The Witcher Raven; G. De Rivia

Capitulo 33.

Ante Geralt y de mí, se encontraba Ciri golpeando al muñeco de paja con los movimientos que antes le había enseñado el primero, por otro lado Circe estaba practicando los movimientos que le había enseñado cargando con el peso de mantener una cristalización con la niebla, lo cual no era muy fácil considerandos las enromes posibilidades de distracción que en este caos eran sus pensamientos y los gruñidos de Ciri ante sus fracasados intentos.

Me sentía aliviada con que no tendrían que preocuparse por lo que necesitaban usar, había varias prendas que mis hermanas y yo usamos y confeccione para su altura y complexión, esto era otro factor a beneficio de lo que no deberían preocuparse en su entrenamiento haciéndolo un poco más cómodo.

Por otro lado, Geralt formaba su nueva armadura, verificando que cada pieza fuera de su talla mientras yo las evaluaba, otro factor para su fracaso por distracción.

-De nuevo- ordené cuando vi como Ciri fallaba en atrapar la espada de entrenamiento y gruñendo y con ello desconcentraba a Circe.

Ambas gruñeron y volvieron a intentarlo.

Ciri golpeo al muñeco de un lado al otro, mientras que Circe formaba unas un poco menos temblorosas cuchillas cristalizadas de bruma que movía con el movimiento de sus brazos, hasta que se distrajo cuando su hermana había fallado en tomar la espada y esta caía en el piso, a lo que ambas emitieron un— "mierda"

-Lenguaje- regañe.

-Solo estamos repitiendo- hablo Circe.

-Una vez más- pidió Ciri.

-Ya basta- hablo- fue suficiente por hoy, mañana continuaremos.

-Puedo hacerlo- hablo Ciri.

-Sabemos que podrás, pero es hora de comer- dije.

Ciri nos ignoró y tomo la espada del suelo para repetir sus movimientos, en lo que Geralt se levantó y camino en su dirección, cuando Ciri dejo caer la espada de entrenamiento y se disponía a levantarla le fue impedido por el pie de Geralt.

-Necesitas descansar, ambas. De otro modo no tendrán resultados- dijo tras levantar la espada del suelo.

-Sir Lazlo, me protegió en Cintra y dijo que no ser perfecto significa morir- hablo Ciri.

-Si, Lauren decía lo mismo- concordó Circe.

-Si bueno, no veo que tú te hayas quejado de interrumpir tu entrenamiento- dije a lo que Circe sonrió.

-No quiero arriesgarme a que los gruñidos de mi estomago despierte a los muertos- respondió Circe sonriendo mientras miraba a Geralt ya que el había hecho una referencia días anteriores en el entrenamiento.

-Si, pero el hambre hace que todo sepa mejor- hablo Ciri comenzando a seguirnos cuando comenzamos a caminar al comedor en el interior de la fortaleza.

-Y te hace más lenta- hablo Geralt tras lo cual Ciri le arrebato la espada de entrenamiento y con ello choco con su hermana quien sonrió brevemente antes de quitar la sonrisa, ambas se veían idas.

-¿Ciri? ¿Circe?- llame.

Ambas parpadearon.

-Aquí están seguras- hablo Geralt acercándose.

-¿Otra vez el caballero negro?- pregunte.

-No- emitieron en susurro.

-Si aun las sigue...- hablo Geralt antes de ser interrumpido por Ciri que comenzó a caminar pasando de él y de mí, con su hermana poco después siguiéndola luego de dirigirme una mueca.

-¿Quién hará el almuerzo?- fue lo que pregunto mientras se iba.

Mire a Geralt con una mueca y el solo pudo encogerse de hombros antes de tenderme la mano para enderezarme de mis rodillas por antes estar, aunque ya nada cerca, de la altura de las mellizas, luego ambos nos dirigimos al interior de la fortaleza siguiéndolas.