Parte II

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Porque aquel hombre hacia aquello,y peor aún ella porque le permitia tal insolencia.

--" Erica es una muy buena muchacha,se ha sacado la lotería con ella"-- dijo aquel viejo viendo fijamente a su esposa quien mantenía la mirada perdida.

--" También pienso lo mismo Don Gonzalo,Erica es única"-- aquel moreno comenzó acariciar magistralmente a su bendito pecado entre las piernas. Era algo difícil pero nada imposible para el.

--" Si me disculpan,debo ir al baño"-- estaba a punto de experimentar su grandiosa liberación,pero Franco lo arruinó todo al mencionar a aquella mujer.

Tratando de que las fuerzas volvieran a ella y a sus piernas,se deshizo de la mano de entre sus piernas mientras se levantaba de la mesa.

--" Cariño te ocurre algo...?"-- preocupado el viejo vio como su esposa respiraba erraticamente masticando su chicle con fuerza.

--" Nada vida,quizá sea el bullicio y las personas"-- dijo fulminando a Franco con la mirada,este río mientras saboreaba los dedos que podía asegurar hace unos instantes estuvieron en su interior.

--" Voy al tocador,no tardó"-- tomó su bolso dirigiéndose rumbo a los baños.

--" Estás segura que estás bien...?"-- preguntó una vez más el anciano.

--" Perfecto"--

Corrió desesperada al baño,furiosa con Franco y furiosa con ella misma. Casi llegaba al clímax pero Franco lo había  estropeado todo.

Abrió el grifo del agua para refrescarse la cara,pero para su desgracia no funcionó. Necesitaba liberar toda aquella tensión sexual que llevaba acumulada.

Se aseguró rápidamente que nadie estuviera en los baños. Se recargo contra los lavabos rápidamente  levantandose ella misma el vestido llevando su mano derecha a su feminidad.

No podía darse el placer suficiente,no como aquel Adonis se lo estaba dando. Llevo uno de sus dedos dentro,gimió fuertemente.

Añadió uno más a su tarea,sus gemidos y jadeos se escuchaban por todo el baño. Sintió su clítoris totalmente hinchado su centeo húmedo,estaba segura que pronto llegaría.

Estaba a punto de añadir un dedo más a su tarea cuando sintió como alguien la tomaba de la mano llevándose está misma a la boca.

--" Que demonios haces...?"-- preguntó jadeando mientras abría los ojos lentamente. Era Franco quien olía sus dedos para después llevárselos a la boca.

--" Solo quiero ayudarte"-- dijo obligandola a qué abriera las piernas.

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