El Stripper II

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--" No me toque"-- se zafó del agarre de aquel hombre mientras trato en vano de ir en búsqueda de su celular.

--" Eres muy bonita,lo sabías...?"-- el hombre la halo contra su cuerpo rodeando su cintura con sus enormes manos.

Su respiración comenzaba agitarse,cuando sintió aquellas manos fuertes y enormes manos tocar su cuerpo.

--" Es tu último día como soltera bonita, porque no vamos a divertirnos lo que quede de la noche...?"-- susurro contra el lóbulo de su oreja provocando en ella un sinfín de sensaciones.

Camino con ella rumbo a uno de los sillones de la sala,Lucero sentía un enorme y potente bulto rozarse contra su trasero sintiendo como su centro comenzaba a mojarse.

Aquel moreno le ayudo a sentarse en uno de los sofás de la sala,viéndola atentamente relamiéndose los labios al imaginar las miles de cosas que podría hacerle con su lengua.

Amaba a su novio eso lo tenía muy claro,quería empezar su matrimonio con el pie derecho,sin nada de lo que pudiese arrepentirse o tuviera remordimientos en algún futuro o quizá en el presente.

--" No puedo..."--- dijo abriendo los ojos de golpe sintiendo como una lágrima rodaba en su mejilla.

Ni siquiera había recordado cuando los había cerrado,ahora se encontraba esposada al respaldo de una silla que estaba en la sala.

---" Es muy tarde para arrepentirse muñeca"-- la voz provenía de la esquina de la sala justo donde estaba el reproductor de música.

Saco del estuche que llevaba consigo su infaltable cd para reproducirlo cada vez que iba a trabajar. Una música sensual y exitante comenzó a escucharse en todo el departamento.

Comenzó con su rutina de baile,camino lentamente hacia su objetivo quien luchaba en vano por zafarse de donde estaba esposada mientras que el la veía con la sonrisa ladeada.

--" Que quieres...?"-- pregunto colocando una de sus enormes manos sobre su muslo descubierto.

--" Quiero que me quites estas cosas y salgas de mi apartamento lo más pronto posible"-- trataba de escucharse fuerte y convencida,pero no podía. No teniendo a semejante semental tocandola de ese modo.

--" Del único lugar del que no quiero ni pretendo salir es de tu cama"-- susurro contra el lóbulo de su oreja antes de comenzar a despojarse de supuesto chaleco antibalas que traía puesto.

Su boca dibujo una "o" al ver a semejante semental frente a ella. Aquel moreno tenía un abdomen esculpido por los mismos Dioses del Olimpo.

RELACIONES PROHIBIDAS ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora