V E I N T I U N O

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Llorar.

A lo largo de mi vida e tenido más días tristes antes que felices, e llorado más de lo que una persona puede soportar y lo único que quiero es morir para dejar de llorar, mi hijo es lo que me mantiene viva.

Creí que la felicidad por fin había llegado a mi pero Jungkook había arruinado todo con un supuesto amorío entre Seokjin y yo, quiero abrazarlo y besarlo para decirle que no les crea, qué crea en mi.

Pero uno debe aprender a superar los problemas y los acontecimientos que sucederán a lo largo de la vida. ¿Cómo superar la negación de tu esposo hacia su hijo?

Jungkook había enviado sirvientas a empacar todas mis cosas, estaba sentada en mi cama mirando como todo era empacado, mis lágrimas no dejaban se salir y en un intento de confort acariciaba mi vientre, Hoseok ha ido a buscar a la dama Seung y So que curiosamente no estaban, observé a Jimin entrar a mi habitación y no dude en ir a sus brazos y echarme a llorar.

-Jungkook se entero de...

-Es mentira -dije sintiendo como acariciaba mi cabello- Lo que dicen que mi hijo es del Rey, es mentira.

-Te creo cuñada -dijo abrazándome fuertemente y se separo un poco de mi- Hablaré con Jungkook, no dejaré que te mande al exilió.

-No te va a escuchar -me separé y limpie mis mejillas- No me dejo explicar nada.

-¿Te pegó? -acaricio mi mandíbula- Tienes marcas ahí -me quedé callada agachando la mirada- ¡Ese imbecil!

-¡Príncipe no!

Corría detrás de él mientras a paso rápido se dirigía hacia los aposentos de Jungkook trataba de alcanzarlo pero por el peso de mi vientre no podía correr muy rápido, Jimin abrió la puerta a pesar de que el Eunuco Han trato de impedirlo, y hubiera deseado no haber entrado.

Jungkook estaba con la concubina Lee... desnudos en su cama, en la cama donde una vez yo dormí.

-¿Qué creen que están haciendo? -dijo él tapando su desnudez y el de Lee.

No pasaron ni tres horas y él ya fue a llamar a otra mujer. Sentía un nudo en mi garganta, aún así apreté mis manos y respiré fuerte para evitar llorar, tenía que ser fuerte, no solo por mi bebé, si no también por mi.

-Golpeaste a la Emperatriz -afirmó Jimin- ¿Cómo golpeas a una mujer embarazada?

-¿Por qué debería importarme? -dijo Jungkook aún sentado mirandolo- Ese hijo no es mío, no me importa lo que le pase.

-Debemos hablar -dije yo poniéndome delante de Jimin, vi como Lee abrazaba la espalda de Jungkook- A solas.

-No tengo nada de que hablar contigo -respondió seco sin mirarme- Ya te dije todo.

-Pero yo no, hablaste tú y merezco que me dejes hablar.

-¡Tú no mereces nada! -tiro una almohada hacia mi rostro- Lárgate y no vuelvas.

Veía la sonrisa de la mujer detrás de Jungkook llena de satisfacción, si no fue la Viuda, fue ella. Estaba casi segura de eso.

Si Jungkook no quería escucharme porque su "mujer" se lo dijo esta bien, una vez dije que sería una mujer completamente diferente, que si querían a una Emperatriz malvada estaba bien y que no importaba quien, ni siquiera Jungkook. Jamás volvería la _____ piadosa y gentil.

¿Tengo que hacer eso para proteger a mi hijo?

Si...

Y lo haré.

-Esta bien -limpié mi rostro y sonreí- Te estas convirtiendo en el idiota de antes -me miró molesto- ¿Dijiste que querías que me fuera al exilió?

-Si, lárgate de mi palacio.

-¿Con que cargo? -miré a Jimin y luego a Jungkook- ¿Tienes algún cargo?

-Por traición.

-¿Tienes pruebas? -sonreí de lado- La palabra de una prostituta como Lee no tiene valor ante nadie. Y si hay las supuestas pruebas iniciare una investigación para que aquel que inició ese rumor pagué con su vida.

-Había olvidado lo perra hipócrita que eras -habló mirándome seriamente.

-Y yo que eras muy idiota -me acerqué un poco más hacia él- Después de todo no somos tan diferentes, ambos volvimos a lo de antes con la única diferencia que tú por tu ignorancia y yo por mi hijo.

Mire por última vez a Jungkook y me di la vuelta, Jimin estaba detrás manteniendo una distancia prudente y vi en la puerta a Hoseok junto con mis damas de compañía, Jungkook se atrevió hablar llamando toda mi atención.

-Si ese niño nace en mi palacio -hizo una leve pausa habló más fuerte- ¡Morirá!

No dije nada por el leve miedo que sentí en mi ser, Jungkook es capaz de todo, lo sabía.

-Hoseok -llame y vino hacia mi mientras caminábamos a mi habitación- Llama a mi padre y a mis hermanos y también al Rey Seokjin.

-¿Al Rey? -pregunto Jimin- ¿No hará que las sospechas crezcan más?

-Jungkook no cree en mi -dije bajando las escaleras- Si viene el Rey y explica todo y aún así Jungkook no cree nada debo encontrar la manera de proteger a mi hijo.

Hoseok asintió y se fue del lugar, Jimin también se fue llamando a los ministros para una junta de urgencia, era necesario en estos casos.

-Majestad -habló la Dama So- ¿No piensa que el Emperador tiene alguna prueba para que actúe así?

-Estuve pensando mucho en eso -entré a mi habitación- ¡Largo todas! No iré a ningún lado.

-Pero el Emperador dijo que... -habló una de ellas.

-Yo digo -tomé su rostro suavemente- Ahora larguense.

No fue mucho tiempo en la que todas salieron y me senté sintiendo un leve dolor en mi estómago.

-¿Qué serán las pruebas que tendrá el Emperador? -habló la Dama Seung.

-Eso no importa, sea lo que sea es falso -respondí- Dama So, ¿recuerdas la lista de los hombres que estarán en mi servicio?

-¿Los hombres para que sean parte de sus noches de placer? -asentí haciendo una mueca de dolor- Si la tengo aún, ¿por qué?

-Envía una carta a cada uno de ellos y agregalo al general Min y al ministro Lee.

-¿A ellos? ¿Por qué?

-El general Min Yoongi es un hombre al que Jungkook le tiene mucha confianza y el ministro Lee Jung Suk es lo más cercano que tiene a un amigo, luego de Seokjin. Si quiero impedir que Jungkook le haga algo a mi hijo debo destruir la confianza que le tiene a las personas más cercanas para él -sentí un dolor en mi vientre- Llama al médico, Dama Seung -asintió saliendo del lugar y mire a la Dama So- Envía una carta que vengan apenas nazca mi hijo.

-¿Esta segura Majestad? -me miró preocupada- Una vez enviadas no habrá marcha atrás.

-Debí haberlo echo antes, pero no lo hice pensando que Jungkook cambió y ahora seríamos felices, pero no funcionó, ahora me acaba de amenazar con la vida de mi bebé y no puedo permitir que eso pase y para impedirlo debo ganar poder, dinero y confianza.

-¿Quién quiere que sea el primero, Majestad?

-El Rey Kim Seokjin será el primero en estar dentro de mi cama.





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Pregunta:

¿Cómo reaccionará Jungkook?

¿Creen que la Rayis este en lo correcto?

Emperador Jeon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora