Nos detuvimos fuera de la taberna y lugar de hospedaje en Posada, habían pasado cinco años desde lo de Renfri en Blaviken y con ello cinco inviernos que había pasado con Geralt, entre los cuales entrene y estudie para poder acoplarme a su estilo de vida, esto le permitía hacer su trabajo y me permitía a mi hacer mi trabajo con "armonía".
Tras atar a los caballos, nos adentramos al lugar y nos sentamos en una mesa apartada, uno frente al otro.
Procedí a ir por unas cervezas las cuales me entregaron casi de inmediato, noté que en el centro del lugar comenzaba a cantar un bardo
-A salvo te crees. Mas ten cuidado, aquí en Posada, sabio es no ceder. El lucio buscara. Mostrar tus temores, o el dragón que vuela y siembra horrores. La bruja podrá, lanzar sus pociones, para que abortes sin mas dilaciones- canto.
-¡Abórtate de aquí! grito un hombre lanzándole pan seguido de otros que hicieron lo mismo.
-Oigan, oigan, déjenme en paz- dijo retrocediendo el bardo para luego proceder a recoger el pan y guardarlo en sus pantalones- estoy tan feliz de que todos hayan venido a verme.
Reprimí una risa.
-No estaría mal si la letra fuera diferente- dije para luego tomar un trago de mi cerveza.
-Mhmm...-emitió Geralt.
Permanecimos en silencio. No en uno incomodo, esos días habían quedado atrás, fue cuestión de tiempo acostumbrarme a esos momentos en los que el parecía mas bien reflexionar o sin la necesidad de hablar. Era parte de su personalidad.
-Demonios- murmuro mirando de lado tras de mi.
-Me encanta como te sientes en la esquina a cavilar- hablo el bardo.
-Nos gusta beber solos- hablo Geralt intentando espantarlo de nosotros mientras yo intentaba reprimir una sonrisa de burla.
-Si, claro bien- dijo y siguió- nadie dudo en comentar sobre mi presentación, excepto, ustedes.
-Por favor- siguió- no dejen esperando al pobre hombre con pan en sus pantalones. Deben tener una opinión al menos, tres palabras o menos.
-Hola- saludo viéndome rápido al proceder a sentarse a mi lado.
-Hola- salude.
-No son reales- formulo Geralt.
-¿Qué no son reales?- pregunto.
-Las criaturas en tu canción- aclare captando su atención a lo que me vio mas.
-Oh, hola, belleza ¿podrían decirme como saben eso?- pregunto sonriéndome.
Alce una ceja y mire a Geralt quien lo miro serio.
-Oh lo siento, ¿es tu pareja?- pregunto apresurado apartándose un poco de mi lado- no sabia, perdón.
Reí.
-Es de consuelo que aun me encuentren atractiva- comente hacia Geralt y luego mire al bardo- y no, no somos pareja.
-¿Por qué no lo harían? Es decir, encontrarte atractiva, es decir solo viajas con un hombre y parecen conocer respecto a las criaturas- comento a lo que lo mire y luego dirigí la mirada a mi frente señalando lo obvio para mi.
-Oh, esto es divertido. Un tipo de cabello blanco, corpulento, dos espadas bastante aterradoras, acompañada de una mujer de cabello negro como la noche, desarmada y una gema en la frente- conto- ya se quienes son.
Geralt se levanto tomando el pequeño saco de dinero que dejo caer una sola moneda como pago.
Saque la mía, que acordamos era de reserva y coloque mi moneda de pago.
ESTÁS LEYENDO
The Witcher Raven; G. De Rivia
أدب الهواةSinopsis La vida de Adreanna de Kaedwen no ha sido facil, nacida con la marca del cuervo en su hombro, al igual que algunos miembros de la realeza en otros reinos no hizo de su vida mejor, al igual que la de sus semejantes, aun menos cuando llego a...