Capítulo 45 -Marcela quiere que Betty le prometa no meterse más con Armando.

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     Marcela había ido a ver a Betty a su oficina, donde Armando acababa de salir.

-Bueno, Beatriz, bienvenida a Ecomoda, ¡ahora como presidenta! Y si necesitas que te explique algo, estaré en la oficina de Caldeirón. - dijo Armando, disfrazándose.-¡Gracias doctor!Marcela atrapa algo en el aire.-¿Qué hacía Armando aquí?-Él también és acionista y esta oficina fue suya.-Sé esto y ¿qué hablaran?-Asuntos de la empresa!-¿Está seguro?-En caso de duda, pregúntele. ¿Lo que desea, doña Marcela?-Mira como está muy arrogante en esta silla.-Mira, doña Marcela fueran los abogados y no yo quien me puso en esta silla.-Está muy contento de haberse hecho cargo de mi empresa, ¡lo planeó desde el principio!-¿Me? No creo que hayas escuchado lo que dijeron los abogados.-¡Oí muy bien! Pero sé que ingresó a esta empresa con esta intención. Eres inteligente, puedo decir brillante, sabes administrar, entende de Economía y Finanzas. Un genio, ¿no es así?-¡No lo sé, pensé que era solo estúpida! Siempre me dijó que yo lo era!-¡No soy paciente, Beatriz, para tolerar tu arrogancia y tu desenfreno!-¡Excelente! ¡Porque soy tan poco aguanto el suyo, señorita! Te cuento cuál era mi intención cuando me incorporé a esta empresa: trabajar como secretaria para aportar ingresos a mi familia y demostrar poco a poco mi valía. ¡Nunca! ¡Nunca imaginé ni quise sentarme en esta silla! Pero así fue. Ya estaba trabajando en otro lugar y si fuera por mí no volvería aquí.-¿Y por qué volviste? ¿Por qué no nos dejas solos?-En este momento, no hay nada que quiera más que esto para que termine, pero lamentablemente estamos atados y se lo debo a Don Roberto y Doña Margarita. ¡Y quiero devolver la empresa mejor de lo que la encontré y en un tiempo récord!-¿Y qué te hace pensar que lo conseguirás? ¿Crees que eres mejor presidente que fue Armando o crees que porque cambiaste de look y aparentemente entiende cómo vestirte, eres un experto en moda y serás mejor que Armando, que se crió en este mundo? ¡Beatriz!-No pienso en nada de esto, tanto que cuenta con la valiosa ayuda y colaboración de todos ustedes, incluido Don Armando para que lo antes posible saque a la empresa de la situación en la que se encuentra y ¡Podemos ser libres una de la otra, como queremos! ¿O no es lo que quieres?-Sí. No dudo de su habilidad como administradora, Roberto no confiaría en tí y tampoco mi hermano, y aparte de eso, estará bien vigilada.-No tengo ningún problema con eso, doña Marcela.-Y digo que estará bien vigilado y cuando hablo también digo de mi prometido.-¿Su prometido?-¡Sí, Armando!-Pensé que había roto com usted, doña Marcela ...-¿Quién dijo eso, alguien del cuartel?-No, no he hablado con el cuartel desde el día de la otra reunión.-El que habló no está bien informado, no dijo la verdad. Simplemente restablecemos la fecha a una fecha más tranquila y exclusiva, planeamos casarnos por la Iglesia.-¿De verdad? Eso no es lo que escuché de Don Armando.Marcela se quedó enojada.¿Armando te dijo eso? -dijó ella com una risa burlona - Por supuesto, no has aprendido nada sobre los hombres, ¿verdad? Por supuesto que le dijó esto. Ya que se convirtió en carne fresca, alguien a quién no escatimará esfuerzos para volver a poner en la cama y esta vez por placer.-¡Pensé que el tema que nos ocuparíamos sería el de negocios y no las preferencias de Don Armando!Marcela se ríe burlonamente.-¿Quieres alejarte del tema para no escuchar la verdad? Pero seguiré hablando: eso es siempre lo que pasa cuando ve carne nueva. Pero cuando termina la novidad, vuelve a mis brazos. Guardemos nuestros esfuerzos: ¿de verdad quieres pasar un rato tranquilo en Ecomoda? ¿Quieres mi colaboración como ejecutiva? ¡Deja a Armando en paz! ¡No lo busques y lo rechaces si lo buscas!-¿Qué?-Eso. Nunca seremos amigos, pero podemos ser colaborativos, ¿no quieres que siga trabajando como ejecutiva de punto de venta? De acuerdo, pero mientras prometas que dejarás a Armando en paz, prométeme que no lo seducirás ni te meterás más con él.-En primer lugar, doña Marcela, que no fue elegida presidenta de Ecomoda por mi propia voluntad, estoy aquí para sacar a la empresa de la situación en la que se encuentra. No es mi interés, sino el tuyo, Valencia y Mendoza. La empresa es suya, aunque reconozca que es un ejecutivo competente en lo que hace, debe ser su interés quedarse, ya que es patrimonio de su familia.-¿Lo que dices?-No le rogaré que se quede, doña Marcela. Creo que don Roberto ya te ha dicho bastante y si yo estuviera en su lugar no dejaría que un extraña se parara frente a la herencia de su familia. El doctor Daniel confía en que se encargará de todo.Marcela se traga su enfado.-En cuanto a mi vida personal, no depende de la señorita, y en cuanto al médico, ya es demasiado mayor para decidir con quién quiere meterse o no.-¿Está diciendo que no tiene dignidad, Beatriz?-¡Usted no tiene dignidad, yo si la tengo!-¿Como te atreves?-¡Si estuviera en su situación nunca iría una hasta mujer y le pediría que no se metiera con mi ex!-¡Creo que en el amor todo vale!-Ni todo. Si estuviera en tu situación, nunca rogaría el amor de un hombre que claramente muestra signos de no amarme.-¡Armando me ama! Pero tiene problemas para lidiar con sus sentimientos.-¿De verdad piensas?-Sí. Lo conozco tan bien como a su madre y le cuesta admitir sus sentimientos, ser sensible y romántico.Beatriz recuerda las declaraciones de Armando en Cartagena y cómo la perseguía cuando salía con Nicolás.-¡Ponte atención cuando hablo, estúpida!Beatriz se ríe, pero siente lástima por ella, ya que se enfrenta a una mujer obsesionada.-Señorita, creo que este asunto se ha extendido, prometí ponerme en contacto con Nicolás para que empecemos a analizar la situación en Ecomoda y, sobre todo, acordar la propuesta de acuerdo que haré con Don Armando en frente al juez.-¿No me lo prometes?-Lo único que les prometo es lo mismo que le prometí a Don Roberto ya la Junta Directiva y es en relación a la empresa. No estoy en condiciones de hacer ningún otro tipo de promesa. Ahora, por favor, le pido que se vaya paara que yo pueda trabajar.-¡Esto no se quedará así! Si te metes con él, pasarás por el mismo dolor que todos las demás cuando lo veas de nuevo conmigo y nos vamos a casar.Beatriz pone los ojos en blanco y sigue a Marcela hasta la puerta.-¡Uf!Mientras...Hugo había invadido la habitación de Armando y comenzó a hacerle preguntas:-¿Y dónde estás, dónde estás, Armani?-¿Dónde está quién?-La diosa, la belleza morena que trajé de donde estaba.... Sé que mi March se quedará muy molesto, pero tu y ella no están más juntos, ¿verdad? Entonces, Armani, quiero que ella haga una audición conmigo.-Hugo, escucha, la chica que vino conmigo no es modelo.¿De quién está hablando? -preguntó Mario.-¡Sabes quién!-No me digas eso ...-Sabes que la empresa siempre ha revelado nuevos talentos en la moda y debido a los recortes, no podemos desfilar com modelos famosos. Necesitamos carne fresca, Armani, para revelar caras nuevas.En ese momento, Betty pensando que Armando está solo, llama dos veces a la puerta y se encuentra con dos presencias desagradables: Mário y Hugo.-Betty ...-¡Ahí está ella! Chica, donde estabas? Dijo que la estaba esperando en el estudio. Estos pervetidos fueron los que la secuestraron, ¿no?-Don Hugo.-Puedes llamarme Huguito. Y vámonos pronto. -Dijo tomándola del brazo.-Hugo entiende que ella no es modelo! Sé que es hermosa, increíblemente hermosa, ¡pero no es modelo!-¡Esto se corrige, por supuesto, mi amor! ¡Ya estas medidas, este cuerpo esculpido nace así!Mário se echa a reír, mientras que a Armando no le gusta que Hugo agarre del brazo a su mujer y ella intenta arreglar la historia.-¡Don Hugo!-¡ Diga Huguito!-¡Huguito, soy yo, Betty!-Sí, sé que su nombre es Betty.Hugo convence a Betty de ir al estudio con él, mientras Mário sostiene a Armando.-Dejálo. Escucha, Hugo no sabe que es Betty, el ex-monstrete, ¿verdad?Armando le mira feo.-¡Para estos y otros que Betty quiere que te vayas de aquí y tiene razón!-En cuanto a eso, estoy seguro de que puedes encontrar la manera de impedir.-¡No haré nada! ¡No dejaré a mi Betty enojadpor tu culpa!-He vivido en esta empresa desde que era joven, nunca he trabajado en ningún otro lugar. No puedes hacer esto conmigo. Mira, puedo ser de ayuda.-¿Igual que?-Puedo ayudarlos. Al parecer, Marcela no aceptará que los dos estén juntos.-Esto no me interesa! No tengo nada com ella!-Ella no acepta eso! Puedo ayudarlos. Vaya, sé que me equivoqué con el plan, pero si no fuera por mí, nunca la habría mirado como mujer, ¿verdad?-Eso es correcto!-Entonces mi amigo. No me gusta que hayas renunciado a hacerme compañía en la escena, pero si estás feliz, puedo intentar serlo. ¡Y puedo ayudarlos! Dile que necesitas mi ayuda, por favor. Puedo ser útil también para la empresa.-OK. Veré lo que hago, pero si ella dice que no al principio, no sirve de nada no insistir, ¡no molestaré a mi Betty en absoluto!-A qué punto ha llegado: ella és quién usa los pantalones en la relación.Armando le lanza una mirada asesina.-¡Cállate o empaca tus cosas ya!-Lo siento, lo siento, quien quiera que habló ya no está aquí._____________Después de unas horas más de trabajo, Armando y Betty hacen arreglos fuera de Ecomoda para que él la lleve a casa.-Un día, esto cambiará. No quiero que sigamos escondiéndonos. Quiero recogerla y llevarla a donde queramos.-Lo sé, pero por ahora no nos conviene asumir nada en la empresa, doña Marcela no acepta.-Tendrás que aceptar. Soy un hombre libre.-¿Ah, sí?-No me mires así, eres mi libertad. Betty, ¿estás segura de que hoy quieres quedarte en casa de tus padres? Porque quería pasar la noche entera en mi apartamento como hicimos ayer.-¡Lo sé, doctor, pero si no vuelvo a la casa de mis padres, él conducirá por la ciudad y, a partir de la mañana, estará de guardia en Ecomoda, entonces no tendremos paz!-Está bien. Tengo un poco de miedo de don Hermes, ¿sabes? Más aún después de lo que me dijiste...-¡Lo sé, pero no pasará nada! ¡Yo no dejaré que él lo haga nada!-Pero con la visita de Marcela, tengo miedo de lo que él pueda hacer.-¡Yo se! También estoy preocupado, ¡pero ni siquiera tuve tiempo de pensar en ello con este tema de la empresa! Pero en cuanto a mi apariencia, sí. No puedo reaparecer así de la nada.¡Me mata por revelarme al mundo como soy!-¡Que cosa!-Tengo que prepararlo para mi cambio, hacerlo poco a poco. Entonces me voy a cambiar de ropa.-¿Y dónde vas a hacer eso?-¿Dónde más? ¡En su departamento!Los ojos de Armando brillaron. Pronto entraron al departamento, claro que no pudieron resistir la pasión y se amaran, después de todo ella tendría que quitarse la ropa nueva para vestirse como antes.-¡Para mí, segues siendo hermosa.-¡No lo pensabas asi antes!-¡Fui un tonto ciego! Para mí, picarona, és divina de esta manera y de la otra, desde que esté en mis brazos.-¡Será mejor que nos vayamos o ya no podremos despegar más! Ojojo. -dijó Betty roja.-Esto és verdad. Me duele tener que llevála, Betty -La besa y abraza, sintiendo dolor.-Lo sé, a mí me pasa lo mismo, pero... -le acaricia la cara con ternura -Estaremos unidos, pensando el uno en el otro, al menos yo estaré ...-¡Y yo mucho más, Betty! - Armando la apretó contra él.Armando dejó a Betty en la puerta de su casa, no podía creer que la volviera a dejar así: por un rato, el tiempo volvió. Ya no era su novia, sino esa secretaria que contrató y se convirtió en su asistente y amante. Ese nuevo look agradaría a su mamá ya Nicolás y más a ella misma, pero le traería grandes problemas y persecuciones por parte de su padre, por lo que decidió volver al anterior, al menos inicialmente. Lo único que no podía hacer era con los dientes, así que le mostraría cómo eran sus dientes sin los frenillos.Betty respiró hondo y tocó el timbre de su casa.-¡Hola papá, mamá!-¡Betty! -la abraza.-¿Por qué no vino aquí, señorita, antes de ir a Eomoda? ¡Yo queria llevarte!-És que, papá, Doña Catalina me llevó directamente a la empresa y luego me trajo de regreso... ¿Y no me das un abrazo?-¡Sí mamita! - dijo Julia abrazándola.Hermes estaba, todavia frío com ella, aunque quería abrazarla fuerte, lo que Marcela le había dicho le hizo repugnar, en cuanto revisó tintin por tintin, vio algo diferente en su hija y no supo qué era, si era el capul que parecía un poco de lado, hasta que la vio sonreír.-¿Qué hiciste con tus dientes, Beatriz Aurora?¡Me quité los brackets!-¿Y cómo hiciste eso? - don Hermes seguió preguntandola.-¡Está muy hermosa, hija!-Fui al dentista. ¡Ya no los necesitaba!-Y que dientes perfectos.-Espero que ese haya sido el único cambio, señorita...-Ojojojo sí, papá.Sabes que tenemos que hablar.-¡En Ecomoda todo está bien! Y ahora soy la nueva presidente.-¿QUÉ? - preguntaron ambos.Betty explica todo, dejándolos atónitos.-En este sentido, ¡creo que se las arreglará bien, estudió mucho para esto, mejor que aquél doctorcito!Betty quería objetar, pero no quería que su padre se enojara aún más.-Pero ¡eso no es todo! ¿Y sobre lo que dijo esa señorita?-¡Hermes! La niña está cansada, acabó de llegar de viaje, ha sido un día ajetreado, mejor que suba y descanse.Mantén la boca cerrada, Julia. Tendrás que explicarme, ¿es cierto lo que dijo esta chica?Por suerte, a esta hora suena el timbre, es Nicolás.-¡Mira quién vino!-¡BETTY! ¡Como te extrañé, Betty!-dijó NicolásLos dos fingen abrazarse, pero simplemente giran como de costumbre.-Mira: esta sonrisa! ¿Sacó los hierros?-Ya estaba en la hora.-¿Qué viniste a hacer, Microlax? ¡No es hora de comer!-Ya comí en la panadería. ¡Ahora vine a ver a Betty!-¿Qué? ¿No quieres nuestra comida? -dijó don Hermes, sorprendido.-¡Ahora no, pero puede guardarlo para después, doña Julia!Julia niega con la cabeza riendo. Con eso. Nicolás logra desviarse del tema, como quería Betty.-¡Me gustaron los dientes, pero pensé que la encontraría toda cambiada y hermosa!-¡Shiu!-¿Qué sabes de eso? –preguntó Hermes-¡Nada! Es solo una broma de Nicolás. ¡Vamos!Entonces Betty empuja a Nicolás para que se calle.-¡Mi padre no puede saber lo que te dije!-Pero yo ni lo vi, sigo pensando que es broma.-¡No lo es! ¡Pero sabes que no puedo revelarme o papá me matará!-Betty, cuéntame cómo fue en Cartagena durante el reinado?-¡Increíble!-Sabes que la prometida del cabezón vino aquí, ¿no?-Lo sé y por eso yo también estoy aquí y ella es su ex prometida.-¿Y és verdade lo que dijó la senorita Marcela Valencia, ¿estabas con él?Beatriz agacha la cabeza.-¡No me digas que es verdad! ¡No puedes haber caído en sus garras después de todo lo que él ha hecho com usted!-¡Me seguió hasta Cartagena, Nicolás! ¡Dejó todo aqui, incluso su família y incluso doña Marcela.-Betty... Betty...-¡Sé lo que estoy haciendo, Nicolás!-¡Oh, no lo sé, Betty! ¿Y si él decide volver con ella?-¡No va a suceder!-¿Y hoy ibas a la reunión de la empresa?-Sí. Y ni siquiera te lo imaginas.-¡Oh, Betty! ¡Cuenta!-¡No te diré nada, no quiso encontrarme!-¡Sabes que no fue para no encuentrar Patricia!-¡Yo no entendo como pude involucrarte con la peliteñida esa!-¡No hables así de ella! ¡No te gusta que diga nada de su cabezón!-Pero ¡mi cabezoncito és um hombre maravilloso!-¡Betty, Betty! ¡He visto esta película antes!-¡Las cosas han cambiado, Nicolás! Ahora me explicó todo, él fue hasta Cartagena y me pedio perdón.-¿Y crees que se quedará así? Aquí está rodeado de modelos y la novia, todas muy hermosas. ¿Cuánto tiempo crees que durará esta ilusión de un hombre rico que parece un galán de una telenovela mexicana enamorado por la muchacha del barrio pobre?-¡No lo sé, Nicolás y yo preferimos no pensar! Decidí ser feliz mientras dure. No puedo negarme a mí mismo. Mientras él me quiera, estaré aquí y cuando él no me quiera, dilo y listo.-¿Y crees que él te será fiel, porque me dijiste que él era muy mujerengo y infel a su prometida, la amiga de mi Patty.-Nunca le fue fiel a doña Marcela y ni siquiera espero que me sea fiel por tanto tiempo. Pero él sabe que el día que no me quiera más, solo tiene que irse. ¡No acepto compartirlo con nadie!-Mira, Betty, espero que funcione y no sufras.-Tambien espero. Pero no estás aquí solo para escuchar los chismes, ¿verdad? ¿Te lo dijeron los abogados?-¡El doctor Sanchéz no me dijó nada!-¡Entonces, espera, ¡te desmayarás cuando lo sepas!Nicolás no puede creer que no solo Betty sea la dueña de la empresa ahora, sino también la presidente."Absolutamente, por eso el cabezón está "asi de enamorado". Con la empresa em las manos de ella él hará lo que ella quiera, y ella segui siendo ilusa, pobre amigo mía!"- piensa Nicolás.-Y eso no es todo: te conseguí un trabajo. ¡Y no es solo un trabajo! ¡Será el vicepresidente Financero!-¿Qué?-¡Eso es lo que escuchaste! ¡Puede empezar mañana!-¡No lo creo, Betty!-Bueno, créeme, yo seguiré siendo tu jefa y ¡tienes que cumplir con el horario! Mañana iremos temprano al foro para firmar el acuerdo de no ejecutar el embargo y tomar el control de la empresa, pero todos los otros días debera llegar temprano.-Oh, Betty. De esa forma ¡voy a necesitar un anticipo para comprárme um coche!-Pero que no sea el último modelo de Mercedez.-¡No! Busco algo más modesto, algo usado.-Espero... Entonces vemos esto. Pero tenemos que dormir temprano, porque después tendremos mucho trabajo, tenemos que armar un plan de negocios eficiente para sacar a la empresa del pantano lo antes posible. No quiero ser la presidente por mucho tiempo. Cuanto antes yo devuelvala empresa a sus dueños, las famílias, mejor será para todos.

El lado "B" de BettyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora