— Al fin despiertas. —lo observó beber de su whisky— Dime qué mierda te pasó.
Suspiró, estaba jodidamente cansado para interrogatorios.
— Me desmayé en ese lugar, ¿no te lo dijeron ya? —Respondió molesto.
— Por supuesto que me dijeron. —se acercó— Lo que no entiendo es qué carajos hacías ahí.
— Salí a caminar. —explicó— ¿Acaso no puedo salir a caminar?
— Si te vas a desmayar en pleno boulevard, no. —escupió— El doctor dijo que pudiste haber muerto de hipotermia, ¿estás idiota o algo?
— Seguro, soy el idiota que sale a caminar con un brillante plan para desmayarse sobre la nieve.
— ¿Te duele algo? —Lo miró preocupado.
— Nada importante. —suspiró— ¿Por qué me siento bien?
El otro lo miró aterrado, sabía a dónde se dirigía esa conversación.
— Me diste drogas. —Soltó furioso.
— Mark, fue sólo un poco, estabas realmente mal. —Se excusó.
— ¡Fue mi maldita decisión dejar esa mierda, Jaehyun! —lo llamó por su verdadero nombre— No tenías el maldito derecho.
El mayor bajó la mirada, Mark jamás le había llamado por su verdadero nombre.
— El médico dijo que la forma en que intentas deshacerte de tu adicción podría matarte. —confesó— ¿Qué querías que hiciera?
— No lo sé, quizás esperar a que despertara y pedirme mi opinión. —Soltó sarcástico.
— Estabas teniendo un colapso nervioso, y un paro cardiorrespiratorio. —habló serio— No me opongo a que quieras dejar las drogas, Mark, me opongo a la manera en que quieres hacerlo.
— A ti qué te importa.
— Eres como mi hijo, Mark. —admitió— Y estás imbécil si crees que voy a dejar que te mates de ese modo.
— ¿Qué sugieres que haga? —Cuestionó con la vista aguada.
— Que dejes de actuar como pendejo. —lo abrazó— Y que me dejes ayudarte, puedes hacerlo, pero esta no es la forma.
— Quiero morir, Jaehyun. —Admitió en voz alta.
El mayor se quedó congelado.
— En verdad quiero morir. —lloró— Jamás he estado realmente vivo, pero quiero morir, no quiero estar aquí, no quiero sentirme así, no quiero pensar estas cosas que pienso todo el maldito tiempo. —apretó los puños sobre el saco del otro— No quiero despertar y tener como desayuno una inyección en el brazo, no quiero beber más alcohol que agua, no quiero seguir así, ya no.
— No tienes porque seguir de ese modo, Mark. —habló por fin— Me encargaré de que todo cambie para ti.
— ¿Cómo, Jaehyun? Porque ni yo me lo imagino.
— En primer lugar, vas a dejar esta casa.
Mark se congeló, jamás hubiera esperado esa respuesta.
— Voy a conseguir un doctor que te ayude, uno bueno. —continuó—Y vas a dejar este modo de vida, saldrás y harás amigos, te conseguirás una novia o un novio, lo que prefieras. —acarició los cabellos del menor— Puedes hacerlo, Mark, déjame ayudarte.
— ¿Qué harás si digo que no? —Cuestionó con la mirada perdida.
— Te lo reprocharé el resto de mis días, Mark. —admitió— No puedo dejarte ir sin saber que lo intentaste al menos.
Mark lloró aún más fuerte, las palabras de su mayor lo habían conmovido.
— Puedo intentar. —habló cuando estuvo más calmado— Pero no voy a prometer nada.
— No tienes que hacerlo, al menos no a mí. —sonrió— Haz esto por ti, Mark.
— No haría una mierda por mí, Jaehyun. —Suspiró.
— Entonces ve y encuentra alguien por quien hacerlo. —dijo— Pero ten en cuenta que, estarás obligado a lograrlo.
— ¿Por qué? —Lo miró atento.
— Porque para que tú hagas algo por alguien, tendrías que amar a esa persona. —explicó— Luego, esta persona también te amaría, porque podrás ser difícil de entender, pero eres fácil de querer. —admitió— Entonces se amarán, y una vez que tienes a alguien que te espera, estás obligado a hacer las cosas.
Mark comprendió la severidad de sus palabras, y sintió miedo.
— No estoy seguro de poder hacer eso. —Bajó la mirada.
— Entonces tendrás que hacerlo por ti. —elevó los hombros— Tienes sólo dos opciones, Mark, tienes que elegir.
— Supongo que encontraré a alguien que valga la pena. —Suspiró.
Mark soltó esas palabras sin entender el peso que tenían.
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De palabras y versos | nct dream
FanficPara todos aquellos que saborean la tristeza por primera vez. Para quienes se sienten solos rodeados de una multitud. Para los que sufren su primer pérdida. Para aquellos que dicen haberlo perdido todo. Para quienes por primera ocasión vomitan e...