–del juicio. –dije sin dar vueltas sentándome en la silla enfrentada a la de él.–¿que juicio? –preguntó haciéndose el desentendido
–sabes de que juicio hablo, Harry.
Harry suspiró pesadamente y pasó su mano por su cara.
–¿por qué? –pregunté.
–¿aun lo defiendes a pesar de todo lo que sufriste por él y todo lo que te hizo?–dijo ignorando mí pregunta.
La respuesta era un claro sí, pero... ¿lo haría en serio? realmente había sufrido y a pesar de que lo amaba y que era él, lo más probable es que nunca hubiese hecho algo igual por alguna otra persona que me haya hecho sufrir como él.
–no respondiste mí pregunta.
–tú tampoco.
–yo pregunté primero. –dije como si el orden me diera más poder.
–responde primero, si siempre te gustó ser la número uno.
–ese eres tú, pero claro, los celos de nunca haberme ganado...
–cállate. –dijo interrumpiendome. –¿quieres saber por qué lo hice? ¿¡quieres saberlo!?–gritó poniéndose de pie. –lo hice por ti.
reí. ¿por mí? ¿a caso dijo por mí? mí hermano me sorprende cada vez más.
–no lo puedo creer. –confesé–¿por mí?
–sí, hace unos años comencé a plantearme la idea una vez que toda mí vida volvía a estar en orden, pero no lo había hecho porque no sabía nada sobre Malfoy. Supuse que se había alejado, pero cuando me enteré que el había vuelto y que su hijo era compañero de Albus, no lo dudé dos veces y retomé el caso.–explicó Harry – Costó, pero después de unos meses logré volver a abrir el caso y está vez será para dejar a Malfoy dentro de Azkaban.
–No lo harás. Cerras de vuelta el caso y te olvidarás de todo esto.
–¿estás loca? Malfoy fue y es peligroso
–¡Nunca lo fue! –grité golpeando con mis manos la mesa. –nunca lo fue y lo sabes, Harry Potter. –lo apunté con mí dedo índice y apreté mí puño controlando mis ganas de golpearle la cara por cada estupidez que dice cada vez que abre la boca.
–Definitivamente estás loca, hermanita.
no me pude aguantar más, abrí mí puño, tomé el lapicero más cercano y se lo tiré directo a la cabeza. Los lápices salieron volando por todas partes, mientras que le lapicero golpeaba el lado derecho de la cara de Harry.
–¡Primeramente, no me llames loca y segundo, cerras ese puto caso de una puta vez por todas y perdonarás psicológicamente a Draco, porque, sí, puede que él se haya burlado de ti infinitas de veces en la escuela, pero tú también lo hiciste además de que ya han pasado 20 años! ¡Supera Potter! También, ¿no has pensado en el hecho que Albus al fin hace amigos y a pesar de su apellido, al final es amigo de Albus y lo quiere? Te aseguro que a Draco tampoco le agradó la idea de que el mejor amigo de su hijo sea tu hijo, pero lo aceptó y respetó, deberías hacer lo mismo además de dejar de pensar en ti y tu puta imagen y reputación. A la mierda todo eso.
–¡¿por qué te importa tanto Malfoy si te destruyó emocionalmente ?!
–¡Porque lo amo y no quiero volver a perderlo! –grité en su cara, dejándolo atónito–. No haces esto por mí, lo haces por ti, por ese resentimiento que tienes de cuando íbamos a la escuela y aprovechas el hecho de ahora tener más "poder" –dije dibujando con mis dedos en el aire la comillas– y lo usas contra él. Acéptalo.
–te equivocas. en ambas cosas. Yo no tengo resentimiento hacia Malfoy y tu no lo amas, solo sigues con la imagen de ese chico que te dibujó, pero yo lo conozco, él no es como tú dices.
–¿en serio dices saber más tú de él que yo? –reí–no lo puedo creer –repetí.
Harry quedó callado por unos segundos, hasta que decidí volver a hablar.
–Cerrarás el juicio, te olvidarás de todo lo que Draco te pudo haber hecho y lo dejaras en paz, como a mí.
–¿dejarte en paz? ¿te molesto?
–Sí, lo haces. Cada vez que quieres acercarte o ayudarme me molestas porque no mejoras ni ayudas en mí vida, solo la empeoras.
Harry abrió su boca para protestar, pero no hizo nada. Lo miré directo a los ojos y noté como se habían cristalizado.
– Harry yo te admiro, como eres y lo que hiciste, pero no te metas en mí vida como yo no me meto en la tuya. Eres una buena persona y a pesar de que muchas veces me quieres ayudar a mí o a alguien más, te conviertes en un estorbo o una carga más. Basta. Disfruta de tus hijos y de tu esposa, de tus amigos y todo esa mierda, pero olvídate de mí por un rato. volveré, pero no intentes de ayudarme, porque más ganas de alejarme me darán. Adiós. –dije tomando mí bolsa y mí abrigo de vuelta.
Caminé hacia la puerta del estudio de Harry, pero antes de salir me volteé y volvía enfrentarme a mí hermano que comenzaba a dejar caer algunas lágrimas.
–Harry –lo llame y sus ojos rojos miraron a los míos –deja el juicio. Te quiero.
Y con eso último, salí . Caminé por el pasillo y al llegar de vuelta a la sala de estar, me encontré con Ginny. Le di un abrazo y besé su mejilla. sin decir más, salí por la puerta de la casa y me puse mí abrigo.
Mí casa quedaba a una hora de viaje caminando por lo que decidí tomarme el autobús Muggle.
Entré a mí casa y cerré la puerta por detrás. Tiré las llaves a un costado y me quité el saco, dejando mí bolsa en el perchero de la entrada y luego, fui a mí dormitorio. Allí, me cambié con mí pijama y me recosté en la cama, el perfume de Draco recibiendome. Tomé el libro de mí mesa de noche y continué mí lectura hasta el punto de que mis ojos ardían de sueño y mí cuerpo no se podía mover. Dejé mí libro a un lado y caí en un sueño profundo.
*****
No olviden votar!!
L@s Amo<3

ESTÁS LEYENDO
como aquellos de 1995 || Draco Malfoy
FanfictionLa historia transcurre 20 años después de la Segunda Guerra Mágica. Annette Potter, hermana de Harry Potter, aunque lo único de parecido que tienen es el apellido, es la nueva profesora de Defensas Contra las Artes Oscuras y Hogwarts por fin consigu...