deje en visto.

Eso se resumía en lo que pasaba casi a diario. Hablábamos de todo por mensajes. Me preguntaba de mi, de como me había ido con mi vida. Le había mentido diciéndole que todo iba bien, aunque cosas habían cambiado, esto ultimo era cierto. Le pregunte de el, de como había sido para el irse de Maine y me contó que había sido horrible para el dejarme, pero que se alegraba de que yo me hubiera quedado con la familia de Tessie.

Cada vez que podía, me traia un chocolate kiss barato, cosa que me agradaba aunque realmente casi ya no comía comida humana. Me gustaba cuando aveces se quedaba conmigo, abría la ventana de mi habitación para que la suave brisa llegara hacia nosotros. Me gustaba eso de el. Sus platicas eran algo inusual. Me platicaba de su pequeña pasión por la música y que practicaba guitarra, yo le dije que a mi tambien me gustaba la musica y entonces se fue con una sonrisita burlona. Desde ayer que no lo veía y no se había conectado.
El dia de hoy no se presento ni supe de su existencia. Y como era de esperarse, me enfurruñe. Avente el celular al otro extremo de la pared, haciéndose añicos. Medición, tendré que comprar otro teléfono.

"Calma, muchacha" dijo Rachel, cepillándome el cabello. "Apenas y lo conoces"

Negué con la cabeza. "Lo conocía desde antes, solo que no recordaba"

"¿Enserio?" Dijo mientras voltee a ver como sus pupilas se dilataban por la curiosidad. Asenti.

"Fue hace mucho, él vivía en el mismo vecindario que yo en Maine, antes de todo. Creo que teníamos trece la ultima vez que lo vi entonces..."

"¡Cuéntame, mujer!" Me dio una palmada amigable que me insistía a seguir.

"Fue cuando vivía con..."

"La bruja Johanna, si" asintió. Era obvio que sabia, debí suponer, ya que ella era mi custodia.

"Si"

"¿Y entonces?"

"Pues el era el rarito de la clase" confesé a risitas.

"¿Entonces te gustan los raros?"