Hasta que mis cicatrices sangren oro.

Capítulo 14 "Keops"

Alissa

Las dos mujeres han hecho maravillas.

No suelo usar maquillaje y arreglarme mucho, pues me gusta como soy al natural. Pero debo admitir que me gusta lo que han hecho.

-Has quedado divina, el señor Keops te elogiará demasiado.

-Definitivamente, el ADN de la realeza es notorio en ti, ¡eres preciosa!

- ¿El ADN de la realeza? -Pregunto desconcertada.

-Ahh...

Tocan la puerta.

-Esperan a la joven Alissa en el comedor.

- ¡Vaya! Ya debes que ir. Nosotros te esperaremos aquí siempre que nos necesites.

¿Me esperarán?

Ilusas.

Mi papá seguramente tiene algo en mente y me sacará de aquí.

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Sigo a uno de los hombres que custodiaban la puerta de mi habitación.

Ya no hay nadie encapuchado y puedo verle los rostros a cada uno de los hombres.

Al llegar al comedor, divisó a mi padre y a mi madre sentados juntos. También noto la presencia del hombre que hace unas horas me recibió cuando desperté.

Seguro debe ser Keops. Me permito detallarlo mejor, tiene los ojos azules, el pelo negro y barba muy bien afeitada. Porta un traje sin corbata y a su lado, Kereem quién en el fondo, me resulta familiar.

-Alissa, ¡qué guapa! -Me halaga mi secuestrador. - Pero si tienes todo el porte de una señorita de la familia, vamos siéntate.

Me acerca la silla y tomó asiento frente a mis padres. Puedo detallar que ambos lucen cansados y preocupados.

-Buenas noches, un gusto para mí acompañarlos. -Se levanta, hace una reverencia y procede a sentarse a mi lado.

-Bueno, no me he presentado. Soy Keops Dimou, mi hijo Kerem Dimou.-Se dirige a mi.

-Un gusto. -Contesta Kerem.

-Ahora, creo que me gustaría que comenzarán a contarle a Alissa. Ella merece saber la verdad y no estamos en condición de perder tiempo.

- ¿Qué verdad?

No estoy entendiendo nada, la mirada de papá está vacía, no me transmite nada. Y eso solamente significa una cosa.

Keops tiene razón y me ocultan algo.

-Alissa, antes de todo... no queremos que juzgues nuestras decisiones. Siempre hemos tratado de hacer lo mejor para ti.

-Como lo menciona tu madre, siempre hemos visto por tú biene...

-Al grano por favor-Contesto.

-Tan determinada como su padre. Me gusta. - Keops me muestra una sonrisa ladina y bebé de su trago.

-Yo lo haré. -Mi madre centra su atención en mi padre y luego en mí.

-Alissa, todos tenemos un pasado. Desafortunadamente, el tuyo te ha alcanzado antes de tiempo. - Dice mi padre.

-Te contaré una historia ¿vale? -Dice mi madre y puedo ver como los ojos comienzan a cristalizarse. -Hace 20 años, tuve un amorío. Un amorío con un ser demasiado poderoso, ese ser disponía de todo lo que quisiera. Me enamoré profundamente de él, alguien mitológico y poderoso.