DETRÁS DE ESA SONRISA -Libro 2-

ＣＡＰÍＴＵＬＯ|５０

DONOVAN

-¿Qué es esto? -pregunté un poco exaltado.

El rostro de Morfeo se mostraba ligeramente preocupado, como si supiera que la había cagado en grande y después de hacer una mueca de resignación y sacar un fuerte suspiro volteó hacía un lado señalando una salida de emergencia donde lo seguí.

Cuando estuvimos solos volvió a suspirar pero no dijo nada, tan solo miraba la carta de laboratorio que yo sostenía con fuerza.

-¿Qué mierda es esto? -insistí.

-Donovan, yo no creo que...

-No me hagas perder la puta paciencia amigo. La última vez que nos vimos me quedé con muchas ganas de pegarle a esa cara bonita.

-Por favor señor perfecto, como si yo te tuviera miedo. Ahora dame eso, no es tuyo.

-Ni tuyo.

Noté a Morfeo tensar la mandíbula y se podía apreciar con facilidad que a él tampoco le faltaban ganas de romperme la cara.

-Ya pues..., entonces dale la vuelta míralo por ti mismo.

Mis ojos feroces pasaron de su rostro a la carta de laboratorio, era del mismo hospital donde yo estuve la última vez.

Kin Novelli

"Análisis por prueba de embarazo"

Centro médico...

Deje de respirar y sentí como si mi alma rebotara de un lado a otro en mi interior..., Kin ¿Estaba esperando un niño?

Ni siquiera me dio tiempo a disimular el impacto de la noticia y busqué respuestas en el rostro de Morfeo que me miraba sin alguna clase de sentimiento.

-Un... ¿un niño?

Morfeo miró al techo y frunció los labios. No iba a decir nada y era obvio que le tendría toda esa fidelidad a Kin antes que a nadie más.

-Perfecto, sí esa es tu respuesta...

Me apresure a romper el sobre para abrirlo pero el idiota ése intento arrancar de mis manos aunque alcancé a esquivarlo a la vez que leía por la superficie los resultados.

-Positivo -salió de ni boca con voz baja pero no la suficiente para que él pudiera escuchar-, ...trece semanas.

-Mierda... -susurró Morfeo a mis espaldas. Volteé a verlo y se notaba bastante preocupado.

¿A caso ello dos...? ¿A eso se refería su mensaje de esa mañana?

«¿Ya se lo dijiste a Donovan? No lo hagas sin que yo esté ahí, ya no podemos ocultárselo más.»

Me abalancé a Morfeo y lo tomé con fuerza del cuello de la camisa.

-¿Por eso viniste a buscarla? Ese mensaje de mierda que le mandaste en la mañana ¿Es por todo esto?

-Tú... ¿Lo viste?

-¡Si! Lo vi y ahora entiendo todo. Kin está esperando un hijo tuyo. Pero yo la amó y voy a luchar por...

-¡¿Qué?! -Morfeo se exaltó de tal forma-. Sí que eres un cabezota.

No me lo esperaba, pero hizo lo impensable y me soltó tremendo puñetazo en el rostro que me tiró al suelo.

-¡¿Qué mierda significa eso?!

-Acabas de leerlo ¿No te das cuenta? Yo no he estado con Kin ni hace trece semanas ni nunca.

«¿Trece semanas?» pensé y comencé a hacer cuentas mentales. Casi tres meses.

Hacía tres meses Kin y yo estuvimos en ese hotel, con esa cena siendo la señora y el señor Chalamet y lo que paso después en nuestra habitación de "recién casados"...