II-FIRST DAY

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Me levanté con las energías renovadas. Lo único que faltaba era que los pajaritos sonaran y que mi hermano no fuera tan molesto.

- ¡SORAAAA!¡TENEMOS QUE IR A LA EMPRESA!¡LEVÁNTATE VAGA!-eso era amor de hermanos.

Mi hermano y yo, a pesar de llevarnos prácticamente diez años de diferencia, nos comprendíamos como nadie. No éramos hermanos mellizos, pero podíamos adivinar lo que estaba en la mente del otro con tan solo una mirada, y también teníamos aquellas conversaciones con tan solo expresiones faciales que solían tener los gemelos o mellizos.

Teníamos una especie de relación amor-odio muy intensa. Había momentos en los que nos amábamos y nos queríamos incondicionalmente, y otros en los que Seokjin se rebajaba al nivel de una niña de catorce años para discutir por tonterías.

- ¡YA VOY!

Me incorporé y me estiré antes de salir de la cama. Me cambié y me puse ropa de deporte. Unos pantalones holgados negros, un top negro de Nike, unas zapatillas y una chaqueta gris holgada grande de las que me gustaban junto a una bolso con ropa de cambio, botella de agua y toalla.

El día anterior me habían avisado de que tras firmar el contrato comenzaría inmediatamente con el entrenamiento, así que tenía que ir preparada para sudar como un pollo.

Bajé al salón, desayuné, me lavé los dientes, y luego salí con mi hermano hacia la empresa. Mi hermano vivía con sus compañeros de grupo, pero aquel día había ido para llevarme a mi primer día. A pesar de tener 14 años, vivía sola en una casa bajo la supervisión de mi nana que iba todos los días a cocinar y a limpiar porque mis padres trabajaban y mi otro hermano mayor vivía fuera del país.

Bajé del coche ansiosa por entrar. Entramos los dos juntos, él con su cubrebocas y yo con mi gorra de New Era negra y nos acercamos a la recepción.

- Buenos días.

- Buenos días.

- Soy Kim Sora. Tengo una cita con el señor Bang.

- Cuarto piso al fondo. Hay un cartel en la puerta.

- Muchas gracias.

Subimos al ascensor mientras nos pellizcábamos en silencio para picarnos mutuamente. Era divertido como el otro ponía cara de fastidio.

- Buenos días.

- Buenos días chicos. Sentaos.-un sonriente CEO nos recibió en su despacho.-Me alegro de que hayan venido.

Después de revisar que todo estuviera en orden con el contrato, mi hermano me dio una vuelta por las instalaciones de Big Hit. La primera planta era la recepción y la cafetería junto a la zona de descanso. La segunda y la tercera planta eran de entrenamiento. Ahí estaban las salas de práctica, los estudios de grabación y los vestuarios. Las dos últimas plantas estaban dedicadas a la administración, dirección y marketing de la empresa.

Tan solo el hecho de pensar que hacía cinco años aquella empresa estaba a punto de bancarrota...

Cuando mi hermano se paró frente a una puerta en la que ponía "Sala 1" le miré con curiosidad.

- ¿Qué hacemos aquí?

- Voy a presentarte a mis compañeros.-no me dio tiempo a mentalizarme cuando abrió la puerta llamando la atención de siete personas en la habitación.-Hey.-saludó con toda la confianza del mundo. Buenos días señor Son.-dijo entrando como divo que era y saludando a sus compañeros. 

- Buenos días.-cuando mi voz se hizo presente seis pares de ojos me miraron con curiosidad y otro con reconocimiento.

- ¿Quién eres?

𝑇𝐻𝐸 𝑁𝐸𝑊 𝐼𝐷𝑂𝐿☆(ᴱᴺᴴʸᴾᴱᴺ𝐼-𝐿𝐴𝑁𝐷)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora