2. Pertenecer.

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PERTENECER

Kazutora y Kazumi tuvieron diferentes opiniones de Mikey

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Kazutora y Kazumi tuvieron diferentes opiniones de Mikey. Mientras que a Kazutora no le agrada en lo más mínimo porque su arrogancia le recuerda a su padre, Kazumi está maravillada con él. Las semanas pasan y Kazutora no lo tolera ni un poco más y Kazumi parece encontrarlo cada vez más interesante, lo que lo ha tenido de mal humor el último par de días porque no puede creer que no lo desprecie por el parecido con su padre.

— ¿Qué sucede, Kazutora? —le pregunta Baji, mirándolo por un momento antes de ver al frente de nuevo, conduciendo su motocicleta.

—Nada. No es nada —responde Kazutora, tratando de deshacerse de los recuerdos de su padre golpeando a su madre, a Kazumi y a él mismo antes del divorcio (gracias a Dios o quien fuera) y él saliera de sus vidas.

— ¡Ey, Baji! ¡No te adelantes a mi Hawk Maru! —reclama Mikey, acelerando para estar a un lado suyo por la calle.

— ¿Hah? ¡No es mi culpa que seas tan lento! —contesta Baji.

— ¡Todos ustedes deben ir detrás de mí! —dice el pequeño rubio.

—Sí, sí... —responde Draken con un tono cansado—. De todas formas, no es como si fuera a acelerar mucho. A ella todavía le da algo de miedo —añade.

— ¿Te encuentras bien, Kaz? —le pregunta Mitsuya a un costado, interesado, mirando a la chica.

Kazumi asiente con la cabeza, presionando su mejilla contra la espalda de Draken, sus brazos sosteniéndolo por la cintura.

—Sí, es mejor que la vez anterior. Da menos miedo —responde.

—Cuando menos te des cuenta, Draken irá tan rápido y tú no sentirás miedo. Iremos a todos lados —dice Pah-chin.

Kazumi le sonríe, intentando controlar el temblor de su cuerpo, agradecida de que es menos terrible que el de la última vez. Mejora cada vez más, pero aún se pregunta si llegará un día en que, como dijo Pah, no sienta ni un poco de miedo.

La primera vez que subió a la moto de Kei, gritó tan fuerte que Kazutora temió que se hubiera lastimado la garganta. La segunda vez no fue mejor, pero tampoco fue peor, sino que permaneció igual de aterrador. Cuando todos comenzaron a salir juntos por las tardes, Draken se ofreció a llevarle con él debido a que Baji llevaba a Kazutora, y él es siempre tan considerado como para no ir tan rápido.

— ¡Mi halcón es la moto más rápida del planeta! —exclama Mikey, yendo al frente una vez que todos reducen un poco la velocidad para dejarlo adelantarse.

Kazumi se ríe al escucharlo, conteniendo las ganas de suspirar. Le agradan todos los amigos de Kei, pero Mikey es un tema aparte. Diferente al desagrado que su hermano siente por él, ella lo adora, por expresarlo de alguna forma. Él es más bajo que todos los demás, usa sandalias por algún motivo, tiene el cabello rubio y sedoso cayéndole encima del rostro casualmente, ama dormir, es berrinchudo y algo arrogante, pero a ella no le molesta en lo absoluto. De hecho, le gusta.

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