챕터: 65

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Me desperté sobresaltada.

Me dolía el pecho y no entendía el porque, me sudaba el cuerpo como si hubiera tenido una pesadilla, me temblaba las manos como cuando tengo nervios o ansiedad. Odiaba y detestaba este sentimiento de angustia.

El vientre también me dolía, sentía como si mi bebé sintiera lo mismo que yo. Además sentía que algo se movía con fuerza, como una medida, pero es estraño ya que apenas estaba en los primeros meses o semanas de gestación. Bueno pensándolo bien llevaba tres meses casi y medio, no se cómo es que el tiempo avanza tan rápido que ya llevaba ese tiempo.

Hice un par de respiraciones, la doctora me las enseño pero no sé porque, aunque le conté que solía tener unos ataques de ansiedad y ella me recomendó tomar respiraciones para calmarme.

De repente la puerta se abre, mi madre estaba de pie, se acercó, casi no le podía ver el rostro, pero algo me decía que algo andaba mal.

— Cariño, quiero que mantengas la calma.

— ¿Porque lo dices mamá? Me preocupas — hablo con evidente preocupación.— Mamá, me asustas.

Se mantenía callada y eso me asustaba cada vez más, me entraba escalofríos en el cuerpo, me hacía sentir ansiosa, me sudaba las manos, me ponía muy mal. Y no entendía el porque.

— Jungkook está en el hospital, tuvo un accidente.

Lleve mis manos a mi boca, cubriendo a la misma, mis lágrimas fueron liberadas recorriendo mis mejillas, bajaban con fuerza. Ahora entendía esta presión en el pecho, que no me deja respirar, se volvía cada vez más fuerte. Me ahogaba y me asfixiaba.

— Ma-mama, llévame por favor — hablé como pude, sollozaba y me sobaba en el pecho, intentando calmar este dolor.

— Si cariño, lo haré pero tranquilízate.

Lloraba y no dejaba de hacerlo, me dolía. Solo quería llegar al hospital y saber cómo se encontraba, quería saber si estaba herido, si estaba bien. Algo, quería saber si estaba completamente bien.

Minutos más tardes nos encontrábamos en la sala de urgencias, los padres de Jungkook ya se encontraba ahí, la señora Jeon lloraba en los brazos de su esposo, al verme llegar. Ella me recibió con los brazos abiertos en cuánto me acerque, este feo sentimiento seguía ahi.

— ¿Les han dicho algo? — su madre nego.— ¿Que sucedió?

Hablaba en un hilo, me seguían temblando las manos, parecía que tenía un vibrador o algo así. Modo vibrador encendido. Bueno siguiendo en lo importante, ambos padres se miraron, la señora se fue a los brazos de su esposo, de nuevo. Entonces hablo el señor Jeon.

— Nos dijeron que el auto de Jungkook choco con otro auto, el cual iba encontrá al de mi hijo. El auto dió vueltas y es todo lo que sabemos.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, los cuales brotaban como una cascada, daban pequeñas caricias en mis mejillas, susurrando palabras tristes. Mis padres me tomaron de los hombros, abrazándome de esa manera, sintiendo su cariño y apoyo. Mis manos cubrían mi boca para callar cada sollozo que salía de la misma, mi cuerpo vibraba con fuerza, y daba como un pequeño brinco, como cuando tiene uno hipo.

Veía borroso, no podía respirar, y sentía que no era por mi llanto, la ansiedad se estaba haciendo presente. Me temblaba las manos, y me sentía mareada, escuchaba todo lejano, me alejaba de la realidad. Sentía que mi madre me hablaba, pero no la escuchaba con claridad. Parecía que estaba bajo el agua y que la voz se escuchaba como ahogada, era amortiguada por la misma. Pero era extraño. Todo me daba vueltas, todo parecía estar en movimiento a mi alrededor, parecía que estaba en uno de esos juegos mecánicos los cuales, uno siempre termina mareado y vomitando.

— ¿T/n, me escuchas? — su voz era tan lejana.

Y todo se volvió oscuro.






#







Me duele la cabeza, dónde estaba, no sabía en dónde estaba. Pero la cama en la que me encontraba, estaba un algo dura, pero se sentía muy chistoso. Me sentía mareada, todo me daba vueltas, quise abrir los ojos.

¡Mala idea!

Había una luz brillante la cual no me dejaba ver más allá de la luz, no es como si estuviera viendo la luz, la luz que dicen que no se debe ver. Al menos que sea tu momento de descender, eres una luz cegadora. Parpadeo un par de veces y abro los ojos lentamente.

Un hospital, no recordaba que me había desmayado en el hospital. Aunque no entendía el porque siempre, si no me equivaba y no tenía mala memoria, siempre sentía que me dolía el cuerpo, como si hubiera pasado encima de mi un tractor o algo más pesado. Solté un bufido, estar sola en una habitación de hospital podía ser demasiado aburrido, debería a ver un tutorial en Youtube, sobre que hacer en caso que estés aquí. Movia mis manos impaciente mente, me dolía un poco el abdomen, lleve mis manos hacia esa zona, seguía plano, pero sabía que ahí se encontraba. Me escuchaba y todo, talvez no podía sentirme, porque estaba lo suficiente pequeño, aunque pensadolo bien bueno no sé, era nueva en este tema, el podía sentirme a su modo, desde adentro, pero el solamente se quedaba quieto, dormido.

La puerta se abrió de golpe, causando que diera un pequeño saldo del susto que me provocó, lleve mi mano a mi pecho pues mi corazón se encontraba acelerado. Sentía que estaba tan agitado que se podría desmayar, pero los corazones no hacen eso. Mamá se encontraba en la puerta, al ver que estaba despierta, se acercó apresuradamente.

— Mi princesa, despertaste.

En cuanto se acercó y me abrazo, fue lo que me dijo en un susurro, su calor, su cariño maternal me reconfortaba. Me mecía como si fuera un bebe, mamá siempre me a cuidado y mimado, solamente que ya no lo hace a menudo. Aveces la empresa o la fundación que tenía le absorbía el tiempo, parecía un empleo, pero ella amaba ayudar, al igual que la abuela. Ambas eran muy buenas, tenían un corazón tan bueno, que ellas decían que había hederado ese sentimiento por así decirlo.

Mama se separó y me miró, acaricio mi cabello y luego mi mejilla, me sentía como una niña, me besó la frente. Aveces sentí que nuestra relación no era la misma.

— ¿Como te sientes cariño? — pregunto con delicadeza.

— Creo que me siento bien.

Me miró por varios segundo y luego me abrazo, algo extraño sucedía y eso me estaba poniendo nerviosa como también a su vez, me estaba asustado. Tenía un feo sabor en la boca, no crei que me hayan dado alguna medicina. Era un extraño sabor raro, no me gustaba.

— Cariño, quiero que mantengas la calma a lo que te diré.

— Ok, si mami — asentí con tranquilidad, pero las manos me empezaban a sudar.

— Se que recuerdas el porque estamos aquí cierto — asentí, por Jungkook. — Pues ya sabemos cómo está.

Hizo una pausa la cual me hacía ponerme más nerviosa, como también me ponía ansiosa. ¿Porque no me lo dice ya? Tan malo era, por eso no me lo quería decir, empezaba a hiperventilar. Y eso no era bueno para mí estado.

— Jungkook está en coma.

Coma. Eso se repetía mucho en mi cabeza, estaba prácticamente entre la vida y la muerte, o como mi abuela decía, en un estado vegetal, durmiendo, pero al mismo tiempo despierto. Estaba en coma, y eso me daba miedo, porque habido casos de que la gente no despierta o de que pasan años y al fin desñuery, pero si soy depende de la gente que lo rodea, sus cuidados y el ánimo.

Mi querido kookie estaba en coma y me destrozaba.

Mi Niñero Es El PLAYBOY? - JJK ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora