"Las etapas del duelo:
5° Aceptación - Parte 2"Despertar de nuevo en su casa, con sus cosas, con su desorden, con su olor, con el sonido de los pasitos apresurados de su hermana por el pasillo era bastante agradable.
A quien engañamos, era la mejor maldita cosa que le había pasado en meses.
Abrió los ojos adormecidos, sentía su cuerpo pesado por el sueño pues ayer se había quedado hasta tarde hablado —discutiendo— con su queridísimo abuelo.
Con pereza se levanto de la cama y fue al baño de abajo, el cual era más pequeño que el que estaba arriba pero que por obvias razones detestaba usar.
Se lavo la cara y los dientes para luego tomar sus pastillas.
Guardo en la alacena del espejo el pequeño organizador que Natsuki le había regalado para no perderse en cuando tomar sus pastillas, este le decía el día y la hora para tomarlas, cosa que ayudaba mucho pues siempre se perdía a la hora de anotar esas cosas.
Salió tranquilo hasta la sala donde su hermana ya estaba en la mesa desayunando un tazón de cereales con leche.
— buenos días hermano, ¿Cómo dormiste? — pregunto tranquila.
— ¿desde cuando tan educada? — la molesto mientras sacudía su cabello y se iba a la cocina, no es que le molestase pero era raro ya que normalmente ella lo saludaba simplemente con un "hola"
— Hiroshi — ahí una de las razones de la discusión entre ellos.
Shoyo odiaba que él la obligara a ser tan... formal. No es que le molestará que sea una niña educada, él mismo le había dicho muchas veces que hay que ser respetuosos con los mayores o básicamente con cualquier persona, pero lo de su abuelo era excesivo, ¡tenía ocho años por el amor de Dios! no tenia porque estar hasta casi haciendo una reverencia cada vez que venia alguien.
— ¿va a venir Tobio en la tarde? — pregunto su hermana emocionada mientras movia sus pies en el aire, pues no llegaban al suelo por la altura.
— en la tarde no, viene a la noche a ver unas películas y luego vuelve a su casa — le responde mientras se sirve un vaso de jugo y saca unas galletas de agua de la alacena.
En el centro psiquiátrico lo acostumbraron a dejar el exceso de cafeína pues esta había contribuido en su insomnio y por ende, mal humor y depresión.
— ¿por qué no viene a la tarde? es domingo podría venir y pasar todo el día con nosotros — se quejo.
— es que yo estoy ocupado hoy Natsu.
La menor lo vio con el seño fruncido.
— ¿tienes cosas que hacer hoy? — pregunto confundida — es domingo Shoyo.
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One Day In September // ✨KageHina✨
أدب الهواةUn día puede cambiar tu vida en un instante, una sola cosa puede poner tu mundo de cabeza. Eso le paso Hinata Shoyo, un día cambio su vida completamente, dejándolo destrozado por dentro. El equipo del Karasuno se da cuenta de que hay algo diferente...