En donde Hanagaki Takemichi intenta una y otra vez evitar la muerte de Murata Kazumi para así salvar a Sano Manjiro del abismo en el que está destinado a caer.
| TOKYO REVENGERS X OC |
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— ¡Maldición, ya me tiene harto! ¡Parece un anciano durmiéndose después de comer! —se queja Draken en un grito cuando terminan de comer y la cuenta ya está pagada, levantándose de su asiento y mirando con una evidente molestia a Mikey.
—Yo creo que es lindo —opina Kazumi, acariciando el cabello de su novio, quien tomó la decisión de usar su regazo como almohada para su siesta.
Draken resopla, mirándola desde su posición.
— ¿Nos vamos? —pregunta.
Kazumi asiente, alzando la mirada brevemente para mirarlo y después mira a su novio y sonríe, enternecida.
—Mikey, ¿puedes levantarte? Es hora de irnos —le dice.
Mikey balbucea algo inentendible, enderezándose como puede y recargando su cabeza en su hombro. Draken se las arregla para subirlo a su espalda con un poco de su ayuda y salen los tres juntos del restaurante.
—Dios, no tiene remedio —masculla frustrado.
Kazumi se ríe, divertida, y lo sigue por las calles porque no tiene idea de adónde van y aún falta un rato para que sean las tres y vaya a encontrarse con Keisuke. El camino es un poco largo y la mitad de este se la pasa riendo de lo que su novio dice entre sueños —nada coherente, pero aun así le resulta hilarante— hasta que se detienen finalmente frente a un edificio enorme.
— ¿Por qué el hospital? —le pregunta.
—Tenemos algo que hacer aquí. Cosas de ToMan —explica Draken brevemente.
Kazumi asiente, entendiéndolo.
— ¿Quieres que los espere afuera?
—Sería lo mejor —asiente, moviendo al chico sobre su espalda para despertarlo de su sueño—. Mikey, ya llegamos —le avisa.
— ¿Qué hacemos aquí? —pregunta adormilado.
—No tardaremos —contesta.
— ¿También vienes, Kaz? —inquiere, mirando a su novia cuando es puesto sobre sus pies nuevamente.
Kazumi niega.
—Yo los espero aquí.
Mikey asiente, llevando una mano a su cabeza para dejar una caricia en su pelo oscuro y sigue a Draken al interior del hospital. Kazumi los ve desaparecer en el interior y da la media vuelta, riéndose cuando atrapa a Takemichi a punto de seguirlos, notando su rigidez al ser atrapado.
—Eh, yo... —balbucea, intentando encontrar una excusa.
