La única salida es amar al villano

Capítulo 53 Central de Información.

El animo de Caster estaba por los suelos.

Hace una semana que había vuelto de la academia por el periodo de recolección. Se había sentido agradecido de ser el príncipe heredero y no tener que emprender un viaje por todas partes buscando personas que llevar para el ingreso del próximo año.

Llevaba semanas haciendo planes para salir con la chica de los Raphelle, pero todo se volvió confuso después de la muerte de los Duques Green. Por supuesto, él recordaba, gracias al tiempo que paso con Thomas, que los niños del ducado eran muy cercanos a Charlotte, pero no imagino que lo fueran tanto como para que ella se quedara en el castillo de los difuntos durante todo ese tiempo.

Su preocupación empeoró luego de que le llegaran los rumores del supuesto ataque que había sufrido la niña. Quería usar aquello como excusa para visitarla y estrechar los lazos con quien estaba seguro, sería su futura prometida.

Las cosas cambiaron cuando arribo al palacio estelar, lugar destinado como su vivienda, y sus sirvientes le informaron que la residencia del emperador estaba hecha un lío debido a las preparaciones para la pronta visita del futuro Duque Green.

"¿Él vendrá?"

Una siniestra sonrisa se dibujó en su rostro cuando los empleados terminaron su informe sobre el joven.

Uno de los sirvientes le comento que habían enviado muestras desde el ducado después de que extrajeran algo del cuerpo de la niña de los Raphelle.

Caster que estaba a punto de abandonar el sitio, se detuvo en seco.

— ¿Dónde?

— En la oficina de investigación, mi señor.

— Diles que preparen un carruaje.

Media hora después llegó a las puertas de la Central de Investigación Imperial.

Un sirviente que usaba una gabardina azul marino lo recibió con una profunda reverencia y lo guio a la oficina del General Loan, oficial de mayor rango encargado de administrar la sección de investigación policial.

Un hombre canoso que vestía un uniforme militar lleno de medallas lo saludo desde el otro lado de un largo escritorio de caoba cuando entro a la habitación y le pidió que tomara asiento.

Caster hizo un movimiento de su mano y le indicó a los sirvientes que lo esperaran fuera del cuarto.

Esperó a que todos hubieran salido antes de tomar asiento frente a Loan.

— General, supe que trajeron pruebas del incidente con los Raphelle.

El hombre lo miro evaluando que contestar por un momento.

— Lamento decir que el asunto es catalogado como alto secreto, su majestad.

— Bueno, no soy un ciudadano normal del imperio...

El joven príncipe hizo rodar una bolsa llena de monedas de oro por la superficie de madera.

— Entonces, me preguntaba, ¿qué podrías decirme sobre lo que le ocurrió a mi prometida?

Loan que se encontraba admirando las monedas dentro de la bolsa se detuvo para mirar el rostro del príncipe.