La única salida es amar al villano

Capítulo 12 El Cuervo (2)

Raven dio un paso y todo a su alrededor se oscureció.

En ese mismo instante su cabeza se despejó por completo. Trató de mirar desesperadamente a todas partes, pero lo único que había era oscuridad. Las tinieblas eran tan profundas que no importaba si tenía los ojos abiertos o cerrados, no había diferencia alguna.

El chico se quedó congelado en la misma posición, tuvo miedo de comenzar a caminar y ya no poder volver. 

Sentía cosas moviéndose a su alrededor, podía escuchar el sonido que hacían al arrastrarse por el suelo.

— ¡AH!

Se sorprendió cuando sintió algo viscoso rozar una de sus piernas. 

Entonces los murmullos empezaron a escucharse lejanamente. Mientras más se esforzaba por no prestarles atención más podía escucharlos.

— No, no, no...

El niño puso sus manos sobre sus oídos y se agachó mientras cerraba los ojos con fuerza.

Abrió los ojos cuando los susurros se detuvieron. Todo a su alrededor había cambiado.

A pesar de que aún estaba envuelto en oscuridad, podía distinguir la forma de un bosque y un camino que lo atravesaba. La suave briza meció su cabello tan negro como la noche mientras observaba la figura de los árboles balanceándose.

— Ven...

— ¿¡Eh!?

Raven abrió los ojos como platos cuando escuchó la misma voz que lo despertaba de sus alucinaciones y un escalofrío profundo recorrió su cuerpo cuando sintió una pesada mano empujándolo hacia adelante. Miro rápidamente hacia atrás, pero no encontró nada más que oscuridad.

— Vamos, no me hagas esperar.

La voz parecía amable y ansiosa.

Raven tragó fuerte y comenzó a mover sus pies que parecían haberse transformado en sacos de papa.

Cada vez que daba un paso, comenzaba a sentir los ruidos reales de un bosque entremezclados con cuchicheos y murmullos, como si, escondidos entre los arbustos, hubiese personas mirándolo y hablando por aquí y por allá.

'Crow crow'

Dio un salto cuando un cuervo pasó volando sobre su cabeza. Se quedó un rato mirando como el ave se posaba sobre una rama y dejaba una cosa brillante colgando entre sus hojas.

— ¿Qué es eso?

A Raven le llamó la atención el objeto reluciente que pendía sobre la rama del árbol y corrió hacia él. Cuando estuvo lo suficientemente cerca pudo ver que se trataba de un hermoso collar que tenía un dije con forma de reloj de arena.

— ¿Eh? ¿Qué es?

El chico miró extrañado la alhaja que relucía aún más fuerte rodeada de oscuridad.