Lightning estaba acurrucado en su cama tratando de ver una película, pero honestamente, ni siquiera podía concentrarse.
Vestía una camisa 4 tallas mas grande que su ropa normal, la camisa pertenecía a su italiano, y como estaba impregnada de su perfume fresco y seductor, le reconfortaba tenerla cerca. Como compartían habitación, se le hizo muy fácil extraer la camisa del equipaje del italiano. Tal vez no se la devolvería.
Habían pasado casi 30 minutos desde que Leonardo había llamado a auto declararse Don comedias y le hubiera dado uno de los sustos de su vida; a propósito, tenía en su cabeza la nota mental de cobrarle esa bromita, que le provocó "reír" tan fuerte, que hizo Un tsunami en Bolivia.
- Pinche Pendejo >:v.- Lightning se llevó un puñado de palomitas acarameladas a la boca mientras veía Titanic. Siempre que se sentía frustrado o quería reírse la veía. Se reía de la perra rabia que le daba porque en efecto, Rose y Jack cabían perfectamente en la tabla, ahí si cuando se le tenía que subir encima, no se le subió.
En fin, no estaba concentrado tanto en la película, así que pudo escuchar perfectamente como la manija de la puerta era abierta, para luego dejar ver a un preocupado italiano vestido formalmente, al parecer habían ido al teatro, luego le preguntaría.
- Amore?.- El italiano vio que su Piccolo llevaba una de sus camisas, lo que le causó una ternura infinita, dándole unas ganas tremendas de comérselo a besos. Pero observó como Lightning corrió a sus brazos, abrazándose fuertemente de su torso, mientras temblaba.
- Tranquilo Amore, ya estoy aquí. Perdón por tardar, había mucho tráfico en Tokio. Mamma dejó a Leonardo sin postre por un mes, por haberte jugado esa broma tan pesada.- Francesco sonrió dulce acariciando las cabecita de su Piccolo, deleitándose con la suavidad de sus cabellos dorados.
- S-Sentí que el alma se me salió de cuerpo Fran. - dijo sollozando fuertemente. Lightning debía mostrar un perfil fuerte, de acero indestructible, frío y a veces cínico, debido a que su profesión se lo demandaba, pero en cuanto a cosas en la que no podía evitar quebrarse, simplemente lo dejaba fluir. Francesco solo lo atrajo un poco más a su cuerpo sin hacerle daño. Le dolió oír a su Piccolo llorar, y se prometió jamás hacerlo llorar.
- Piccolo, escucha. Estoy bien Amore. No me pasó nada, simplemente Leonardo es muy pesado. Se disculpará contigo como debe ser mañana. Por ahora, no pienses en eso. Nada me va a pasar, te lo prometo.- No, porque yo voy a protegerte, Pensó Lightning, calmándose un poco ante el tacto de su novio.
Ya unos minutos más tarde, en lo que decidieron recostarse ambos en la cama, Lightning pudo calmarse en los brazos de Francesco.
- Mejor Angelo mio?.- Lightning asintió despacio soltando un suspiro entrecortado por un hipido. Aún seguía abrazado al pecho del italiano. Lightning no quería romper el abrazo, pero se notaba que su novio estaba algo incómodo con la ropa que tenía puesta, seguía con su sacó de un Esmoquin y toda la pieza.
- Amor, deberías ir a cambiarte, se que no estás cómodo así.- Dijo Lightning sobando el fornido torso de su italiano.
- estás seguro Piccolo?.
- Si, ve a bañarte. Debes estar bastante acalorado.- Lightning levantó su torso para luego plantar un sensual y lento beso en los labios de Francesco, quien tomó su cadera apretando un poco, sacándole un suspiro de Satisfacción al americano. Lightning sabía que si seguía con el beso, ninguno de los dos podría contenerse, Así que optó por separarse antes de sentir la mano de Francesco decender por su bien dotado y pomposo trasero.
- B-ien Piccolo, no me tardo.- Francesco finalizó la frase dando un ultimo beso y dar una pequeña nalgada en el trasero americano, antes de pararse de la cama y dirigirse al baño. Lightning mordió su labio inferior con una sonrisa, antes de respirar un poco mejor. Y entonces lo decidió, debía decirle a Francesco que ejercía otra profesión aparte de las carreras. Aunque quería decírselo en ese mismo instante, primero debía consultarlo con su jefe, que por cierto, no había visto su cara, ya que Finn se encargaba de darle los informes personalmente acerca como iban las misiones.
Unos minutos después, por estar pensando en todo lo que quería hablar, no se dio cuenta de que el italiano había salido del baño,solo con una toalla rodeando su cintura dejando ver su abdomen, brazos y pectorales marcados y bien trabajados, y con otra toalla secando su cabello, Estaba contestando su teléfono, así que no notó cuando Lightning se quedó comiéndoselo con la mirada.
- Lo siento Amore, era mi madre, quería saber como estabas. Leonardo también estaba preocupado.- Dijo Francesco yendo directamente a la parte del vestidor a lado de la cama, para ponerse una camisa sin mangas ajustada, y un pantalón suelto de color gris.
- No hay problema, cielo. Pero que no lo vuelva a hacer, de verdad me asustó.- Francesco sonrió para luego acostarse al lado de Lightning, quien trepó a su torso para acostarse nuevamente en el.
3 Horas después
Habían decidido ver otra película, Francesco al haber llegado no hace mucho, y al haber estado todo el día con su familia, llegó realmente cansado, por lo que calló dormido antes del final de la película. Lightning sonrió acomodándose mejor para poder dormir mejor, Pero fue interrumpido por una llamada a su comunicador de cinturón. Bufó un poco molesto y se retiró haciendo el menor ruido posible, para ir hacía su maleta y sacar el aparato camuflado como un frasco de pastillas para la diarrea, sip, iba a cobrárselas a su personal de equipamiento espía por ese detalle.
- Hola?
- Lightning?, tenemos un problema.
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- Y como esta la pequeña Audrey?.- Preguntó Isabel acariciando la pancita de Mate.
-Esta bien, y a pesar de que aun es muy pequeña, se nota que será bastante inquieta, a veces puedo sentirla moverse bastante, apenas hace 1 semana que nos dieron la noticia de que será niña.- Dijo Mate sonriendo.
- muchas felicidades. Ya... ya se lo contaste a Lightning?.- preguntó Isabel, Mate enseguida borró su sonrisa.
- No... Y me siento mal por eso, le prometí que sería el primero en saberlo. Al igual que esto,no me siento bien ocultándole tantas cosas a mi mejor amigo.- Finn, quien estaba hablando con Richard se quedó en silencio mirando a Mate, tampoco se sentía bien ocultándole algo tan delicado a McQueen.
- Se... Se que es algo difícil, tampoco me siento cómoda ocultandole a mis hijos que seguimos vivos, sobre todo a Lightning. Nos habíamos asociado a la agencia de seguridad nacional desde mucho antes de casarnos, de hecho, ahí nos conocimos Richard y yo. Pero sabíamos que en cualquier momento Axellrold Hiba a volver a atacar, necesitabamos tiempo para atraparlo, y era posible que descubriera que teníamos una familia, iban a Ir por Lightning, Duster y Cruz, y luego de que Zackary murió no nos podíamos permitir perder al resto de nuestros hijos. No tuvimos más opción que fingir nuestra muerte para "dejarles el campo libre". Me duele que Piensen que seguimos Muertos, pero no deben enterarse hasta que no hallan monos en la costa y este nuevo problema se resuelva. Solo que no planeabamos que Lightning sintiera curiosidad por esta profesión.- dijo Isabel con las manos en su cintura.
- Ahora solo nos queda protegerlo. Visitamos a Hudson Hornet antes de su deceso. Nos hizo prometer que lo protegeríamos A toda costa.- dijo Richard con un suspiro.
- tengo entendido que habían conocido a Doc, pero... De dónde lo conocen?.- preguntó Mate.
- Doc... Era mi padre... Obtuve el apellido McQueen por mi padre adoptivo luego de que se casara con mi madre. Que Lightning encontrara Radiador Springs fue obra del destino, una gran conciencia.- terminó diciendo Richard dejando Mate y a Finn en Shock.
- Si se entera de que estamos vivos, se distraerá en... Odiarnos por el dolor que sintió cuando nos fuimos. Nos dolió ser fríos con nuestros hijos, pero aminoraria el dolor que íbamos a sentir al dejarlos para que no les hicieran daño. Lightning tiene que enterarse... Pero no ahora.- terminó de decir Isabel con lágrimas en los ojos. Nadie abrió la boca, hasta que el teléfono de Finn empezó a sonar. Era Holley.
- Que pasa Holley?.- contestó Finn
- El halcón más explosivos es igual a que las vías del tren del puente Shiodome terminará en desastre.- Dijo Holley.
- alguien va en camino?.- preguntó Isabel.
- se le notificó a un agente. Es Lightning, ya va para allá.
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En inglés e Italiano(Lightnesco)
FanfictionLightning McQueen, uno de los mejores corredores de la historia, no solo porque fue entrenado por el mismísimo Hudson Hornet, sino también porque sabe cómo hacer morder el polvo a sus contrincantes. Pero este simpático Rubio americano de 22 años y o...