Capítulo 64

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Lucero: Amor...

Fernando dormía plácidamente, el día anterior había sido el último en la oficina, dejó la presidencia al mando del vicepresidente de la compañía tenía plena y absoluta confianza en el, confiaba que todo iba a estar tal cual como lo había dejado a su regreso.

Se dedicaría por completo a Lucero y su embarazo, estaría con ella en cada momento hasta que llegara la hora del parto.

Lucero: Fer... Despierta.(le dió suaves palmadas en la espalda, tratando de llamar su atención).

Fernando despertó alarmado, pensó que tenía alguna contracción.

Fernando: Que sucede ángel? Alguna contracción?

Thompson les había dicho en la última consulta que a partir del quinto mes de embarazo la futura mamá iba a experimentar las primeras contracciones, llamadas contracciones de entrenamiento para cuando llegara el momento del parto.

Lucero: Nada de eso amor, dame tu mano(Lucero tomo la mano de Fernando entre las suyas luego la colocó sobre su vientre ahora bastante notorio, y no era de sorprenderse con sus ahora cinco meses de embarazo.

--- Se está moviendo...

Fernando sintió las primeras patadas de su bebé, era una sensación sumamente única e inigualable sentir aquello.

Luego de unos minutos el bebé calmó sus movimientos, Fernando retiró suavemente su mano del vientre, para luego darle un beso.

Fernando: Te amo bebé...

Fernando subió el rostro, encontrándose con Lucero quien lo veía con una sonrisa en los labios.

Fernando: Te amo mi niña.

Lucero: Te amo amor.

Fernando: Ven aquí pequeña, abrió los brazos para acurrucar a Lucero entre ellos.

Fernando abrazo cálidamente a Lucero, la lleno de besos mientras acariciaba al bebé.

Lucero: Que crees que sea?

Lucero tendría mañana su próximo ultrasonido, alfin conocerían el sexo del bebé, ambos estaban emocionados.

Fernando: Creo que será niña.

Lucero: Yo creo que será un principe. Un hermoso niño, guapo como su padre ( le dió un suave beso sobre su pecho desnudo).

Fernando: Creo que será una princesa, hermosa como su madre (Fernando le devolvió el beso sobre la coronilla).

Lucero: Será un principe.

Fernando: Te apuesto lo que quieras amor, a que esté pequeño (colocó una mano sobre su vientre) será una princesa.

Lucero: Acaso ya te volviste adicto a las apuestas?

Fernando: Nada de eso, solo presiento que será una niña.

Lucero: Bien, acepto
---Que te parece un helado?

Fernando: Un helado?

Lucero: Si quiero un enorme helado.

--- Y si yo gano?

Fernando: Pídeme lo que quieras...

Lucero: Que te parece si me acompañas a comprar la ropa del bebé? Voy a necesitar tu opinión como padre.

Fernando: Pero no sé nada de ropa para bebes...

Lucero: Pues tendrás que aprender amor.

Ambos estaban en el consultorio de Thompson, esperando la hora de la cita de Lucero. Faltaban solamente quince minutos. Lucero hojeaba tranquila una revista de modas que encontró sobre la mesita de caoba del pasillo, mientras que Fernando nervioso movía la pierna de arriba a abajo.

Lucero: Puedes calmarte, me pones nerviosa.

Fernando: Lo siento no puedo evitarlo.

Lucero: Tranquilo amor, ya verás que todo saldrá bien.

El consultorio de Thomson se abrió dejando ver a una pareja no mayor que ellos, ella se veía en las últimas etapas de su embarazo, mientras que el la ayudaba sosteniendola del brazo.

La enfermera salió del consultorio, buscando a la señora Lucero Hogaza de Colunga.

Lucero: Soy yo señorita.

Ella se levantó de la silla, tomó la mano de Fernando entre la suya y caminaron con dirección al consultorio.

Thompson: Que bueno verte Lucero, y a ti también Fernando.

Fernando solo asintió con la cabeza aún seguía nervioso.

Lucero: Lo mismo digo doctor.

Thompson: Algún síntoma fuera de lo normal?

Lucero: Nada nuevo doctor excepto por las contracciones.

Pero creo que es normal,no es asi?

Thompson: Tienes razón...

-- Toma, le entregó una bata azul, ve a cambiarte vamos a comenzar con el ultrasonido.

Lucero se levantó de la silla donde estaba sentada para dirigirse al baño.

Fernando: Son normales las contracciones? No son peligrosas?

Thompson: Tranquilo Fernando,estás contracciones la están preparando para el momento del parto, que serán aún más fuertes que las que está presentando ahora, no te preocupes.

Fernando: Estás seguro Thompson?

Thompson: Totalmente, pero si se presentará alguna anormalidad, ya sabes dónde encontrarme.

Lucero salió del baño, vestida con la bata, con ayuda de Fernando se trepó a la camilla dónde regularmente Thompson realizaba los ultrasonidos.

Thompson encendió el ecografo, tecleó unas cuantas cosas sobre el monitor, luego colocó el frío gel azul sobre el vientre de Lucero lo que provocó en ella un escalofrío en todo el cuerpo.

El doctor comenzó con el ultrasonido, mientras que Fernando sostenía una de las manos de Lucero entre las suyas,ambos veían atentamente al monitor dónde se podía ver al bebé moviendo sus pequeñas manos y dando leves patadas.

Lucero sonreía feliz mientras algunas lágrimas fugaces caían en sus mejillas, Fernando estaba igual de emocionado que ella.

Thompson: Veamos si este pequeño quiere que lo veamos,hizo unos cuantos movimientos con el transductor sobre todo el vientre, luego de algunos minutos después el doctor logró ver el sexo del bebé.

Thompson: Felicidades serán padres de ...



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