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CENA ROMÁNTICA

Es miércoles por la tarde y me dispongo a arreglarme para la cena con Manuel. Como viajamos a Punta Cana quise darle esta cena como un detalle de mi parte, en fin seguimos "celebrando nuestro aniversario".

Después de tomar una ducha coloco mis cremas para el cuerpo y el rostro. Acto seguido me siento en el tocador e inicio a maquillarme, al finalizar busco el vestido que me pondré.

Elijo un vestido negro de lentejuelas con un listón igual que hace moldear mi cintura y donde dejo mostrar de manera elegante pero a la vez muy sensual mis piernas. Es de manga larga un poco holgadas con un corte que deja mostrar mis hombros. Observo mis bolsos y elijo uno de mano del mismo color del vestido. Termino mi outfit con unos zapatos cerrados color piel para dar un buen contraste. Y para finalizar recojo mi cabello en una coleta sencilla pero elegante que no opaque el corte de mi vestido.

Al bajar me encuentro a los niños, me despido de ellos y me dirijo al restaurante donde hice la reserva. Quedé de verme con Manuel a las 8:00 P.M. y voy con tiempo de anticipación para asegurarme que todo este como lo planeé. Al llegar al lugar me reciben de la mejor manera y me llevan a la sala reservada. Pasa una media hora y todo por fin está tal y como lo solicité, entonces me siento a esperar a Manuel.

Amiga, mucha felicidad hoy en tu cena - recibo un mensaje de Chanty - Disfruta tu noche.

Gracias amiga - le respondo con una sonrisa - después te cuento - le envió acompañado de emojis de risa.

Pasa unos 15 minutos y mi emoción aumenta, pues en cualquier momento Manuel puede llegar y confieso que quiero ver su reacción. Ya que él piensa que es una simple cena como solemos venir a este restaurante que es uno de nuestros favoritos.

Antes de centrarme por completo en la llagada de Manuel decido llamar a casa para saber de los niños.

Mis amores se van a dormir temprano - les digo con un tono sutil - Papá y yo llegaremos tarde, entonces nos veremos mañana para llevarlos al colegio. ¿Bien?

Al terminar la llamada guardo mi celular en el bolso y apoyo mis codos en la mesa entrelazando las manos y apoyando mi quijada en ellas. Así pasan otro 15 minutos y Manuel aún no llega.

Escucho que un mensaje llega y vuelvo a sacar mi celular - Quizás puede ser Manuel - Pienso, pero es un mensaje de mi prima.

Linda noche, recuerda mi cena el viernes. Los estaré esperando - dice su mensaje acompañado de un emoji de corazón rosa.

Allí estaremos - respondo y coloco un emoji de sonrisa.

En ese momento me llegan algunas notificaciones de Twitter y decido entrar. Me distraigo viendo las publicaciones de mis lucerinos que me alegran cada momento del día con sus ocurrencias, sus ediciones y los mensajes tan lindos que me envían. Así pierdo la noción del tiempo y ha pasado 45 minutos y Manuel aún no llega.

Manuelito - le envió un mensaje - ¿Dónde estás? ¿Todo bien?

Amor estoy esperando en el restaurante - le envío otro mensaje a los 5 minutos.

Me estás preocupando - han pasado 15 minutos después del último mensaje - ¿Estás bien?

Decido llamar a la casa y Tere me contesta - Buenas Noches.

¿Tere de casualidad Manuel ha ido a la casa? - pregunto muy angustiada - No señora, aquí no ha venido y tampoco ha llamado - me contesta.

Cierro la llamada y le marco una vez más a Manuel y como en las últimas 5 llamadas no obtengo respuesta. Ha pasado aproximadamente hora y media o ya casi serán las dos horas de estar esperando y al no saber nada mi preocupación aumenta.

NARRA MANUEL...

Saliendo del estacionamiento decido revisar mi celular y veo llamadas y mensajes de Lucero y me alarmó pensando que algo podría haber sucedido, hasta que recuerdo la cena que reservamos para esta noche.

¡Carajos! - golpeó el timón - ¿Cómo se te olvidó - me digo a mí mismo.

¿Qué hago? - Pienso.

Abro los mensajes y decido responder.

NARRA LUCERO...

"Lucerina, surgió una reunión de último minuto y olvidé avisarte. La reunión duró casi 3 horas y fue después que terminé de grabar. Ya voy en camino al restaurante".

Dice el mensaje que recibí de Manuel, en ese momento algo dentro de mí se sintió vacío. Guarde el celular y levantándome de la mesa decido dejar el lugar.