Capítulo 86. Invasión de caminantes

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Viernes a la noche

"El apocalipsis", "El fin del mundo", "La devastación total", "El fin de los tiempos", estos eran uno de los tantos títulos que pasaban por la cabeza de Amelia Ledesma en este momento. Sentada en soledad en el sillón de su casa con un bate de beisbol de juguete en una mano y un vaso de refresco ligth con hielo en la otra, la morena dejaba que su mente vagara por los recuerdos

Recuerdos que aparecían a medida que la mirada de la deportista se posaba en el muro de fotos que su esposa se había encargado de construir como altar familiar y al que ahora Amelia observaba con intensidad

La primera foto que llamó su atención fue la de Beth y ella todas llenas de lodo entrando en el departamento de Luisita antes de que la rubia fuera su novia. ¿Cuánto tiempo había pasado desde aquel momento y quien iba a decir que justo cuando el mundo que Amelia conocía se estaba por acabar, esa foto iba a ser la que iniciara el conteo de los momentos pasados?

Beth había sido a la primera que habían agarrado, la primera a la que Amelia había visto sucumbir antes ellos, y a la cual se habían llevado sin ni siquiera darle tiempo para que Amelia le dijera cuanto la quería. Su cangurín había quedado en manos de una de las apestosas criaturas que amenazaban el mundo de Amelia y la morena no había podido hacer nada para evitarlo

La basquetbolista se paró del sillón de un fuerte impulso y aún con bate en mano, se acercó a la pared que sostenía cientos de retratos. Cuando llegó cerca del muro no pudo evitar poner sus ojos en la foto que mostraba el momento en el cual ella sostenía a sus dos mellizas al lado de una Luisita que había sido vencida por el sueño en la cama del hospital. La basquetbolista dejó el vaso de refresco en la mesita y con su mano libre acarició el retrato

No pudo dejar de reír ante los ojos bien cerrados de Emma que hacían juego con conducta pacífica y a su vez eran lo contrario a los ojos abiertos e hinchados por el llanto de su hermana melliza Apple. ¿Quién iba a decir que estas personalidades tan diferentes iban a ser las culpables de que Amelia perdiera a sus dos hijas? La morena agitó la cabeza tratando de sacarse esos pensamientos de la cabeza, no podía bajar los brazos ahora

La segunda foto que recorrió con sus manos fue la de ella corriendo tras una rubiecita desnuda por la calle del vecindario al que recién se habían mudado. A Lexi siempre le había gustado llamar la atención y sin lugar a duda, en ese momento, su pequeño lechucín había pensado que no había mejor forma de hacerse conocer por lo nuevos vecinos que salir a correr por las calles desnuda

– Mi valiente Lexi – decía Amelia acariciando el retrato – Te dije que no fueras hacia él, te dije que me dejaras a mí, que yo lo iba a manejar, que yo me iba a encargar de esa apestosa criatura inhumana, pero no – suspiró – No me hiciste caso, fuiste tras él y ahora… y ahora… - se llevó la mano a la cara tratando de evitar que sus lágrimas salieran – Y ahora te he perdido para siempre – dijo con las pocas fuerzas que le quedaban

Le dio la espalda a los retratos, no podía seguir mirando más. No podía, pero aún así tenía que hacerlo, tenía que despedirse de lo único que le quedaba y la unía con su familia. Volvió a mirar la pared de los recuerdos y se encontró de lleno con las enormes pestañas de Jules. Amelia no sabía cómo carajo había hecho su mujer para sacar esa foto, pero lo había hecho. Había retratado el rostro de su hija menor en modo conquista a la perfección y la deportista no pudo evitar sentirse orgullosa de haber sido ella la que había logrado esa perfecta mirada

Amelia se acordaba ese día como si hubiese sido ayer, ayer antes de que todo este enorme lio pasara. Ese día Amelia había discutido contra toda la armada Gómez durante casi un dia entero, tanto su mujer como sus hijas querían pasar las vacaciones en la casa de sus padres, pero no había forma de que después de todo lo que habían vivido el último verano en esa casa, la morena quisiera volver allí

Cuando, donde y como el amor quieraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora