Lo Que Nunca Pensé

Capitulo 41

Capitulo 41

Julieta POV

El silencio nos rodeo mientras llegamos a mi casa. Yo no pronuncie palabra alguna, y el tampoco. De vez en cuando lo pillaba dirigirme miradas furtivas. Entonces recordé que Nicolás y el había retomado su amistad y me pregunte la razón de aquello.

De repente todo adquirió obviedad.

-Tú lo sabías, ¿No?

De reojo vi a  Michael tensarse, me miro con ojos suplicantes. Había estacionado su auto delante de mi casa. Así que mis rápidas deducciones eran verdaderas.

-Julieta…

-¡Lo sabías! –afirme, el trato de replicar pero yo seguí- ¿Cómo pudiste permitirlo? ¡Se supone que soy tu amiga!

-No pienses así, por favor,…

Antes de seguir escuchando su excusa abrí la puerta y baje. El enojo y la frustración hacia mella en mí. ¿Cómo Michael había permitido aquello?

Estaba enojada, y esto solo hacia aumentar mi enojo y mi indignación hacia Nicolás. Hacia su mentiras y hacia su supuesto amor.

-Espera –dijo el tomándome de los brazos impidiendo que siguiera- Déjame explicarte.

Me solté de su agarre y di un paso atrás.

-¿Qué vas a explicar?

Se paso la mano por el pelo.

-Yo no lo sabía –dijo- Me entere hace unos días. Créeme, fui a su casa para preguntarle qué es lo que quería contigo, que buscaba.

Apreté los labios.

-¿Por qué no me lo dijiste?

-El me lo pidió, me prometió que te lo contaría –soltó y se acerco unos pasos- Por eso no lo hice, por favor créeme.

Exhale un suspiro y dije derrotada:

-Ya no se qué creer o que pensar. Estoy cansada, solo quiero olvidar esto.

Me voltee, pero me impidió el paso.

-¿No estás enojada conmigo?

-Supongo que no. –el esbozo una sonrisa y me abrazo- Solo quiero estar sola, no quiero hablar con nadie.

El se apartó y me acaricio la mejilla y me dedicó una mirada triste.

-El te ama, July.

Apreté la mandíbula y trate con toda mi alma de ignorar aquel último comentario.

-Nos vemos luego, Michael –pase a su lado rumbo a mi casa- Gracias por traerme.

-Julieta…

Lo mire y negué con la cabeza. Al abrir la puerta me encontré con una escena que –definitivamente no esperaba ver- y que me hizo olvidar momentáneamente de todo lo que había pasado.

Me crucé de brazos y me prepare para hablar.

-Debo suponer que no es lo que parece ¿No?

Se separaron bruscamente ante mi voz, ambos abrieron los ojos como plato al verme, tenían los labios hinchados e iguales de rojos que sus mejillas.

-July….

-Marcos… –dije en el mismo tono de voz.

Camine sin quitar mi vista de los dos, me deje caer en el sofá individual, se miraron por un segundo y luego clavaron sus ojos en mi.