Diarios De La Realeza (Saga de La Luna #1)

CAPITULO 19

— Lo siento mucho, Cassian— me disculpé. El solo sonrió de medio lado.

— Sigues igual de distraída al igual que la antigua reina— rio.

— Hay algunas cosas que se quedaron con la reencarnación, al parecer— digo para alivianar un poco el ambiente ya que me siento incomoda. Lo miré detenidamente, muy alto, pelinegro, tes ni muy clara ni muy oscura y unos ojos de un marrón muy claro, casi de color miel.

"¿por qué siento que lo he visto en otra parte además de los recuerdos?"

— Eres graciosa, Lorelay Gray— rió y siguió su camino a su cuarto.

"en persona no se ven tan idiota como en los recuerdos"

"¿pero en donde lo he visto antes, su apellido se me hace muy familiar? Los demás también se me hacen familiares"

— ¿En qué piensas? —la voz de Charlotte me saca de mis pensamientos.

— En cosas, muchas cosas.

— Sé que de cierta manera nos conocemos, pero también somos unas desconocidas, quiero presentarme, soy Charlotte Mason y soy de Clunen— me extendió su mano. La observé bien, ojos marrones, cabello castaño corto con algunos reflejos rubios, tes clara, traía puesto unos zapatos de tacón marrones, una falda del mismo color y una camisa color mostaza.

— Lorelay Gray y soy de Rayen— le extendí mi mano de la misma manera.

El resto del día hasta la tarde pasó de lo más normal, junto con el resto de las chicas nos conocimos mejor, según nosotras, seguimos siendo iguales a nuestras antepasadas, claro con algún que otro cambio en los gustos, pero eso es lo de menos.

— ¿Ya tienes tu ropa de invierno, Lorelay? —me pregunta Dayana sentada en uno de los sofás individuales de la sala común. Hace más de media hora que estamos ahí conversando.

— No, aun no la compro, pero Rose dejó en mi armario unos cuantos abrigos.

— Eres una chica de isla, además de que Rayen incluyendo a Raken y Siren, son los únicos estados donde no nieva o hace una mínima de frio, tienes que tener cuidado.

— Está bien, gracias por la información.

— Bueno chicas, es hora de cambiar de tema— comenta Jenna— el tema que hemos estado evitando desde que nos sentamos a hablar en esta sala, los hombres.

— Aaah— todas suspiramos pesadamente ante lo que Jenna dijo.

— Estamos muy claras que nuestras antepasadas tuvieron sus historias con esos hombres, pero tampoco estamos obligadas a estar con ellos incluso si por nuestros recuerdos nos sintamos atraídas— Kendall explica— de todas maneras, no debemos sentirnos celosas si es que alguno ya tiene novia o se sienta atraído por otra de nosotras —todas asentimos.

— ¿Qué hay de ti Lore? — me mira Jane.

— La historia de los reyes Cassian y Lorelay se la conocen todos "del odio al amor, un amor real eterno"— dijo como si fuera un título de telenovela.

— Bueno, en estos momentos estoy confundida por los recuerdos y eso, el Cassian de mis recuerdos de un momento a otro deja de ser idiota a ser todo un caballero, ya no se ni en que pensar— estaba a punto de seguir hablando hasta que apareció Rose.

— Majestades, Cain solicita de su presencia.

Nos pusimos de pie y todas nos dirigimos hacia la oficina/habitación de Cain.

— ¿Nos llamaste? —dijimos al entrar.

— Sí, quiero entregarles esto— sacó de su escritorio 7 cajas cuadradas de color negro, no las entregó a cada una y las abrimos.